Cristo llega por Internet
El Papa manifestó que “nuestra misión, la misión irrenunciable de la Iglesia: la tarea de todo creyente que obra en los medios es la de ‘allanar el camino a nuevos encuentros, asegurando siempre la calidad del contacto humano y la atención a las personas y sus verdaderas necesidades espirituales, ofreciendo a los hombres que viven este tiempo ‘digital’ los signos necesarios para reconocer al Señor’“.
“Queridos amigos, también en la red estamos llamados a colocarnos como ‘animadores de comunidades’, atentos a ‘preparar caminos que conduzcan a la Palabra de Dios’ y a expresar una particular sensibilidad para cuantos ‘están desesperanzados y tienen en el corazón deseos de absoluto y de verdad no caducos’. La red podrá así convertirse en una especie de ‘pórtico de los gentiles’ en donde se ‘haga espacio también para quienes Dios es todavía un desconocido’“.
Tras alentar el trabajo de los medios católicos en Italia, el Santo Padre exhortó a “todos los profesionales de la comunicación a no dejar de nutrirse en el propio corazón de aquella sana pasión por el hombre que se convierte en tensión así como a acercarse siempre más a sus lenguajes y a su verdadero rostro. Los ayudará en esto una sólida preparación teológica y sobre todo una profunda y alegre pasión por Dios, alimentada en el continuo diálogo con el Señor“.
Al finalizar, Benedicto XVI alentó a “recorrer, animados por el coraje del Espíritu Santo, los caminos del continente digital. Nuestra confianza no está acríticamente puesta en algún instrumento de la técnica. Nuestra fuerza está en el ser Iglesia, comunidad creyente, capaz de testimoniar a todos la perenne novedad del Resucitado, con una vida que florece en plenitud en la medida en que se abre, entra en relación, se dona con gratuidad.