Dos niñas británicas sufren un trastorno genético llamado ‘cutis laxa’ que hace que los tejidos no tengan elasticidad y formen pliegues arrugados como si de dos ancianas se tratara.
Niamh e Isabel tienen seis y cuatro años respectivamente. Su madre, Trudy Carroll, ha afirmado a The Sun que cuando se quedó embarazada por primera vez nada hacía sospechar el trastorno genético que sufriría el bebé.
“Cuando nació, Niamh era muy pequeña, estaba arrugada y parecía más una anciana que no un recién nacido”, ha comentado.
Al principio, los médicos no dieron mayor importancia a Niamh, pero unos meses después, le diagnosticaron la enfermedad. Para entonces, Trudy ya se había vuelto a quedar embarazada. Así, Isabel nació con el mismo trastorno genético que su hermana mayor.
Unas 200 familias de todo el mundo padecen esta enfermedad que también afecta a los tejidos internos, lo que significa que puede generarse complicaciones en órganos como el corazón, los pulmones o el sistema digestivo