Por Damaris Meza
¿Quiénes somos?
Antes de que nuestros lectores se sumerjan por los recovecos del blog, queremos presentarnos. No sabemos por qué, pero los azares de la vida unieron a ocho inexpertos estudiantes de Antropología de la PUCP de diferentes promociones en un mismo curso: Práctica de Campo 1.
Así, Vera Lucia Ríos, Cesar Combina, Andrea Urrutia, Isabel Gonzáles, Raquel Alegría, Víctor Rodríguez, Giacomo Bassilio y Dámaris Meza emprendimos el viaje a San Juan de Lucanas con la profesora Cecilia Rivera.
Queremos compartir algunas memorias y palabras sobre qué significó esta experiencia para nosotros. Recordamos, por ejemplo, que no faltó quien se enferme por comer queso e higos en Puquio (Raquel), ni quien se cayera varias veces en el camino a Viseca (Andrea). Pero también recordamos con nostalgia a quienes se convirtieron en anfitriones y amigos, como un carismático don Raúl (Isabel y Giacomo). Esta no fue sólo una oportunidad para poder tomar buenas fotos (Víctor), fue la oportunidad para darnos cuenta de que lo más difícil es pretender objetividad cuando se trata de enlazarnos con otros, con quienes nos vinculamos irremediable y felizmente. Fue la oportunidad para aprender a moldear nuestras maneras de aproximarnos y expresarnos (Vera), aprender la necesidad y la belleza de conocernos y reconocernos como habitantes de un mismo país, y que el compromiso empieza por conocernos (Dámaris).
¿Por qué fuimos a San Juan?
Este año fuimos a San Juan de Lucanas, Ayacucho, como parte del curso de Práctica de Campo 1. El viaje duró 9 días, del 2 al 11 de octubre. Como su nombre lo dice, el propósito del curso es tener una primera experiencia en la actividad principal de nuestra carrera: el trabajo de campo.
En este caso, nuestra visita al distrito de San Juan de Lucanas tuvo como propósito hacer un estudio de la relación de la población local con la posibilidad de implementar un proyecto turístico en el distrito, como forma de generar ingresos y promover el desarrollo de la zona. La visita se origina en una consulta que el actual alcalde de San Juan de Lucanas, señor Américo Peñafiel, hiciera a nuestra profesora sobre el proyecto municipal para la restauración de la casa hacienda de Viseca. Por ello contó con el apoyo del municipio local, el cual encontró alojamiento para nosotros en las poblaciones de San Juan y Utec. Desde allí el grupo se dividió para visitar los centros poblados de tres de las cuatro comunidades campesinas del distrito de San Juan de Lucanas: Utec, Acola y San Juan.
Problema y preguntas
El turismo no existe como una actividad organizada en el distrito de San Juan. Sin embargo el actual gobierno local propone impulsarlo como una fuente más de ingreso y trabajo para sus habitantes. Uno de los puntos principales de este proyecto es la restauración de la hacienda Viseca, lugar donde vivió el reconocido narrador y antropólogo José María Arguedas durante su infancia, y que inspiró muchas de sus obras.
Sin embargo, las posturas, tanto respecto del proyecto de impulsar el turismo, como del uso a dar a la casa hacienda Viseca, no parecían unánimes. No sólo parecía haber sectores de la población a favor y otros en contra del proyecto de restauración, sino además divergencias en cuanto a cómo llevar a cabo el proceso.
Ubicados en el marco de un posible proyecto turístico para el distrito, nuestra investigación consistió en conocer mejor la actitud de la población respecto de la posibilidad de turismo en su localidad. Había pues que identificar qué considera la población como atractivos turísticos de su zona, cuál es la infraestructura y los servicios disponibles para el proyecto, así como también ubicar quiénes son los gestores y cuáles son los conflictos que este proyecto está suscitando.
Metodología
La información fue obtenida a través de entrevistas a los pobladores y a las autoridades de las tres comunidades, así como a través de la observación y el compartir las vivencias cotidianas con quienes fueron nuestros anfitriones y entrevistados.
Agradecimientos
Son muchas las personas, adultas y niños, y las instituciones a las que debemos agradecer las facilidades que nos brindaron, y sobre todo la paciencia, cariño y expectativa con que nos recibieron y atendieron.
A la Comunidad Campesina de San Juan, la Comunidad Campesina de Utec, la Comunidad Campesina de Acola y el Municipio de San Juan de Lucanas que nos brindaron respaldo de diversas maneras. A Américo Peñafiel, Domingo Velásquez, Magín Sánchez, Leoncio Ramos Huamaní, Jaime Pariona Cruz, Cesar Meza, Mauricia cupe Oropeza, Mario Puza, Herbert, Lino Sánchez, el prof. Quispe, Efraín Amao, Raúl Mendoza, Oswaldo Solar, Jesús Velarde y Natividad de Mendoza que nos permitieron compartir un momento sus vidas, que acogieron nuestras preguntas, nos hicieran observaciones y sugerencias, y que compartieron con nosotros sus opiniones. A Luis Gariby, su señora madre y su tía, y a Pablo Rodriguez que nos acogieron tan cariñosamente. A Alicia Pariona, Liliana Aguilar, Nilda Campos, Severino de la Cruz Ríos, Audo Montoya, Luis Vicas Huamani, Félix Huaracca Alvarado, Marino Tomayro Aparicio, Aurea Mayna, Sindulfa Mayna, María Arauca, Nimia Velásquez Lucana, Sra. Tomasa, Srta. Adriana de la posta de salud, Sonia Sánchez, Karimé Andrade Sánchez, David, Milagros, Milagros, Maria Luz, Judith, Heidi, Beto, Soledad, a todas las niñas y los niños que nos abrieron un espacio entre tareas, juegos y bailes, y a todas las señoras que nos dieron su confianza. A Emilia Montoya Luca, Julian Montoya Alcca, e Ismael Jauregui Escajadilo quienes recordaron las cosas importantes y, además nos permitieron fotografiarlos. Y todas las personas que nos acogieron y ayudaron, y que no llegamos a mencionar. A todos: Muchas gracias.
