“Don Fermín entró al taller del platero por el patio. Ocupaba una de las últimas casas, hacia el oeste, camino de la costa; el patio era una especie de andén que formaba como el segundo piso de otro más bajo en que concluía el pueblo. Allí, en el bajo, solían despedir a los viajeros, antes de la construcción de la carretera. Los despedían con himnos tristes, especialmente a los reclutas. A ese andén donde se cantaba, siempre entre lágrimas de las mujeres y de los niños, se llama, como en todos los pueblos antiguos, “Kacharparly pata”, campo del desgarramiento.”
(J.M. Arguedas. Todas las sangres. Milla Batres: Lima 1980:43)
(J.M. Arguedas. Todas las sangres. Milla Batres: Lima 1980:43)
“Solían despedir”. Podría sugerir que antes de la construcción de la carretera la gente no dejaba tanto el pueblo, las despedidas eran entonces motivo de reunión de todo el pueblo, era la pérdida de parte de la familia y de la sociedad en su conjunto, por una lucha que no es la suya.