Protección de niños se descuida en la cuarentena

7:00 p.m. | 1 jul 20 (CRUX/VN).- En un seminario web sobre la protección de menores, el P. Hans Zollner SJ, un experto católico de alto nivel, advirtió que el riesgo de abuso (en línea) de niños aumentó notablemente durante la pandemia, pero que la atención sobre el tema se ha desvanecido. “Creo honestamente que la protección y la salvaguarda de la infancia en la Iglesia, en varios países, ha sufrido un duro golpe en términos de atención pública y de financiación en general”, comentó Zollner. Durante el diálogo, destacó los riesgos de la actividad en línea tanto en situaciones normales como durante el aislamiento y ofreció sugerencias sobre cómo responder a los desafíos que surgen durante la cuarentena.

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En un encuentro con más de 300 personas de diferentes órdenes religiosas e instituciones católicas, Zollner explicó que los desastres naturales, la guerra, las crisis sanitarias y la inestabilidad económica, combinados con la pandemia, podrían hacer más difícil duplicar los esfuerzos de protección a los menores. El seminario web, realizado el 18 de junio, llevó por título “Salvaguardia en línea en tiempos de encierro”.

“Puede ser muy difícil para la sociedad y la Iglesia centrarse en la protección de los menores, porque ahora mismo hay necesidades tan apremiantes, hay cargas tan pesadas sobre la gente, que piensan que salvaguardar a los menores es un extra y no pueden permitirse pensar en eso porque primero tenemos que sobrevivir”, dijo.

“Sí, es cierto, la necesidad de sobrevivir es lo primero, pero también existe la necesidad de respetar y proteger la dignidad de todas las personas, sobre todo las más vulnerables”, dijo, instando a los participantes a “unirse para que la protección de la infancia suba en la escala de prioridades”.

Zollner dijo que cree que será una tarea difícil no solo por la actual pandemia y sus consecuencias, sino también porque “es un tema tan complicado y tan incómodo, que la gente no quiere enfrentarlo o comprometerse fácilmente con él… Necesita toda nuestra firmeza, lo que significa que continuaremos este lucha, incluso frente a la reticencia de volver a emprenderlo”, dijo.

Jefe del Centro de Protección Infantil de la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma y miembro de la Comisión Pontificia para la Protección de Menores, Zollner fue el segundo orador en una serie de exposiciones sobre la protección de los niños durante la pandemia. El seminario web fue organizado por las dos entidades mencionadas, y la Unión Internacional de Superiores Generales.

Calificando a Internet como una “gran oportunidad” con un potencial ilimitado, dijo que el coronavirus puede servir como catalizador para un crecimiento y desarrollo positivo, pero advirtió que también hay grandes preocupaciones en cuanto al impacto físico, sexual, psicológico, educativo, relacional y espiritual de la actividad en línea. Estas preocupaciones son válidas para todos, pero sobre todo para los menores, dijo, destacando los problemas de la soledad y los sentimientos de aislamiento o abandono como resultado de las exigencias de encierro, especialmente entre los llamados “nativos digitales”, que han crecido rodeados de tecnología.

Zoller destacó los riesgos que los menores, que están constantemente conectados, pueden encontrar en cualquier momento, como el fácil acceso a material sexual explícito en el que participan niños, incluidos vídeos e imágenes que se comparten y se ven miles o incluso millones de veces. Se trata de “una nueva forma de trauma que no existía antes de la aparición del mundo digital”, dijo, insistiendo en que es diferente del abuso hecho en persona.

La pornografía infantil, incluidas las imágenes elaboradas digitalmente, también tienen mucha exposición, y la puerta está más abierta para la captación de menores en línea, el “sexting” y el ciberacoso, dijo, insistiendo en que los mismos peligros están presentes no solo para los niños, sino también para los adultos vulnerables.

Zollner dijo que hay un “flagelo” particular en países como Filipinas, donde la pobreza es galopante y los padres a menudo venden a sus hijos para ser utilizados en vídeos sexualmente explícitos, o para ser abusados en vivo a través de una cámara web, y hay espectadores que pagan para tener acceso.

Según las cifras de la Internet Watch Foundation para el Reino Unido, la edad media de los niños víctimas de abusos se sitúa entre los 7 y los 13 años, y el 90% son niñas. El contenido varía desde imágenes indecentes hasta actividades sexuales sin penetración y violaciones entre adultos y niños. Zollner dijo que el aislamiento ha hecho que el riesgo de abuso en línea se dispare.

En el Reino Unido, hubo nueve millones de intentos de ver sitios web de pornografía infantil sólo en abril, dijo. En Dinamarca, el número de intentos de acceder a material de abuso infantil se triplicó con la cuarentena. En España, los informes de videos sexuales infantiles en línea han aumentado en un 20% desde marzo, y en Australia, la descarga de imágenes indecentes que involucran a niños se ha disparado en un 86% en las tres semanas posteriores al inicio del aislamiento, el 21 de marzo. El Centro de Niños Desaparecidos y Explotados de Estados Unidos registró un aumento del 106% en los informes de sospecha de abuso sexual infantil sólo en marzo, dijo.

