La creatividad requiere de la espontaneidad. Todo niño, sin ninguna presión externa, resultará por curiosidad haciendo preguntas. Es primero en la familia, luego en la escuela, donde las preguntas que surgieron espontaneamente no encuentran respuesta. La semilla de la espontaneidad, no encuentra terreno fértil. Reconocer que cada persona es diferente a la otra, es dejar en libertad para el ejercicio de su espontaneidad. Los curriculos en los colegios, han aplastado la espontaneidad y los estudiantes son introducidos en un aula para que sean in-formados, bajo la orientación de un “maestro”.
Se pretende que los estudiantes “aprendan capacidades”, no a partir de su espontaneidad, sino por la presión de su entorno artificioso. Mas aún, cuando el “maestro” de acuerdo al cartel de capacidades, diseña exprofesamente una “actividad significativa” para introducirle la “capacidad o competencia” al estudiante.
Un rasgo característico de un curriculo productivo, es construir situaciones de libertad plena para el ejercicio de la espontaneidad. Todas las personas, recuerdan aquellos momentos de su vida que ocurrieron espontaneamente, como los de de mayor significación. Es el SIGNIFICADO de estas experiencias, que impulsa la creatividad en la persona. En tal sentido, un curriculo productivo, tendrá que regular la influencia de los agentes externos al estudiante (acciones de los padres, maestros, insitituciones, medios de comunicación) que afectan su espontaneidad. Cuando no sea posible regularlos, el estudiante debe ser aislado de esos factores perturbadores.
Estando frente a un hecho, fenómeno o situación, que te invita a interrogarlo libremente, es porque se esta despertando la semilla de la creatividad. Esa semilla hay que crecerla, dotandola de condiciones apropiadas para que de frutos de creatividad. Es muy ilustrativa la entrevista que se hace a la primer piloto mujer en el Perú de un airbus.
El curriculo del Ministerio de Educación, con sus aulas, profesores, auxiliares, uniformes, contenidos, cartel de capacidades y “actividades significativas”, anula la epontaneidad de los estudiantes. Sobreviven solo aquellos que tienen la suficiente resiliencia, como para mantenerse interrogando, generalmente fuera del horario del currículo formal.
Un curriculo productivo deberá prescindir de esos elementos que anulan la espontaneidad, base de la creatividad. Urge un cambio de paradigma educativo. Pasar al paradigma educativo de la construcción de ESPIRALES DE CREATIVIDAD SOCIAL.
¿Qué es un espiral de creatividad social? ¿Cómo se relaciona con la educación? Veremos mas adelante experiencias concretas para entender esto.
Para mayor debate leer los enlaces siguientes:
Libertad y Espontaneidad
Entrevista a Melani Wiedler
Mujeres, Constituyente y Refundación de Bolivia