Primera proclama ecuménica por el cuidado del planeta
6:00 p.m. | 16 set 21 (AO/MLS).- En una declaración conjunta sin precedentes, el papa Francisco, líder de la Iglesia católica romana, el patriarca ecuménico Bartolomé, líder espiritual de la Iglesia ortodoxa, y el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, líder de la comunión anglicana mundial, hacen un llamado urgente a la población mundial: “sean cuales sean sus creencias o su visión del mundo, escuchen el clamor de la Tierra y de las personas que son pobres”. Además han pedido, sobre todo a aquellos que tienen responsabilidades mayores, “hacer sacrificios a corto plazo para asegurar el futuro; se necesitan economías justas y sostenibles”.
——————————————————————————————–
Los líderes de la Iglesia católica de Roma, la Iglesia ortodoxa y la comunidad anglicana, han publicado por primera vez un mensaje conjunto por la creación y ante la emergencia climática en el que insisten en la necesidad de cambiar los estilos de vida. “Debemos elegir comer, viajar, gastar, invertir y vivir de forma diferente, pensando no solo en el interés y las ganancias inmediatas, sino también en los beneficios futuros”, escriben. En el marco de la celebración del Tiempo de la Creación, los tres líderes religiosos hacen una especie de examen de conciencia y se confiesan arrepentidos de “los pecados de nuestra generación”.
“Hemos maximizado nuestro propio interés a costa de las generaciones futuras. Al concentrarnos en nuestra riqueza, nos encontramos con que los bienes a largo plazo se agotan para obtener ventajas a corto plazo. La actual crisis climática dice mucho sobre quiénes somos y cómo vemos y tratamos la creación de Dios”, añaden. En este sentido, reiteran que son las personas más pobres las que soportan “las consecuencias catastróficas de los abusos y las que menos responsabilidad han tenido en causarlos”, consecuencias por las que “hoy estamos pagando el precio”.
Ante esta situación, plantean una elección: aprovechar la crisis “como una oportunidad de conversión y transformación”. Por eso, piden huir de “las soluciones a corto plazo y aparentemente baratas” para adoptar una perspectiva más amplia. “Debemos cambiar de ruta y descubrir nuevas formas de trabajar juntos para romper las barreras tradicionales entre los pueblos, para dejar de competir por los recursos y empezar a colaborar”, continúan. En este sentido, piden a los que tienen mayores responsabilidades –quienes dirigen administraciones y empresas– que elijan los “beneficios centrados en las personas” y hagan “sacrificios a corto plazo para salvaguardar todos nuestros futuros”.
“Conviértanse en líderes de la transición hacia economías justas y sostenibles”, reclaman.
Las 5 claves de la histórica declaración ecuménica
1) El Tiempo de la Creación es una oportunidad para crear un cambio real en el mundo
El Tiempo de la Creación es la celebración cristiana anual de oración y acción por nuestra casa común. El Tiempo de la Creación comienza el 1 de septiembre, la Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación, y termina el 4 de octubre, día de la fiesta de San Francisco de Asís, el patrón de la ecología amado por muchas denominaciones cristianas. Los líderes escribieron que esta época especial del año es una oportunidad para cambiar nuestros hábitos y no mirar atrás. Semanas antes de la 26ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, los cristianos tienen la oportunidad de defender y crear un cambio real para nuestra casa común durante la temporada ecuménica.
“Ojalá no desperdiciemos este momento. Debemos decidir qué tipo de mundo queremos dejar a las generaciones futuras”, escribieron los líderes. “Mientras los líderes mundiales se reúnen el próximo mes en Glasgow para deliberar sobre el futuro de nuestro planeta, debemos hacer una pausa, reflexionar y tomar algunas decisiones difíciles. Como líderes de nuestras Iglesias, hacemos un llamamiento a todos, sea cual sea su creencia o visión del mundo, para que examinen su comportamiento y se comprometan a hacer sacrificios significativos por el bien de la Tierra que Dios nos ha dado”.
