(Andina). La Ley de Igualdad Religiosa, que permitirá a los alumnos exonerarse del curso de religión en los colegios, deberá ser acatada tanto por las instituciones educativas públicas como privadas, opinó León Trahtenberg.
El reconocido pedagogo agregó que la norma, promulgada por el Ejecutivo, es una expresión de tolerancia y un paso importante en el reconocimiento del derecho de las minorías a tener sus propias prácticas religiosas.
Por ejemplo, Trahtenberg manifestó que e*n el Perú el 25% de su población profesa religiones distintas a la Católica*, así que esta norma “es una manera de reconocer el derecho de las minorías a tener sus prácticas religiosas diferenciadas”.
En el tema educativo, el educador señaló que es un derecho de los padres exonerar a los hijos de la religión que se imparte en el colegio, cuando esta no es coincidente con la religión que vive la familia.
Indicó que en los colegios públicos no habrá problemas, porque el curso de religión que se imparte tiene que ver con la Católica, y la gran mayoría profesa ese credo, así que serán muy pocos los que pidan su exoneración.
En cambio, agregó, en los colegios privados confesionales, dependerá de que tan comprometido esté el tema religioso, con el proyecto educativo que se ofrece.
Dijo que si el componente confesional es muy extendido, es decir, que no solo se agota con una hora de religión a la semana, sino que abarca otros aspectos del plano educativo, podría generarse un conflicto entre el derecho de los promotores de ofrecer el tipo de educación que les parezca pertinente a sus valores, y el derecho de los padres de exonerarse al área de religión.
PADRES Y MAESTROS DEBEN PONERSE DE ACUERDO
Trahtenberg sostuvo que cada colegio va a encontrar la fórmula que sea aceptable para los padres de familia como para los promotores.
“Lo más probable es que en aquellos colegios donde la incompatibilidad entre los padres y el colegio sea muy notorio, al final los padres van a optar por otro colegio, o los colegios se van a reservar el derecho de admisión”, anotó.
Refirió que en Europa, este tema ya ha sido solucionado con la laicidad absoluta del sistema educativo, o una propuesta variada de colegios confesionales privados, financiados por el Estado.
Asimismo, en ese continente existen colegios confesionales financiados por el Estado, gratuitos para los alumnos, junto a colegios públicos totalmente laicos, con lo cual los padres pueden escoger qué tipo de educación desean para sus hijos.