Iglesia en África: Con muchas historias por contar
6.00 p m| 27 ago 13 (NCR/BV).- Se presenta una nueva iniciativa que merece atraer el interés de todo el mundo católico: la Agencia Católica de Noticias de África o CANAA, una nueva iniciativa de medios diseñada para permitir que los católicos africanos puedan contar sus propias historias y difundir sus noticias.
La idea es hacer por África lo que la Unión Católica de Noticias de Asia (UCAN) y AsiaNews ya lo hacen para Asia y el Oriente Medio, que es dar a conocer información de la región “desde las trincheras”, y con un ojo en particular en las comunidades cristianas. Luego, John Allen Jr. quien redacta este análisis, reflexiona sobre la escalada de violencia en Egipto, apropósito de la mención de AsiaNews y haciendo referencia a una declaración del líder de la comunidad católica copta en Egipto.
Cualquier periodista occidental que ha pasado tiempo en África conoce la reacción habitual cuando conversa con alguno de los locales: “¿Por qué no informan de alguna buena noticia sobre África? ¿No pueden encontrar otra cosa que no sea africanos muriendo de hambre o matándose unos a otros?”.
También hay una versión católica de ese reclamo: “¿Tanto les cuesta informar sobre algún tema de África que no sea condones o el SIDA?”.
Y esto me quedó muy claro en el 2009, cuando Benedicto XVI visitó Camerún. El viaje fue rico en contenido, incluyendo un dramático desafío a la corrupción (dominada por el hombre fuerte del país, el presidente Paul Biya), y repetidas manifestaciones sobre la dinámica de una Iglesia joven y en crecimiento. Sin embargo, la única información resaltada por la prensa occidental fue el comentario de Benedicto en el avión papal, cuando declaró que los condones agravan el problema del SIDA. Como escribí en ese momento, nunca hice la cobertura a un viaje papal en el que la experiencia vivida y la historia que se contó en la prensa internacional contrastaran tanto, lo que dejó muy fastidiados a una gran cantidad de católicos africanos.
En un momento durante el viaje, me invitaron a hablar con cerca de 40 jóvenes católicos en Camerún, los que me acribillaron con preguntas acerca de por qué los periodistas distorsionaban las informaciones, de una manera que parecía deliberada, y francamente, no les puedo culpar por dicha afirmación.
No es que la prensa occidental no difunda información positiva sobre África. En términos laicos, hemos cubierto en gran medida la transición pacífica del apartheid en Sudáfrica, el nacimiento de una nueva nación en el sur de Sudán y la reputación de la buena gobernanza y el desarrollo económico en Botswana. En el campo eclesial, escribí hasta tener calambres en la mano, que África en muchos sentidos es el futuro de la Iglesia católica. Sin embargo, lo que se acostumbra con el continente africano, es hacer un barrido de información y levantar una historia que coincida con nuestros intereses y agenda, y dejamos lo demás de lado.
Este preámbulo va a modo de presentación de una nueva iniciativa que merece atraer el interés de todo el mundo católico: la Agencia Católica de Noticias de África o CANAA. Lo programado para la agencia es tener un período de pruebas de un año, que se inicia ahora en Agosto, con su base de operaciones inicial en Nairobi, Kenia -una opción estratégica, dado que Nairobi tiende a ser donde los medios de comunicación occidentales se establecen al llegar a África.
Según los organizadores, CANAA no sólo difundirá temas ligeros o vendedores. La gente detrás del proyecto son profesionales de la comunicación que entienden que a veces van a tener que agitar las aguas, pero su objetivo es doble: en primer lugar, obtener los datos correctos, en contraste con la dejadez y estereotipos que a menudo dominan el periodismo en África; y segundo, inyectar un poco de equilibrio, por lo que la miseria y el conflicto no son los únicos relatos.
