El miércoles 23 de noviembre el mundo reconoció por primera vez el Día Internacional contra la Impunidad, instaurado para coincidir con el aniversario de la masacre de periodistas el 23 de noviembre de 2009 en Filipinas. Ese día al menos 57 personas, entre ellas 32 periodistas y trabajadores de los medios, fueron asesinados en una colina cubierta de hierba en la provincia de Maguindanao en el sur de Filipinas, mientras viajaban en un convoy electoral.
El día inaugural fue organizado por Intercambio Internacional por la Libertad de Expresión (IFEX, por sus siglas en inglés) como un “llamado a la acción para exigir la justicia para todos aquellos que han sido asesinados mientras ejercían su derecho a la libertad de expresión y para visibilizar el problema de la impunidad”, según IFEX.
IFEX cuenta más de 500 periodistas asesinados en los últimos 10 años, y los asesinos han quedado en libertad en nueve de cada 10 casos.
El Comité para Proteger a los Periodistas (CPJ) mantiene un índice de impunidad, que muestra que los países con algunos de los peores índices de impunidad, como Irak, Somalia, Filipinas y México, siguen sin mostrar mejoras en cuanto a llevar a los asesinos de periodistas a la justicia.
En América Latina, según el índice de 2011, Colombia tuvo avances en términos de procesar crímenes contra periodistas, pero Brasil fue sumado nuevamente al índice. En total, el CPJ cuenta 887 hombres de prensa asesinados en todo el mundo desde 1992. Cuarenta han sido asesinados sólo este año, 22 de los cuales cayeron en Latinoamérica.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) dijo que el 2011 ha sido “el año más trágico” en dos décadas para la prensa latinoamericana.
Una columna editorial en el diario La Nación señala que no son sólo los gobiernos son lo que deben tomar mejores medidas para acabar con la impunidad: “Los dueños de los medios son igualmente responsables por la seguridad de su personal, así como los mismos periodistas individuales. Sobre todo, la lucha contra la impunidad es una lucha de la gente que debe exigirle a sus gobiernos que rindan cuentas, así como exigir justicia luego de esos crímenes atroces”.
Asimismo, Ricardo Trotti de la SIP, en una columna publicada en el diario Vanguardia, de México, escribió que un esfuerzo más concertado y global es requerido para combatir la impunidad, sugiriendo quizás que el Banco Mundial y otras instituciones que ofrecen asistencia financiera para el desarrollo condicionen su apoyo hasta que existan pruebas de que los países han reducido la impunidad concretamente. “Muchas veces, la billetera vacía es lo único que nos moviliza,” escribió.
(Publicado por el blog Periodismo en las Américas)