Tokio, 9 de julio Países desarrollados y en desarrollo acordaron hoy en Japón que el cambio climático es uno de los mayores desafíos y prometieron un nuevo pacto climático para 2009, pero los países emergentes no quisieron poner metas sobre reducciones de emisiones de gases del efecto invernadero.
El brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y los otros gobernantes del Grupo de los Cinco (G5) aprovecharon el encuentro con los líderes de los ocho países más ricos (G8) para reiterar sus pedidos de levantar barreras comerciales y las subvenciones agrícolas y advertir que son causa de la crisis alimentaria.

Fuente: http://www.elpatagonico.net/index.php?item=viewlast&ref=ultimas&id=63713&sec=ext
El Grupo de los Ocho (G8) países más industrializados acordó ayer reducir a la mitad las emisiones de gases que provocan el calentamiento terrestre para el año 2050, en el segundo y penúltimo día de su cumbre anual, celebrada esta vez en la norteña ciudad japonesa de Toyako.
Los 16 países del G8 y el G5, más Corea del Sur, Australia, e Indonesia, se reunieron hoy en Toyako y emitieron un comunicado conjunto al margen de la cumbre. Estas naciones son responsables del 80% de las emisiones de gases contaminantes.
“Apoyamos una visión compartida para una acción cooperativa a largo plazo, incluyendo una meta global a largo plazo para la reducción de las emisiones, que asegure el crecimiento, la prosperidad y otros aspectos del desarrollo sustentable”, dijeron las 16 naciones en el texto, citado por la cadena CNN.
El G8 está integrado por Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, Canadá, Italia, Japón, Rusia y Alemania.
Pero los países emergentes -China, India, Sudáfrica y México, además de Brasil- no estuvieron dispuestos a apoyar expresamente la meta de una reducción del 50% para 2050.
Jim Connaughton, presidente del Consejo de Calidad Medioambiental del presidente estadounidense, George W. Bush, dijo que varias de las economías del G5 estaban a favor de respaldar la meta del G8, pero no lo suficiente como para ponerlo por escrito en la declaración. El funcionario no mencionó a ningún país.
La Casa Blanca no habló de un revés, y el hecho de que el grupo se haya reunido y acordado reducir emisiones “dará mayores confianza y compromisos” de cara al año próximo, según dijo Connaughton.
El comunicado también prometió apoyar los esfuerzos de la ONU para concluir un nuevo pacto climático para el 1 de enero de 2009 que reemplace al Protocolo de Kyoto cuando expire, en 2012.
El grupo ecologista y humanitario Oxfam Internacional dijo que la declaración no tenía ningún sentido ni utilidad sin metas concretas de reducción de emisiones.
Las naciones emergentes habían reclamado ayer al G8 objetivos más claros y metas más bien a mediano plazo, como reducir las emisiones entre un 25 y 40% para el 2020.
Los países emergentes también urgieron hoy al G8 a levantar las barreras comerciales y los subsidios agrícolas y advirtieron que estas mediadas son parte de la causa del imparable aumento de los precios mundiales de los alimentos y el combustible.
El G5 se manifestó además a favor una rápida conclusión de la Ronda Doha de negociaciones de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Este reclamo es compartido por la Argentina y fue hecho propio por el Mercosur y sus países asociados en la cumbre regional realizada la semana pasada en la ciudad argentina de Tucumán.
El objetivo debe ser la creación de un “sistema de comercio internacional justo, abierto, razonable y no discriminatorio”, señaló una declaración conjunta, que se dio a conocer antes del encuentro con los líderes del G8.
Los países emergentes denuncian “distorsiones proteccionistas”, incertidumbre financiera y el permanente aumento del precio del petróleo crudo y los cereales. También se manifestaron preocupados por la inflación.
Para lograr un sistema financiero internacional estable y transparente, los órganos de decisión como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y Banco Mundial (BM) deben oír más a los países en desarrollo, agregó el documento conjunto del G5.