Estas organizaciones han unido esfuerzos y decidido incorporar la Trata de personas en su análisis y acción junto a los temas que institucionalmente abordan. Las veedurías regionales podrán vigilar que lo que se encuentra dispuesto en la norma en términos de prevenir y perseguir la trata de personas, así como de proteger a las víctimas y testigos, se cumpla.
El objetivo es fortalecer la vigilancia ciudadana en los niveles de gobierno nacional, regional y local y establecer alianzas estratégicas entre organismos de la sociedad civil al interior del país que se preocupan por esta terrible realidad.
En Arequipa y Cajamarca, durante el mes de mayo se instalaron las veedurías regionales. Mientras tanto, se hizo lo mismo en Cusco, culminando en el mes de julio con la instalación de estas redes en Loreto, Junín y Lambayeque. Huánuco, Piura, y Madre de Dios, tres regiones duramente golpeadas por esta situación, iniciarán actividades en esa línea.
De acuerdo al Sistema RETA de la Policía Nacional, todas estas regiones son claves tanto en la captación, tránsito y destino de las víctimas, ya que las rutas con el mayor número de casos, las atraviesan.
Fuente: LA Primera