Decana del Colegio de Obstetras asegura que Perú no podrá bajar en 75% tasa de mortalidad materno infantil, pese a lo que el gobierno asegura.

Realidad que se vive en zonas rurales no sería incluida en cifras oficiales, según decana Lara.

CON SU PROPIA PLATA

Asimismo, la decana denunció que muchas veces son los mismos obstetras quienes tienen que poner de su dinero para la infraestructura. “Los obstetras compran sus propios instrumentos como el fórceps, la espátula. Hasta la misma población hace actividades entre ellos para poder comprar lo que necesitan porque el Minsa no se los entrega”, Lara Valderrama.

Para la decana del COP la alta tasa de mortalidad materna se debe a que el gobierno ha centralizado los recursos en las principales ciudades pero no invierte en las zonas rurales. Según los informes que sus colegiados le remiten, las provincias son las más desamparadas, lugares en donde las cifras de mortalidad materna son mayores y que en su totalidad no se reportan oficialmente.

El ministro de salud Óscar Ugarte aseguró hace poco ante la 63ª Asamblea de la Organización mundial de la salud (OMS) que el Perú ya había logrado bajar la tasa de mortalidad materno infantil de 57 a 18 muertes por cada mil nacimientos, alcanzando así uno de los Objetivos del Milenio cinco años antes de la meta, pues el plazo acaba el 2015, sin embargo la Decana del Colegio de Obstetras del Perú (COP), Rosa Elena Lara afirmó a LA PRIMERA que estas cifras son falsas pues solo se basan en los datos recogidos en las ciudades, pero dejan de lado la realidad de las zonas rurales.

También indicó que otro factor para que al 2015 no se pueda cumplir con los Objetivos es que no se está invirtiendo en políticas sociales que enfrenten el problema, pues el principal obstáculo es la centralización de los recursos en la capital.

Lara remarcó que el ministro de Ugarte informó que las cifras de mortalidad materna habían disminuido significativamente y que al 2009 por cada 100 mil partos 103 mujeres fallecían, pero Lara considera que esta cifra es mucho mayor, pues oculta lo que sucede fuera de los hospitales de las grandes ciudades.

“Cuando la Encuesta Nacional Demográfica y de salud Familiar – ENDES decía que la mortalidad materna para el 2008 era de 185 muertes por cien mil nacidos, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) en Perú estimaba que eran 410 muertes por cien mil nacimientos, la diferencia de estas cifras es enorme y se da porque el gobierno no hace las encuestas de forma continua y masiva porque no tiene un conocimiento real del problema”.

Siempre el centralismo
“En provincias no hay las adecuadas infraestructuras para que las madres den a luz, en Puno con solo ponerles una bata durante el parto se mueren de frío, es por eso que muchas prefieren dar a luz en sus casas, pero ¿quiénes las asisten? Son personas que no tienen los conocimientos para realizar tal labor. Muchas de ellas, si es que dan a luz y siguen vivas quedan con una infección por la mala práctica y esto se convierte en morbilidad, pero lamentablemente el Minsa no habla de eso y no lo incluye en sus cifras”.

Además, señaló que en las provincias no hay suficientes ambulancias para auxiliar cuando hay un parto. “En el interior las personas viven de un extremo a otro y no hay un hospital cerca de ellos, la ambulancia les sería de gran ayuda pero, simplemente no las hay, hasta que soliciten una unidad y hasta que esta llegue esas mujeres se desangran y mueren”.

Yossy Honorio

Fuente: La Primera

Puntuación: 0 / Votos: 0