Un proverbio chino afirma que “una imagen vale por mil palabras”. Esto se engrandece cuando se trata del dibujo sin palabras porque tiene una mayor creatividad e invención de estilo que la foto o el dibujo que alterna con lo verbal: su comicidad está más realizada porque es enteramente visual, porque deslumbra al destinatario y lo sorprende.
Como lo dicen los entendidos, el dibujo, por sí solo, puede tener contenidos sólidos acerca de determinadas prácticas de la realidad social, situaciones estereotípicas de la ciencia, los hábitos, la moda, las costumbres.
El dibujo humorístico pone en evidencia una determinada habilidad de visión de la realidad la cual es presentada de manera tal que se puede reír de ella.
Es decir, el dibujo humorístico muestra otro punto de vista de la realidad. Al mismo tiempo, tiende a evaluar la realidad, al interpretarla, y en consecuencia, tiende a ser crítico.
A continuación algunas de las geniales muestras de lo que significa el dibujo humorístico.