El primer coordinador de la CANAA es el P. Don Bosco Ochieng Onyalla, sacerdote de Sudán del Sur que anteriormente fue el director de Radio en “Good News Radio” en la diócesis de Rumbek de ese país. Teniendo en cuenta las altas tasas de analfabetismo y el bajo acceso a la televisión, la radio es el único medio de comunicación en Sudán del Sur que llega a la gente común en su idioma local, y muchos observadores afirman que la radio católica es la voz de la sociedad civil.
El primer presidente de la junta directiva de la CANAA es el arzobispo Charles G. Palmer-Buckle de Accra, Ghana, por consenso, uno de los prelados más agudos e impresionantes del continente. La agencia tuvo una especie de pre-prueba en la Jornada Mundial de la Juventud en Brasil, con un veterano trabajador de los medios de comunicación de Nigeria, el P. Patrick Tor Alumuku, quien desde Río de Janeiro recogió historias africanas que la CANAA luego editó y preparó. Una de estas notas recogió el deseo de peregrinos africanos de realizar la JMJ, que le sigue a la de Cracovia en 2016, en territorio africano. El principal candidato parece ser Sudáfrica.
No hay todavía una presencia en Internet para la CANAA, aunque Ochieng está trabajando en el desarrollo de un sitio web y blog.
Los organizadores dicen que con el paso del tiempo, la meta es que la CANAA sea autofinanciable. En este momento, sin embargo, necesitan un mínimo de recursos para iniciar sus actividades. Teniendo en cuenta la realidad demográfica de la Iglesia en el siglo 21, cuanto más sabemos sobre África, más sabremos sobre el futuro de la Iglesia católica a una escala mayor.
Sobre el conflicto en Egipto
Hablando de AsiaNews, es un buen recurso para el seguimiento de los ataques contra objetivos cristianos actualmente en curso en Egipto. La semana pasada, la agencia publicó una lista de iglesias, conventos, monasterios y otras instituciones cristianas que, en ese momento, habían sufrido daños a manos de radicales, vinculados de una manera u otra a la Hermandad Musulmana. Dado que la violencia continúa sin disminuir, estos números necesitan actualizarse.
Hace una semana, sin embargo, los totales verificados por observadores ubicados en el mismo lugar de los hechos, según el informe de AsiaNews, se sitúan en:
- 14 iglesias y conventos católicos
- 35 iglesias ortodoxas y evangélicas
- Otras 9 instituciones cristianas
- 58 hogares cristianos
- 85 tiendas de propiedad cristiana
- 16 farmacias de propiedad cristiana
- 3 hoteles de propiedad cristiana en el Alto Egipto
- 75 autobuses y coches con ocupantes cristianos
Eso equivale a 247 incidentes, que a partir del 17 de agosto ha dejado siete muertos, 17 secuestrados, y cientos de heridos.
He aquí un ejemplo de las atrocidades. El 14 de agosto, cientos de extremistas musulmanes atacaron una escuela dirigida por monjas franciscanas de Bani Suef (Alto Egipto), donde presuntamente violaron a dos maestros. Tres monjas fueron exhibidas ante la multitud como prisioneras de guerra. En una entrevista posterior, la monja que dirige la escuela dijo que ella y otras dos hermanas fueron salvados por otra profesora, una laica musulmana, que persuadió a los asaltantes de dejarlas ir. La monja también dijo que la policía local no se presentó a pesar de numerosas peticiones de ayuda.
Dada la escala de violencia, no es difícil entender por qué algunos cristianos egipcios están comparando su experiencia con la de Kristallnacht. Sam Tadros, un cristiano copto y un historiador en el Instituto Hudson, dice que no ha habido nada como la actual ola de violencia anti-cristiana en Egipto desde 1321, cuando fueron quemadas varias iglesias, lo que provocó un éxodo de la población cristiana, hasta aproximadamente la mitad de su actual 10 por ciento.
Es difícil saber lo que los cristianos pueden hacer en otras partes del mundo para marcar diferencias. Sin embargo, a cambio de no hacer nada, podemos tratar de entender la experiencia de las personas que sufren persecución en nuestro pensamiento e insistir en que nuestros políticos hagan lo mismo.