Zollner apuntó a varios factores que contribuyen al riesgo, entre ellos el hecho de que, como los niños no van a la escuela, a menudo pasan mucho más tiempo solos y sin supervisión frente a las pantallas. Los padres, que intentan equilibrar el cuidado de los niños, la educación en el hogar y el trabajo, suelen prestar menos atención a las actividades de sus hijos, y la imposibilidad de salir aumenta la probabilidad de que el abuso se lleve a cabo en el hogar.

Las líneas telefónicas de ayuda y los servicios de denuncia también se han visto interrumpidos, y la falta de distracciones significa que los abusadores tienen más probabilidades de dar rienda suelta a sus impulsos, dijo, advirtiendo que sobrevivientes de abusos que podrían arreglárselas bien en circunstancias normales, podrían verse afectados inesperadamente por historias de violencia sexual que desencadenan recuerdos de su propio abuso.

Bajo encierro, “La gente se preocupa por su salud y su dinero, y esto es así en todos los niveles de la sociedad y en todo tipo de instituciones gubernamentales, por lo que es más probable que la protección quede relegada a un segundo plano en la lista de prioridades”, dijo.

Además, Zollner destacó varios puntos de acción para los padres y tutores, así como para quienes trabajan en las escuelas para ayudar a prevenir el abuso. Estos consejos incluyen el uso de herramientas de software para supervisar las actividades de los niños, crear áreas libres de dispositivos en la casa, asegurar que los ajustes de privacidad estén activados para todos los equipos, y participar en los juegos y programas que los niños quieran ver o jugar.

Zollner también subrayó la importancia de crear un sistema de apoyo en el que los maestros sigan en contacto con los estudiantes, lo que significa que los niños tengan alguien en quien confiar si algo está sucediendo en casa, así como en familias que puedan tener dificultades. Animó a guiar un comportamiento adecuado para las clases en línea.

En términos de lo que la Iglesia católica puede hacer, Zollner dijo que tiene “una oportunidad única”, dada su vasta red global. “Desafortunadamente, no hacemos un buen uso de ella porque estamos muy poco conectados, y no creemos en las posibilidades que tenemos”.

Advirtió acerca de la vigilancia cuidadosa incluso entre las instituciones católicas, órdenes religiosas y casas de formación, recordando una historia de un seminario en Asia en el que se quedó, donde le dijeron que el servicio de Internet en la casa había sido cortado porque los seminaristas estaban viendo pornografía, pero seguían accediendo a ella a través de sus teléfonos.

En cuanto al futuro, Zollner dijo que cree que el problema del abuso en línea será más serio, especialmente en el mundo pospandemia. “Mucha gente dice que debido a la pandemia, a la necesidad de trabajar más en línea y estar más en Internet, es seguro que el mundo digital adquirirá una importancia aún mayor en las escuelas, en las universidades, y en cualquier entorno de trabajo, y requerirá una mayor proporción de nuestro tiempo y nuestra energía gastada frente a las pantallas”, dijo, señalando que esto afectará a la sociedad en su conjunto, incluidos los sacerdotes y religiosos.

Una de las principales preocupaciones de Zollner es encontrar una forma común de educar a los jóvenes, en escuelas, universidades e incluso en la formación religiosa, “en el uso adecuado de Internet”.

“Estas son las principales preocupaciones: tenemos que darnos cuenta de que esto es algo que ha adquirido una enorme importancia en nuestras vidas, y no se puede dejar pasar como si nadie se ocupara de ello”, dijo. “De todas maneras tenemos que desarrollar algunas actitudes éticas y la comprensión de qué hacer cuando interactuamos con la gente en Internet, cuáles son los riesgos, y cómo puedo protegerme a mí mismo y a otras personas de los abusos”.

ENLACE. Entrevista al P. Zollner: “la protección de los vulnerables debe seguir siendo una prioridad”

Intervención completa del P. Hans Zollner SJ. (VIDEO)
Seminarios online sobre la Tutela de Menores en tiempos del COVID-19

La Oficina de Protección de la Unión Internacional de Superioras Generales (UISG) organizó una serie de seminarios online sobre la protección de menores y adultos vulnerables, organizados en colaboración con la Comisión Pontificia para la Protección de Menores, el Centro de Protección de Menores de la Pontificia Universidad Gregoriana y el Teléfono Azul, organización que defiende los derechos de la infancia.

El primer seminario web, tuvo lugar el 8 de junio de 2020 y trató sobre el tema “La protección de los niños, los adultos y los jóvenes vulnerables y la necesidad de una teología coherente de la infancia”.

 

El segundo seminario web fue el que tuvo como expositor al P. Zollner. Y el tercero se realizó el 30 de junio, con el título: “La victimología y el modelo de la seguridad relacional”.

 

El cuarto y último seminario web se ha programado para el día 6 de julio. Puede hacer click aquí para mayor información y la inscripción.

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Fuentes:

Crux / Vida Nueva / Foto: Vatican News

 

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Buena Voz

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