Vie, 16/07/2010 – 20:29
El mejor médico del mundo se llama Eros. Por lo menos eso es lo que asegura un grupo de especialistas en medicina antiage (antiedad) tras descubrir que el buen sexo practicado de manera regular produce maravillosos efectos en la salud de cualquier persona, además de sus efectos placenteros, por supuesto.
“Hacer el amor al menos tres veces por semana extendería la expectativa de vida un promedio de diez años” , manifiesta el doctor Adrián Jaime, quien pertenece a un equipo de investigación que, en junio de este año, inició un trabajo en el Massachussets General Hospital sobre Sexualidad y Medicina AntiAge para la Universidad de Harvard .
La excitación sexual y el orgasmo pueden mejorar la capacidad respiratoria, beneficiar el sistema cardiovascular, contrarrestar la depresión y la ansiedad, ayudar a aliviar dolores, proporcionar flexibilidad, fuerza y tono muscular, disminuir los síntomas asociados a la menstruación, la artritis y la osteoporosis y, por si fuera poco, obtener significativos beneficios psíquicos.
“El proceso se logra debido a que en el acto sexual son liberadas una serie de sustancias bioquímicas que favorecen las posibilidades de lograr una vida más larga y saludable”, explica el director del Medical Center, doctor Adrián Jaime, para quien “todo nace a partir del deseo sexual”.
Jaime detalla que “a medida que aumenta la excitación, el organismo secreta endorfina, sustancia asociada a la sensación de placer que alcanzan su máxima expresión durante el orgasmo”, fase en la que “la mujer libera oxitocina, sustancia responsable de las contracciones uterinas”.
“A nivel cardiovascular, se observa un aumento de las pulsaciones del corazón y mayor flujo sanguíneo, principalmente hacia la región genital que tiende a llenarse de sangre y dilatarse para el coito”, agrega.
También se da, en el proceso, la liberación, tanto en hombres como en mujeres, de serotonina, dopamina y otros siete neurotransmisores “capaces de una renovación hormonal en cascada”, que provoca en el organismo una serie de reacciones de reparación celular que harían al cuerpo volver a un eje de “revitalización”.
Otras opiniones
Las bondades terapéuticas del sexo fueron también materia de estudio de un grupo de médicos encabezado por el doctor George Davey-Smith, de la Universidad de Bristol.
Hasta ese momento la relación entre el sexo y la mortalidad se había estudiado muy poco, pero algunas indagaciones iniciales habían sugerido que quizás existía una conexión entre los orgasmos y la longevidad.
El estudio incluyó a 918 varones ingleses de entre 45 y 59 años de edad, a quienes se les hizo una historia clínica, un chequeo médico y se les preguntó acerca de la frecuencia de su actividad sexual.
Tras diez años de seguimiento de la vida sexual y del estado de salud de los participantes, se concluyó que cuanto más alta era la “frecuencia orgásmica” más probabilidades tenían de estar saludables y que la probabilidad de morir era un 50% menor entre los hombres que sólo mantenían relaciones sexuales dos veces a la semana, en comparación con los que lo hacían una vez al mes.
Por su parte, el psicólogo David Weeks, investigador del Royal Hospital de Edimburgo de Escocia, concluyó que la actividad sexual es una terapia antiedad, tras entrevistar a 3.500 personas que lucían más jóvenes de lo que eran en realidad.
Bueno, pues, ahora que ya leyó a los expertos, ¿qué espera para irse rápido a casa y comenzar a practicar, junto a su pareja, la mejor de las terapias para la longevidad?
Fuente: La República