Por Patricia Espinoza Sastellares
Psicoterapeuta*

Cuando los hombres llegan a los 45, y hasta los 55 años de edad, pueden experimentar un fenómeno similar a la menopausia femenina, denominado andropausia.

A diferencia de las mujeres, los hombres no muestran signos claros, como el cese de las menstruaciones, para identificar este período, que, en ambos sexos, tiene que ver con la caída en los niveles hormonales: estrógeno en ellas y testosterona en ellos.
En el hombre, los cambios en el cuerpo ocurren muy gradualmente y se acompañan de cambios de actitud, fatiga, pérdida de energía, impulso sexual y agilidad física. La andropausia también tiene una influencia negativa sobre los estados de ánimo, provocando que el hombre esté más irritable .

Los estudios demuestran que esta caída de testosterona representa un riesgo de otros problemas de salud, como cardiopatías o huesos frágiles. Dado que todo esto ocurre durante un momento en la vida en que los hombres comienzan a cuestionar sus logros y el rumbo de su vida, muchas veces es difícil advertir que los cambios se relacionan con algo más que solamente las condiciones externas.

Si bien, con la edad, prácticamente todo hombre tendrá una disminución en sus niveles de testosterona, no existe manera de predecir quién tendrá síntomas andropáusicos lo suficientemente severos como para buscar ayuda profesional. Tampoco es predecible a qué edad comenzarán los síntomas, que pueden ser diferentes en cada hombre.

Algunos síntomas son:

.Menor impulso sexual.
.Cambios emocionales, psicológicos y de conducta.
.Menor masa muscular .
.Pérdida de resistencia muscular.
.Aumento de grasa corporal a nivel central y superior del cuerpo.
.Osteoporosis o huesos débiles y lumbalgia.
.Riesgo cardiovascular.

Además de los cambios hormonales relacionados con la caída de testosterona, una serie de factores tanto físicos como psicológicos pueden jugar un papel importante en el inicio de la andropausia.

Algunos factores que facilitan el inicio del climaterio masculino son el estrés, la actividad laboral o la falta de ella (la prejubilación o jubilación definitiva), el alcohol y el tabaco, las lesiones o problemas físicos (enfermedades cardiovasculares), cirugías previas, ingesta de medicamentos para determinadas patologías, obesidad, diabetes, problemas de la tiroides, consumo de drogas.

A algunos hombres les cuesta mucho siquiera admitir que existe un problema, por lo que dejan pasar esta etapa sin visitar al médico. Si usted está atravesando la andropausia, esperamos que esta información le ayude a tener una calidad de vida sana y activa a lo largo de sus años de madurez.

*Clínica del hombre de Inppares
informes@inppares.org

Fuente: La Repùblica

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