Lima es la ciudad con mayor número de arrestos y la cifra creció en comparación con 2009.
Se busca que los escolares denuncien a los depravados. (Paul Vallejos)
Preocupante. Durante los tres primeros meses del año, 185 personas fueron detenidas por abusar sexualmente de niños menores de 14 años en todo el país. Así lo dio a conocer el Registro Nacional de Detenidos y Sentenciados a Pena Privativa de Libertad Efectiva (Renadespple) del Ministerio Público. Según el informe, en comparación con el mismo periodo de 2009, la cifra se ha incrementado.
Víctimas. De los datos obtenidos, se pudo conocer que 63 de las intervenciones se produjeron en la capital. De los detenidos, 35 han sido denunciados por violación sexual contra menores de siete años y 19 por abusar sexualmente de niños de entre siete y 10 años. Además, nueve personas han sido llevadas a prisión por violar a menores de entre 10 y 14 años de edad.
Galinka Meza Salas, presidenta de Renadespple, informó que, hace dos meses, la Fiscalía Superior del Ministerio Público creó el programa de Fiscales Escolares, iniciativa que –explicó– “consiste en brindar charlas permanentes a los colegiales, con la finalidad de que estos se atrevan a denunciar a las personas que las violenten sexualmente”.
Meza señaló que, si bien las cifras han aumentado, “esto no quiere decir que haya más incidencia de casos sino que, ahora, los menores se atreven más a denunciar”. Manifestó que el programa será ampliado a nivel nacional para promover que “las víctimas no tengan miedo de denunciar”.
Sobre el caso del cura Jozef Van Den Ouweland (62) –instalado en el Perú luego de que fuera denunciado en Bélgica por pedofilia –, aclaró que “así sean representantes de la Iglesia, todos son iguales ante la ley y, en caso haya denuncias contra él, se le debe castigar conforme a las leyes”.
Por su parte, Lourdes Febres, coordinadora de la ONG Acción por los Niños, afirmó que dar a conocer las cifras de detenidos “permitirá que la población sienta que las víctimas han hallado justicia”. Recordó que la pena para este delito es cadena perpetua.
Fuente: Perú21