Políticos y congresistas coincidieron en señalar que no dudan del vínculo de Petrotech con el presidente Alan García durante las elecciones generales del año 2006, tal como lo reveló ayer LA PRIMERA con la publicación de correos electrónicos entre uno de los operadores de Montesinos y la esposa del propietario de la referida petrolera.

No descartaron que la reconsideración del informe sobre la venta de Petrotech en el Congreso se deba a un afán de venganza del mandatario contra esta empresa por haber destapado el mayor acto de corrupción en este gobierno, donde no sólo están comprometidos personajes de las altas esferas del Ejecutivo sino también representantes del Apra, por favorecer a la noruega Discover Petroleum en la concesión de pozos petroleros.

Para el ex ministro Juan Sheput “el asunto de Petrotech es una venganza política contra todos aquellos que destaparon el mayor escándalo de corrupción que hasta el momento se conoce y cuyas principales pruebas han sido desaparecidas por indicaciones de personas del más alto nivel de este gobierno que algún día se tendrá que investigar”.

Según Sheput, el ex jefe de la Dirandro, Miguel Hidalgo, y los jefes del Ministerio Público y del Poder Judicial “son simplemente vehículos utilizados por los altos miembros del actual gobierno con el objetivo de eliminar pruebas que comprometen al entorno más cercano de García”.

Sin embargo, advirtió que “el presidente García está equivocado si cree que el caso Petrotech y los petroaudios es un asunto cerrado, porque el caso será investigado, no por este Congreso sino por el siguiente”, y que por eso se declaran enemigos acérrimos de Toledo y de Ollanta Humala, quienes podrían hacer una real investigación, porque hasta el sistema judicial está siendo copado por apristas desde el Consejo Nacional de la Magistratura.

Por su parte, el presidente de la comisión que investigó el caso de los petroaudios en el Congreso, Daniel Abugattás, aseguró que “García está actuando en represalia contra aquellos que han revelado las implicancias y la profundidad de la corrupción en su gobierno” y en “una actitud política mañosa utiliza los medios ayayeros al gobierno, para que todo sea visto como una lucha contra la corrupción”.

Sin embargo, explicó que la oposición se percató de esta maniobra e hizo notar que García se estaba exculpando, porque fue el gobierno el que permitió a Petrotech confirmar y autorizar una transferencia de la concesión y contrato. “De lo contrario, por qué autorizaron la venta”, preguntó.

Como conocedor del caso, aseguró que “lo que ocurre es que todo el escándalo de Petrotech afecta directamente al gobierno, porque nadie puede creer que es irrelevante lo que se gestó en Palacio de Gobierno con la presencia del empresario dominicano Fortunato Canaán hablando de su interés por los lotes petroleros donde participó el propio García”.

Para Abugattás esta es una lucha contra aquellos que habrían facilitado que se revele la corrupción en el gobierno de García, porque había un negociado de 900 millones de dólares, con su respectiva coima, y además ya se sabe que el 90% de las personas involucradas en el caso Petrotech están siendo procesadas por la Contraloría.

En tanto, el presidente del la comisión que investigó el “chuponeo” de Business Track, Oswaldo Luizar, advirtió que si se confirma que esta es una venganza armada por el mandatario, sería un hecho gravísimo porque además se está distrayendo el tema de fondo, que es la corrupción del gobierno, porque ya no se habla de Del Castillo ni del escándalo en Cofopri.

Es más, cuestionó que se haya revivido el informe Petrotech después de casi dos años, pues cuando salió se quiso mandarlo al archivo o que sea resuelto en instancias judiciales. “Sin embargo, el informe de mi comisión hasta ahora no se ve pese a la trascendencia del caso en lo que se refiere a actos de corrupción”, precisó.