El lunes, el líder de la comunidad católica copta en Egipto, el patriarca Isaac Ibrahim Sidrak de Alejandría, emitió una declaración sobre la violencia. El texto íntegro a continuación:
“Con dolor, pero también con esperanza, la Iglesia católica en Egipto está siguiendo lo que nuestro país está experimentando: atentados terroristas, asesinatos y quema de iglesias, escuelas e instituciones del Estado. Por lo tanto, por amor a nuestro país y en solidaridad con todos los amantes de Egipto, los cristianos y los musulmanes, estamos tratando de hacer todo lo posible para comunicarnos con organizaciones amigas de todo el mundo para hacerles notar la realidad de los acontecimientos que tienen lugar en nuestro país.
Nos gustaría expresar lo siguiente:
Nuestro apoyo libre, fuerte y consciente a todas las instituciones estatales, en particular las fuerzas armadas y a la policía por todos sus esfuerzos en la protección de nuestra patria.
Nuestro aprecio por las naciones que intentan comprender la naturaleza de los hechos, y que rechazan cualquier intento de interferir en los asuntos internos de Egipto o de influir en sus decisiones soberanas, sea cual sea la dirección que se encuentre.
Nuestro agradecimiento a todos los medios de comunicación egipcios e internacionales que informan de las noticias y eventos de forma objetiva e imparcial, y al mismo tiempo que condenan aquellos medios que promueven la mentira con el fin de confundir a la opinión pública mundial. Nuestro agradecimiento a nuestros honorables compatriotas musulmanes que se han mantenido a nuestro lado, dentro de lo posible, en la defensa de nuestras iglesias y nuestras instituciones.
Por último, recurrimos a la conciencia internacional y todos los líderes nacionales que entienden y creen que lo que está sucediendo en Egipto ya no es una lucha política entre las diferentes facciones, sino una guerra contra el terrorismo.
Para concluir, expresamos nuestras condolencias a todas las familias y parientes de las víctimas. Rogamos al Señor por todos los heridos”.
Ibrahim Isaac
Patriarca de Alejandría de los coptos católicos
Presidente del Consejo de los Patriarcas y obispos católicos en Egipto
Dos puntos merecen ser resaltados.
En primer lugar, la declaración contiene una advertencia de no colocar a todos en un mismo saco. Por cada musulmán que incendia una iglesia o golpea a un cristiano, también hay un musulmán que se apresura a ayudar. Los informes indican, por ejemplo, que muchos de los incendios provocados en las iglesias habrían hecho mucho más daño si no hubiera sido por decenas de musulmanes que intervinieron para ayudar a combatir las llamas.
Ese punto parece ofrecer una dosis de esperanza sobre las posibilidades de asociación musulmanes/cristianas a futuro.
En segundo lugar, la declaración también contiene un reproche bastante contundente a los políticos occidentales inclinados a tomar una postura facilista de recriminar un conflicto entre los manifestantes, en este caso la Hermandad Musulmana y la represión militar. Según el jefe de la autoridad católica del país, en todo caso, lo que está pasando no es una competencia política entre ambas partes con reclamos legítimos, sino una guerra contra el terrorismo.
Traducción: Antes de condenar al ejército por su brutalidad, considerar la alternativa.
Como mínimo, es algo para reflexionar mientras la comunidad internacional considera sus opciones políticas. La voz de las trincheras no siempre estará en lo correcto, pero siempre debe ser escuchada.
Fuente:
“Telling Africa’s story” de John L. Allen Jr. publicado en National Catholic Reporter
Que situación tan trágica y desconcertante. Ojalá podamos "0ir la voz de las trincheras".
Tengo una traducción española de El Korán (versión literal e íntegra) de Aguilar, S.A. Ediciones Madrid 1951. La aleya 5 de la Azora IX si se toma al pie de la letra, me temo que puede inspirar cosas como éstas…