Campesinos y representantes de la sociedad civil peruana exigieron hoy en Lima que los países industrializados indemnicen a los no industrializados por los efectos del cambio climático, que pone en peligro sus cultivos y los sume en una mayor pobreza.
“Es urgente que los grandes responsables del cambio climático global asuman su responsabilidad y transfieran fondos, pero como indemnización, por los daños que se están ocasionando”, dijo Eliana Ames, representante de Oxfam, organización que integra el Movimiento Ciudadano frente al Cambio Climático (Mocicc), presentado hoy.
Ames precisó que Naciones Unidas calcula que la ayuda que necesitan los países en desarrollo para adecuarse al cambio climático es de 100.000 millones de dólares anuales, pero Oxfam considera que además se requieren otros 50.000 millones.
“¿Adaptación o justicia climática?”, se preguntó a su turno Juan Torres, experto ambiental de la Universidad Nacional Agraria al remarcar que la adaptación denota “sumisión”, mientras que la “justicia climática” implica la delimitación de las responsabilidades en este problema mundial.
Torres remarcó que el cambio climático no sólo debe abordarse a nivel macro sino también a nivel de la vida cotidiana de los campesinos y pobladores de Perú, considerado después de Honduras y Bangladesh, uno de los países más vulnerables a los efectos del cambio climático, según el Centro Tyndall para Investigaciones Climáticas del Reino Unido.
El calentamiento global provocado por la emisión de gases de efecto invernadero impacta principalmente en las reservas de agua en Perú, situadas en las cabeceras de cuenca de las partes altas del país, acotó el académico.
En el marco del lanzamiento del Mocicc, campesinos de las regiones peruanas de Arequipa, Áncash, Cuzco, Junín y Piura, explicaron que el fenómeno afecta a sus cultivos y ganado y al abastecimiento de agua, además de haber traído plagas, entre otros problemas.
Solamente en las últimas doce campañas agrícolas se perdieron 80.000 hectáreas de papa, uno de los principales alimentos del planeta, debido al cambio climático y la degradación de la tierra, según el ministerio peruano del Ambiente.
Eduardo Eng, agricultor de Junín, señaló que el caudal de los manantiales de su región bajaron en un 50 por ciento y, como consecuencia, solamente pueden usar este recurso, que se les distribuye cada treinta días, para que emerjan las semillas.
Por su lado, la piurana Haydée Saavedra manifestó que antes producía 80 kilos de miel por año y ahora sólo 10, mientras el cuzqueño Julián Pillco expresó su confusión frente al cambio climático al explicar que los campesinos cultivaban en octubre y ahora lo hacen más tarde por la ausencia de lluvias, lo que afecta a la calidad de sus cultivos y los sume aún más en la pobreza.
http://www.soitu.es/soitu/2009/06/03/info/1244057152_640463.html