Presidente Castillo y su equipo, no sé si a propósito o por casualidad han hecho relucir la miseria humana de las y los periodistas, apinadores(as), políticos(as), analistas, congresistas. Esas miserias humanos a mi entender son el odio, intransigencia, prepotencia y arrogancia. Creo que no es gratuita la expresión de la miseria humana, pues todos y todas antes mencionados, tienen que cumplir su tarea de ayudar a mantener los privilegios de sus patrones.