El 17 de
diciembre Science publica una sección especial dedicada a los descubrimientos más importantes de la primera década de est milenio. Las promesas que la ciencia nos ofrece son nuevamente retos que proponen ir más allá de nuestros propios miedos.
Los nanotecnólogos tienen un motor. Una máquina cuántica puede ser la base de un sistema de transporte que moviliza al interior del organismo bacterias con órdenes para asaltar enfermedades, o llevar instrucciones para una reprogramación de las células abriendo perspectivas nuevas para renovar nuestros órganos, combatir el cáncer, o enfermedades que afecten el córtex cerebral. Pero un motor o un transporte son la posibilidad de muchos cambios en la industria de lo que no vemos.
Leer que el equipo de biólogos encabezado por Svante Paabo, del Instituto Max Planck de Antropología Evolucionaria en Leipzig (Alemania) reconstruyó unos dos tercios del genoma completo de tres Neardenthales femeninos, que vivieron en Croacia de 38.000 a 44.000 años atrás. Es un como un acto de justicia con nuestros antepasados y seguro será base para entender mejor el funcionamiento de los seres vivos y avanzar en las posibilidades de terraformación de Marte. Particularmente ahora que sabemos que hubo agua en él.