Respecto al suicidio de Philip Marshall, un investigador del atentado del 11S, ha afirmado que la muerte de este escritor es muy sospechosa, ya que ha escrito un libro que contenía informaciones atractivas sobre lo sucedido en 11S.
Conforme a las revelaciones de Barrett, Marshall había informado a sus amigos que por escribir este libro “había puesto en peligro su vida”.
Asesinaron a Marshall porque tenía informaciones muy secretas que podrían poner en peligro tanto al Gobierno estadounidense, como a la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU. (CIA, por sus siglas en inglés), ha resaltado el analista.
Marshall, su hijo Alex de 17 años y su hija Micalia de 14 años fueron hallados muertos en su casa el día 6 del pasado mes de febrero.
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