La denunciada periodista con su jefe Rupert Murdoch
Tras más de 12 horas prestando declaración por su relación con el escándalo de las escuchas telefónicas, de las que negó tener ningún conocimiento, Rebekah Brooks, la mano derecha del magnate de los medios de comunicación Rupert Murdoch, fue puesta en libertad bajo fianza.
Ella dimitió hace unos días como consejera delegada de News International, la rama británica de la corporación de Murdoch, por el escándalo de las escuchas ilegales del grupo. Fue directora de The Sun y News of the World, el tabloide dominical que cerró tras verse inmersos sus periodistas en el escándalo de los chupuneos.
El arresto de Brooks se produjo cuando se presentó con cita previa en una comisaría de Londres. No esperaba ser detenida.
El arresto es una figura legal que da poderes a la policía para efectuar registros e incautarse de documentación en poder de las personas retenidas tras una citación. Un portavoz de la periodista ha declarado que ella “está ayudando a la policía con sus consultas. Acudió a la comisaría voluntariamente, pero no sabía que iba a ser arrestada”.
Según un comunicado de Scotland Yard, fue arrestada como sospechosa de conspirar para interceptar comunicaciones y sospechosa de haber violado la ley de Prevención de la Corrupción. Eso significa que es investigada por las escuchas ilegales del News of the World y por posibles pagos ilegales a miembros de la Policía Metropolitana a cambio de información confidencial.
Rebekah Brooks, de 43 años, era directora de ese tabloide cuando un investigador privado a sueldo del diario interceptó el buzón de voz de Milly Dowler, la niña de 13 años secuestrada en marzo de 2002 y asesinada nada más desaparecer.
Brooks siempre ha negado que tuviera conocimiento de esas escuchas. A pesar de ello, Brooks se vio obligada a dimitir de su cargo después de que también lo hiciera Les Hinton, su antecesor en News International y hasta el viernes hombre fuerte en The Wall Street Journal.
LA OPERACION POLICIAL
La operación policial «Weeting» está centrada en la investigación de las escuchas telefónicas realizadas por periodistas del extinto «News of the World» a famosos, políticos e incluso a una niña que fue asesinada.
Brooks es la décima persona detenida en el marco de la investigación del escándalo de las escuchas telefónicas del tabloide, que fue reabierta por la Policía a comienzos de este año.
Brooks dirigió el tabloide entre 2000 y enero de 2003, cuando se llevaron a cabo escuchas ilegales de móviles de políticos, famosos y gente corriente en busca de exclusivas, aunque siempre ha alegado que no sabía nada de esas prácticas.
Si bien fue en 2006 cuando se desveló por primera vez que el «News of the World» había recurrido a las escuchas para conseguir jugosas exclusivas, la trama alcanzó nuevas proporciones la semana pasada al revelarse el caso la niña asesinada Milly Dowler, cuyo móvil fue intervenido después de desaparecer en 2002.
Desde entonces ha dimitido, además de Brooks, Les Hilton, responsable de la agencia estadounidense Dow Jones y colaborador de Murdoch durante 52 años, el taloide ha sido clausurado y el magnate a renunciado a una opción para comprar la totalidad de las acciones del canal de televisión BSkyB.
(Basado en artículo de Europa Press)