2) A pesar de los pecados del pasado, todavía tenemos la oportunidad de hacer lo correcto con la creación de Dios
Citando las Escrituras, los líderes recordaron cómo nuestra tradición cristiana común nos invita a practicar la “custodia”, porque “el medio ambiente es un bien colectivo, patrimonio de toda la humanidad y responsabilidad de todos. Pero hemos errado en nuestros caminos. “Hemos maximizado nuestro propio interés a costa de las generaciones futuras. Al concentrarnos en nuestra riqueza, nos encontramos con que los bienes a largo plazo, incluida la riqueza de la naturaleza, se agotan para obtener ventajas a corto plazo”, escribieron los líderes. Sin embargo, no todo está perdido. Tal y como ha dejado claro el reciente informe de las Naciones Unidas, aún estamos a tiempo de alcanzar los objetivos del histórico acuerdo climático de París.
3) El cambio climático es una cuestión moral y de vida
Los líderes nos recordaron a todos que la crisis ecológica y la emergencia climática son cuestiones morales y de vida. Si apoyas la vida, trabajas contra la crisis climática. “Dios manda: ‘Escoge la vida, para que vivas tú y tu descendencia’ (Dt 30,19). Debemos elegir vivir de otra manera; debemos elegir la vida”. Como hizo el papa Francisco con tanta fuerza en Laudato Si, los tres líderes destacan cómo la crisis climática afecta de manera desproporcionada a los más vulnerables entre nosotros. Se trata de miembros de la creación de Dios que han tenido poco que ver con las emisiones de gases de efecto invernadero que, según los científicos, están causando la emergencia climática, y que, sin embargo, sufren sus peores efectos.
“Servimos a un Dios de justicia, que se deleita en la creación y crea a cada persona a imagen y semejanza de Dios, pero que también escucha el clamor de las personas que son pobres. En consecuencia, hay una llamada innata dentro de nosotros para responder con angustia cuando vemos una injusticia tan devastadora”, escribieron los líderes.
4) Salir de estas crisis requiere una cooperación más profunda entre todos los cristianos
Los líderes señalan cómo el mundo está luchando contra las crisis actuales, incluyendo la emergencia climática, la pandemia de COVID-19, el hambre en el mundo, el sufrimiento económico, entre otros. El camino a seguir pasa por aprovechar esta oportunidad “a través de una renovada corresponsabilidad global y una nueva solidaridad”, que implica cambios para todos. “Cada uno de nosotros, individualmente, debe responsabilizarse de la forma en que utilizamos nuestros recursos. Este camino requiere una colaboración cada vez más estrecha entre todas las iglesias en su compromiso con el cuidado de la creación. Juntos, como comunidades, iglesias, ciudades y naciones, debemos cambiar de ruta y descubrir nuevas formas de trabajar juntos (Gn, 2.15)”.
5) Todos somos necesarios
Los tres líderes cristianos no limitaron su llamamiento especial para el Tiempo de la Creación a los cristianos; invitaron a todas las personas e instituciones a hacer su parte. “Juntos, en nombre de nuestras comunidades, apelamos al corazón y a la mente de cada cristiano, de cada creyente y de cada persona de buena voluntad”, escribieron. “Todos nosotros, seamos quienes seamos y estemos donde estemos, podemos desempeñar un papel en el cambio de nuestra respuesta colectiva a la amenaza sin precedentes del cambio climático y la degradación del medio ambiente. El cuidado de la creación de Dios es un mandato espiritual que requiere una respuesta de compromiso. Este es un momento crítico. El futuro de nuestros hijos y el de nuestra casa común dependen de ello”.
ENLACE. Mensaje conjunto para la protección de la Creación (completo)
Información relacionada
- COP26. Francisco: “Unirse para celebrar el Tiempo de la Creación”
- Tiempo de la Creación: una casa para todos siguiendo el ejemplo del Padre Dall’Oglio
- ¿Qué es el Tiempo de la Creación?
Fuentes
Revista Alfa y Omega / Web del Movimiento Laudato Si / Foto: The Archbishop of Canterbury