| Por Klaas den Tek (Foto: MKTP)
Los países europeos, Holanda incluida, niegan a menudo asilo a homosexuales basándose en estereotipos y prejuicios. Los funcionarios no creen que estas personas sean homosexuales porque no serían lo suficientemente “afeminados”, ni frecuentan lugares gays. Así se desprende de un estudio efectuado por la Universidad Libre de Ámsterdam y la organización holandesa COC, que defiende los intereses de los homosexuales.
En su país de procedencia son discriminados, encarcelados o asesinados. Cada año unas 10.000 personas piden asilo en Europa, por ser perseguidos por su inclinación sexual. Aproximadamente 200 de ellos piden asilo en el servicio de inmigración de Holanda.
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Sin embargo, no todos son recibidos con los brazos abiertos. Un hombre tuvo que huir de Camerún cuando sus vecinos descubrieron que tenía un amigo. Cuando llegó a Gran Bretaña, su petición de asilo fue inicialmente denegada. La argumentación: el hombre podría haberse mudado a otra parte del país, donde la gente no conociera su inclinación. O sea: “retornar al armario”.
Peticiones de Asilo
El investigador Thomas Spijkerboer, de la Universidad Libre de Ámsterdam, explica que la historia del hombre de Camerún no es un caso aislado. Spijkerboer investigó las peticiones de asilo de hombres y mujeres homosexuales en los 27 países miembros de la Unión Europea. Aunque no hay cifras exactas de la cantidad de solicitudes rechazadas, a menudo se producen irregularidades. A veces el trato de las peticiones vulnera los derechos humanos. Ésta es una de las conclusiones del informe “Fleeing Homophobia” (Huyendo de la homofobia) que se publica hoy.
“A menudo una solicitud de asilo es rechazada en base a prejuicios y estereotipos”, señala Spijkerboer. “Es grave no creer a alguien porque no se comporta de manera afeminada. O el ejemplo de una mujer lesbiana a la que no se le cree por no saber exactamente cuál es la pena en su país para el sexo entre dos mujeres. Es una manera extraña de decidir sobre la credibilidad de una persona”.
Violencia contra homosexuales
Muchos países europeos exigen de las personas que piden asilo que en su país de procedencia escondan su inclinación sexual, para evitar violencia homofóbica. Las autoridades holandesas desmienten esta postura, pero la práctica demuestra lo contrario. El Servicio de Inmigración y Naturalización, el IND, aconsejó a una mujer lesbiana de Sierra Leona esconder su inclinación cuando regresara a su país.
“En teoría esta práctica se ha abolido en Holanda, pero la legislación no se respeta”, comenta Spijkerboer. “También ocurre que alguien no dice que es homosexual durante su primera petición de asilo, por vergüenza o por miedo. En una segunda petición sí se atreve a revelarlo, pero en ese caso el juez ya no puede tener en cuenta esta circunstancia. Holanda es el único país europeo que va hasta tal extremo”.
Abuso
Aún así, Spijkerboer reconoce que es difícil establecer de manera objetiva si alguien es homosexual. Cabe preguntarse si hay quienes se aprovechan de la situación para conseguir un permiso de residencia. En el año 2006 algunos parlamentario temían precisamente eso, cuando la entonces ministra de Inmigración, Rita Verdonk, decidió conceder siempre un permiso de residencia a los homosexuales iraníes.
Pero la COC, la organización que defiende los intereses de los homosexuales, opina que un refugiado nunca utilizará gratuitamente el argumento de ser homosexual.
“En el país de procedencia la homosexualidad es un gran tabú, y por eso no utilizarán tan fácilmente ese argumento”, explica Wouter Neerings, presidente de la COC . “En tal caso tendrían problemas en los centros de asilo. Y si fuesen deportados a su país, su posición y la de sus familiares sería muy difícil”.
La COC presentará el informe al Gobierno para llamar la atención sobre la actitud del servicio de inmigración. Seguidamente se dirigirán a Bruselas, para lograr otra postura a nivel europeo.
Fuente: radio Nederland