Me entero de la muerte del actor británico John Hurt a los 77 años víctima del cáncer de páncreas y no puedo menos de evocar la huella de su figura en algunas películas que mi generación lleva impresas y que tienen incidencia en como concebimos la persona y el poder.
Confieso que los juegos de artificio de luces, sonido y acción vertiginosa de las nuevas películas, donde la palabra y la historia se diluyen, me gustan poco. Como tampoco me gustan las películas de cine independiente, al menos de ese tan independiente que no hay ser humano sin galardón del Nobel capaz de entenderlas.
Por eso, citaré solamente cinco películas del gran actor británico que personalmente me impactaron. Son películas que no encierran ficción, jueguitos visuales, estrépito de disparos ni viajes a brillantes delirios imaginativos. Son películas que encierran enseñanzas valiosísimas, ejemplos de la condición humana en situaciones extremas y que permiten comprender mejor la complejidad de la condición humana, el poder y la ley. Veamos a modo de homenaje a este maestro de la actuación como se convertía en maestro de la vida…