Muchos han calificado que el rescate fue un reality show, pero que el mundo es así. Por lo tanto, nadie puede rasgarse las vestiduras por ello.

Pero el rescate de los 33 mineros chilenos ha dejado muchas lecciones.

La primera, la más primordial, que nunca hay que rendirse.

La segunda, que el esfuerzo aunado de los hombres y las posibilidades de las nuevas tecnologías, empiezan a tener pocos límites. Chile dado en eso una buena lección.

La tercera, que ahora llega la parte delicada del asunto tanto para los mineros liberados como para sus familias dando por descontado que el Gobierno chileno y los de todos los países con cuencas mineras- como la peruana -tomarán buena nota y obligarán a las empresas a adoptar las medidas de seguridad necesarias para que esto no vuelva a ocurrir.

La parte delicada del asunto es el aspecto mediático. El mejor guionista del mundo nunca hubiera podido imaginar una telenovela como la que se acaba de vivir durante cincuenta días, dado que la noticia de portada surgió no cuando los mineros se quedaron aislados sino cuando dieron la primera señal de vida con aquel papel que lograron enviar los encerrados.

Durante todo este tiempo se ha mantenido la antorcha del interés y la información porque a medida que se acercaba la hora del rescate, en vivo y en directo, el mundo se volcaba en un punto aislado del desierto de Atacama.

¿Los Puntos Débiles?

Ahora empezaron a aparecer los puntos débiles. ¿Cuánto vale una foto del minero y su bebé que nació durante su estancia en el averno? Y la entrevista con el “médico” del que se descubrió que tenía tres familias? ¿Cuánto vale para una televisión el tener en estudios a estos esforzados mineros?

Pero esto es lógico: la mercancía que compran las televisoras o las revistas en su caso, les benefician clarísimamente y los protagonistas también tienen derecho a lucrarse.

Las familias de esos felices ahora mineros chilenos han aprendido rápido. El dolor que han tenido que soportar durante 69 días tiene precio.

Ha sido un reality show es cierto, pero el mundo es así. Nos compadecemos de los que sufren y nos alegramos enormemente del éxito de la operación rescate, pero no hay que criticar fácilmente a quienes a cambio de este espectáculo quieran unos dólares.

La Cobertura En Cifras

* 1.300 periodistas trabajaron en el terreno

* Hasta 50 mil dólares ha llegado a ofrecer una televisisora japonesa por una entrevista en exclusiva con alguno de los mineros chilenos.

* 10,6 millones de personas siguieron la CNN, Fox News o la NBC el rescate del primero de los 33 mineros. A lo largo del día mantuvieron una media 5 millones entre las tres.

* La BBC gastó más de 100.000 libras (casi 180 mil dólares) en su cobertura del rescate,