Washington.- Un árbol “fósil viviente” ha permitido a científicos de la Universidad de Michigan vislumbrar cómo ese ejemplar y las selvas tropicales han enfrentado el cambio climático y cómo pueden responder al calentamiento global.
Así lo reveló hoy un informe publicado en el número de noviembre de la revista Evolution.
Según Christopher Dick, profesor auxiliar de ecología y biología evolutiva y autor del informe, el árbol es el Symphonia globulifera, que apareció en África hace unos 45 millones de años.
Pero hace unos 15 a 18 años, misteriosamente crecieron algunos ejemplares en las selvas de América Central y América del Sur, según indican los depósitos de polen.
Es probable que las semillas hayan cruzado el océano sobre cúmulos de vegetación tal como lo hicieron los monos, manifestó Dick.
Y como América Central y América del Sur no tenían conexión terrestre hace millones de años, esas semillas del Symphonia llegaron a cada región por separado revelando condiciones meteorológicas diferentes.
Fuente: http://www.soitu.es/soitu/2008/10/31/info/1225409450_714224.html
Con mediciones de la diversidad genética entre las poblaciones existentes, Dick y Myrian Heuertz, de la Universidad Libre de Bruselas, reconstruyeron las historias ambientales de las áreas que colonizó el Symphonia.
Dick explicó la relación entre el cambio climático y la evolución genética de esos árboles al señalar que “en ambientes de mayor calor y mayor aridez, sus poblaciones probablemente se limiten en número, como ha ocurrido especialmente en América Central”.
Pero, por otra parte, agregó que también es probable que persistan por cuanto ese árbol de origen africano ha sobrevivido no solo en Centroamérica sino también en la cuenca amazónica.
“Eso nos dice que algunas cosas pueden sobreponerse a pesar del cambio forestal. Sin embargo, las modificaciones climáticas del pasado no estuvieron combinadas con la deforestación como ocurre ahora. Esa combinación podría perjudicar muchas especies en el próximo siglo”, sugirió el especialista.
Entender cómo el Symphonia respondió a las condiciones climáticas del pasado puede ayudar a predecir cómo las selvas reaccionarán a los cambios ambientales del futuro, dijo Dick.
“En el caso de América Central el Symphonia presenta poblaciones genéticamente muy diferenciadas en todo el paisaje”, agregó.
“Este patrón es resultado de la historia forestal específica de Mesoamérica, una región que estuvo relativamente seca durante el período glacial de hace 10.000 años”, agregó.
En la cuenca Amazónica, que se mantuvo húmeda durante el período glacial, hay menos diversidad genética entre las poblaciones, dijo.