Nuevo doctor de la Iglesia

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4.00 p m| CIUDAD DEL VATICANO, 25 ago. 11 (BV).- San Juan de Ávila, (1499-1569) gran predicador y maestro espiritual del siglo XVI, será el 34º doctor proclamado por la Iglesia Católica, el primero bajo el pontificado de Benedicto XVI.
El Papa lo anunció durante la Jornada Mundial de la Juventud realizada en Madrid. Después de San Juan de Ávila aparece una lista con diecisiete nombres que están cerca de ser distinguidos con este título. Entre los candidatos brillan seis mujeres . ¿Pero qué significa ser doctor de la Iglesia? ¿Cuáles son los otros 33 doctores de la Iglesia? ¿Quiénes son los próximos diecisiete ?

Con el título de doctor de la Iglesia otorgado a San Juan de Ávila, este reconocimiento vuelve a ser asignado a un hombre, luego que por tres veces consecutivas, fue concedido a mujeres: Pablo VI distinguió a santa Teresa de Ávila y a Santa Catalina de Siena en 1970; Juan Pablo II a Santa Teresa de Lisieux en 1997.

DOCTOR DE LA IGLESIA
Doctor de la Iglesia es el título que la Iglesia, el Papa o un concilio ecuménico, otorga oficialmente a ciertos santos para reconocerlos por su erudición como eminentes maestros de la fe para los fieles de todos los tiempos.

Los doctores de la Iglesia han ejercido una influencia especial sobre el desarrollo del cristianismo, sentando las bases de la doctrina sucesiva.

¿Cómo se llega a ser “Doctor de la Iglesia”?
Hay tres condiciones que deben cumplirse antes de que una persona santa se le concederá el título de “Doctor”:
Eminens doctrina (doctrina eminente). Es decir, los escritos del santo o la predicación han contribuido al pensamiento católico y son útiles para la gente “de cualquier edad.” Es importante tener en cuenta que sus escritos no se consideran “infalibles”, aunque el título “Doctor de la Iglesia” sin duda manifiesta un profundo conocimiento de la teología y la ortodoxia.
Insignis vitae sanctitas (alto grado de santidad). La mayoría de los doctores de la Iglesia eran místicos, es decir, tuvieron visiones o manifestaciones de la presencia de Dios en sus vidas, en formas que no son comunes.
Ecclesiae declaración (proclamación por la Iglesia). Y a juzgar por la lista de “Médicos” nombrados a la fecha, se podría decir que faltan fundadores de alguna orden religiosa, o un miembro de una orden contemplativa.

Al respecto no son muchas las informaciones oficiales. Algunas fueron proporcionadas por el jesuita Giandomenico Mucci en el artículo “Il titolo di dottore della Chiesa (El título de doctor de la Iglesia)”, publicado en el último número de 1997 de “La Civiltà Cattolica”.

En el futuro, Mucci explica, que el título de “doctor” puede ser conferido a los mártires, así como también a los místicos. Al menos, eso es una opción que fue presentada por el jesuita. Mucci pasó a explicar que si bien los místicos y mártires, pueden ser considerados para este título, los Papas no podrían acceder a él. Dado que el título de “Doctor de la Iglesia” se basa en la “doctrina eminens.” De esta manera un mártir al que la Iglesia le reconoce su predica, pensamiento o escritos (Ignacio, Ireneo, Cipriano) puede ser elevado al doctorado, a pesar de haber llegado a la santidad por el martirio. Sin embargo, añade Mucci, los documentos producidos por un Sumo Pontífice, en virtud de su garantía de infalibilidad, ya están autorizados, no por la “doctrina eminens” poseído como un regalo personal de la gracia, sino en virtud de la oficina que ocupa, como supremo pastor y doctor de todos los fieles es decir en producciones, textos, palabras etc. que contribuyan al pensamiento católico

SAN JUAN DE AVILA
El Apóstol de Andalucía, como fue conocido Juan de Ávila, nace según se cree el 6 de enero de 1499, en Almodóvar del Campo. Fue hijo de Alonso de Ávila, y de Catalina Xijón. familia rica y cristiana. Al morir sus padres repartió todos sus bienes entre los pobres y después de tres años de oración y meditación se decidió por el sacerdocio. Estudió filosofía y teología en la Universidad de Alcalá y allá hizo amistad con el Padre Guerrero que fue después arzobispo de Granada y su amigo de toda la vida.

San Juan de Avila tuvo el privilegio de ser amigo y consejero de seis santos: San Ignacio de Loyola, Santa Teresa, San Juan de Dios, San Francisco de Borja, San Pedro de Alcántara y Fray Luis de Granada. Dicen que él es la figura más importante del clero secular español del siglo 16.

OTROS DOCTORES DE LA IGLESIA
En el cristianismo primitivo el título se adjudicó espontáneamente a ocho de los Padres de la Iglesia, cuatro eran Padres del Occidente: San Gregorio Magno, San Ambrosio, San Agustín, y San Jerónimo (proclamados Doctores en el 1298) y cuatro eran del Oriente: (1568): San Atanasio, San Juan Crisóstomo, San Basilio Magno y San Gregorio Nacianceno.

El Papa Pío V, en el siglo XVI, definió formalmente los criterios para la declaración de la dignidad, y desde entonces otros 25 santos antiguos y modernos han sido reconocidos como doctores de la Iglesia. Actualmente, las prácticas respecto a los nuevos doctores de la Iglesia son examinadas conjuntamente por la Congregación para la Causa de los Santos y la Congregación para la Doctrina de la Fe.

DIECISIETE CANDIDATOS EN LISTA
Las seis mujeres santas y beatas en la lista para ser proclamadas doctoras de la Iglesia:
Santa Verónica Giuliani
Santa Juliana de Norwich

Santa Brígida de Suecia
Santa Gertrudis de Hefta
Santa Hildegarda de Bingen
Santa Margaret Mary Alacoque

Los once hombres santos que serán probablemente nombrados “Doctor” son: San Ignacio de Loyola, San Vicente de Paúl, San Juan Bosco, San Gregorio de Narek, los Santos Cirilo y Metodio, San Lorenzo Giustiniani, San Antonino de Florencia, Santo Tomás de Villanueva, San Luis María Grignion de Montfort y San Bernardino de Siena.

Imagen:San Juan de Ávila

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