Concluyen cuatro años del segundo Gobierno de Alan García, y en educación la memoria colectiva registra dos hechos, el haber creado un colegio para seleccionados con horario completo mañana y tarde funcionando en Chosica y la denominada carrera pública magisterial para aquellos profesores que aprueban exámenes de selección elaborados por el MINEDU.
La oferta de aumentar el número de horas lectivas a 7 horas diarias, fue demagogia. Las escuelas primarias y secundarias, continúan ofertando un solo turno de 5 horas diarias de clases. Con esta grave limitación, los escolares, son sometidos en el turno que no asisten a la escuela, a la acción corrosiva de los medios de comunicación masiva que difunden consumismo, hedonismo, violencia en la crónica roja diaria, avisos de prostitución y entretenimiento vacío. Hay que utilizar un poco de sentido común, para que cualquiera, analice el contenido de la mayoría de periódicos, de los programas de televisión, del internet y de mensajes en los celulares, medios a los cuales tienen acceso libre los escolares. Esta contracultura, es masiva en las zonas urbanas, y está ingresando en las zonas rurales, donde antes, por la carencia de energía eléctrica no había acceso a la televisión y al internet.
Dos preguntas ¿los escolares del “super colegio” al egresar continuarán en el país, o se irán a seguir sus estudios en el extranjero? ¿Los escolares de las demás escuelas del pais, cómo diferencian a un profesor en carrera magisterial de quién no lo está? Serán, al término de este gobierno, de cinco años perdidos más, y no habrá mejora en la educación, porque se insiste en un modelo educativo obsoleto.
El país, es rico en recursos naturales, pero débil en unidad nacional de sus habitantes. La verdadera fuerza de la nación surgirá con la construcción de una identidad nacional, que potencie la autoestima de cada uno y de la comunidad a la que pertenece. En ese sentido, la educación, como el alma de un pueblo, debe estar en todos los rincones del país, y todos los escolares hasta los 17 años en forma obligatoria, deben ir al encuentro de su alma. Para lograr la identidad nacional, en un país conformado por comunidades de diversas culturas e incluso idiomas, es posible sólo con un modelo educativo, que implemente un currículo nacional homogéneo (que da el nexo de unidad), pero a la vez enraizado con la identidad de cada comunidad (identidad de comunidad).
Explico el concepto de este modelo educativo: Los peruanos destacados en las áreas o disciplinas de los conocimientos, las ciencias y las artes, a través de sus organizaciones, sean colegios profesionales, asociaciones u otras, deben trabajar una propuesta de currículo por cada área. Por ejemplo, los destacados en matemáticas, deberán elaborar el currículo en matemáticas de los escolares desde inicial hasta secundaria. De igual manera en los otros campos. Se ha logrado identificar 20 áreas o disciplinas que deben ser homógeneas y debe desarrollar todo escolar en forma de cursos. De alguna manera, el concepto de llevar cursos ya está asimilado como rasgo de la cultura en el país. Lo nuevo es cómo enraizar la educación en la identidad de la comunidad, y que ya, se tiene intentos en quienes propugnan mejoras en la labor educativa, incorporando metodologías de investigaciones pedagógicas recientes.
La educación es la vida misma, por eso, la escuela con la casa y el medio, son los espacios donde esta se desarrolla. El grave error conceptual, es haber separado la escuela de los otros espacios, y haberla convertido en un escenario cerrado de cuatro paredes, que se pretende romperlas con la incorporación de metodologías activas. Ya, los antiguos peruanos, educaban en el mismo medio, la escuela no era un edificio con portero y rejas. Si había que aprender los conocimientos para cultivar el maíz, ellos no tenían porque inventarse escuelas, los jóvenes erán integrados gradualmente al trabajo y trasmitían el conocimiento los comuneros más exitosos en la siembra de maíz. Esta forma, que parece rudimentaria, encierra un profundo valor pedagógico, que debemos revalorar, y que será, desarrollado en un concepto moderno, el verdadero modelo educativo que necesitamos.
Imaginemos la vida de un escolar en este nuevo modelo educativo. Un día, en cierta comunidad, los niños de 12 años a las 6 de la mañana se levantan de su cama, luego se asean, toman su desayuno, y en paralelo están viendo como va su proyecto productivo de acuerdo al entorno comunal, llegado las 8 de la mañana, abren su libro de geometría y continúan con la lección correspondiente del día, llega el profesor y les da algunas ayudas para resolver las situaciones problemáticas, después retoman otra vez su proyecto productivo por un lapso de tiempo apropiado según las necesidades del mismo, luego abren su libro de administración y economía y resuelven las situaciones planteadas con la ayuda de su profesor, ya cerca del mediodía, a las 12 se ponen a almorzar, luego a las dos de la tarde, abren su libro de sicología que les da orientaciones sobre la introspección a sus emociones, con ayuda de la profesora resuelven los dilemas sicológicos planteados, luego tienen un lapso de tiempo para continuar con su proyecto productivo, después retoman el libro de biología, que hoy les explica conceptos fundamentales de una planta oriunda del pais. A las 6 de la tarde, se asean de nuevo, luego se ponen a cenar, y después a ordenar las cosas de su proyecto productivo. Se van a dormir a las 8 de la noche.
Para definir el proyecto productivo, deben participar los padres y la organización de la comundidad, conjuntamente con los escolares, de acuerdo a sus habilidades y medios con los que cuentan. Además debe ser una actividad orientada a generar un bien o un servicio y a la vez que permite desarrollar habilidades. Cómo estos proyectos productivos están relacionados a las necesidades básicas de la vida como son alimentación, vivienda, salud, producción, vestido y otros, debe ser incorporado como profesores de proyectos a especialistas en cada rama.
Este nuevo modelo requiere que, las escuelas deben ser aulas pequeñas de no más de 20 estudiantes, pero integradas al medio donde viven los escolares. Es suficiente una habitación con 20 mesas pequeñas y un baño de fácil implementación por los padres, si se careciera del ambiente. Los ambientes para los proyectos productivos, deben ser planificados para usar espacios de las casas y de las zonas productivas que se definan por los padres, las organizaciones y empresas en las comunidades. Los profesores, deben ser tanto pedagogos, como especialistas en ramas de producción de bienes y de servicios.
Se requiere un gobierno comprometido con la construcción de una VERDADERA NACION PERUANA, que sea capaz de decretar la obligatoriedad de los dos turnos de clases de 4 horas en la mañana y de 4 horas en la tarde, y que sea capaz de orientar los recursos económicos para remunerar a un profesor a tiempo completo en 2,000 soles mensual cómo básico, para un estimado de 550,000 profesores que permitiría atender a los 8 millones de escolares, requiriendo un presupuesto de 16 mil millones de soles anuales. Hoy, ese presupuesto se gasta en los programas sociales, que si se invirtiera en educación, sería una inversión mucho más eficaz que el despilfarro clientelista con el cual se manejan esos recursos. A contnuación el horario escolar.