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CIUDAD

EL ASESINO SE PROFIRIÓ DIVERSOS CORTES EN EL CUERPO Y LLEGÓ AL EXTREMO DE INCRUSTARSE EL CUCHILLO DE COCINA EN LA BOCA DEL ESTÓMAGO, VIVE DE MILAGRO

26 de Agosto del 2010

ICA | palpa. Un profundo corte en la yugular terminó con la vida de Aurelia Vargas Arévalo (35), mortal puñalada propinada por su conviviente que la tarde del último martes se convirtió en un iracundo sujeto que, cegado por los enfermizos celos, la mató.

El trágico desenlace se originó con el reclamo airado del asesino Richard Oswaldo Escriba Flores (33), debido a que, un día antes del crimen, la occisa no habría llegado a descansar en su vivienda ubicado en el sector del Alto Cenepa, distrito de Río Grande (Palpa), donde sucedieron los hechos.

Al promediar las 18:30 horas, la pareja discutió que los vecinos oyeron de la ferocidad de las agresiones. Conforme transcurrían los minutos, coludida con la oscuridad, la pelea tuvo un triste final.

AUXILIO. Alertado por los vecinos, el hijo de la mujer de iniciales V.P.GL.V (17) acudió a la vivienda en compañía de su enamorada. Por la oscuridad, encendió la linterna de su celular y se encontró con la indes-criptible escena.

El adolescente con el apoyo de los vecinos trasladaron a la mujer al Hospital de Apoyo de Palpa, donde el médico Julián Cruz Pérez certificó el deceso de Aurelia Vargas Arévalo. “Llegó cadáver a consecuencia de la herida mortal del corte de yugular lado izquierdo y heridas punzo cortantes en diferentes partes del cuerpo con arma blanca”.

Según fuentes policiales, el funesto crimen, que causó conmoción y estupor a la Tierra de las Naranjas, se consumió cerca de las 19:30 horas.

Captura. Las horas libres del criminal no se extenderían. Richard Oswaldo Escriba Flores (33), el principal sospechoso del asesinato, fue detenido por la policía que lo encontró debajo de la cama de la misma vivienda con el cuchillo incrustado a la altura de la boca del estómago.

Además, con una soga en el cuello y diferentes cortes en diversas partes del cuerpo, con el objetivo de quitarse la vida, según las primeras declaraciones del asesino.

El homicida fue dado por muerto por la policía. Al tener signos de vida, fue llevado al nosocomio de dicha provincia.

El médico de turno le brindó los primeros auxilios y logró estabilizarlo, diagnosticando poli traumatizado con múltiples heridas punzo cortantes en la frente, cara, cuello y muñeca izquierda. A nivel abdominal presenta una herida de 5 cm proferido por un cuchillo.

Recuperación. En este último hospital, le lograron quitar el cuchillo de cocina de unos 30 cm.

Posteriormente, fue transferido al Hospital Regional de Ica, siendo interrogado por la policía, afirmando que las lesiones que tiene fueron hechos por él, con el objetivo de eliminarse.

Al cierre de esta edición se conoció que se encuentra estable. Al asesino la policía le practicó el dosaje etílico. El terrorífico suceso se-rá investigado.