Con estas tres citas empiezo mi tesis.
“Si deseamos seguir siendo psicoanalistas –o reflexionar psicoanalíticamente-, debemos, como nos decía Bela Grunberger, resignarnos a vivir a la sombra de Freud, pero, eso sí, con el compromiso de recrear el psicoanálisis todos los días y continuar explorando las sendas vírgenes aún no exploradas, las que Freud preanunció, pero no pudo recorrer”Alfredo Painceira en Clínica psicoanalítica a partir de la obra de D. Winnicott (1997)
“(la educación) es el punto en el cual decidimos si amamos al mundo lo suficiente como para asumir una responsabilidad por él, y de esa manera salvarlo de la ruina inevitable que sobrevendría si no apareciera lo nuevo, lo joven. Y la educación también es donde decidimos si amamos a nuestros niños lo suficiente como para no expulsarlos de nuestro mundo y dejarlos librados a sus propios recursos, ni robarles de las manos la posibilidad de llevar a cabo algo nuevo, algo que nosotros no previmos; si los amamos lo suficiente para prepararlos por adelantado para la tarea de renovar un mundo común” Hannah Arendt en La crisis de la educación (1996)
“(…) ¿Por qué la educación tiene que consistir en sudor y lágrimas? ¿No somos testigos del desastre de esa educación, no vemos a nuestro alrededor adultos y viejos educados así y el mundo inmoral y perverso que han construido? ¿Puede alguien todavía creer que la letra con sangre entra? ¿No sabemos ya que debemos renovar la educación moral y devolverla al mundo de la vida?”Constanino Carvallo en Diario educar. Tribulaciones de un maestro desarmado (2005)