En la dirección equivocada va Lima, si tomamos en cuenta la dirección del desarrollo que siguen las ciudades para el futuro: la convivencia armoniosa del hombre con la naturaleza. Las áreas para el cultivo de árboles, huertos y jardines, ya son bastante reducidas para la densidad poblacional actual. Sin embargo, la ausencia de una visión de conjunto, ha llevado para que se piense equivocadamente, que para resolver un problema se debe agravar otro, quizá sin darse cuenta.
Es el caso de la concepción del Alcalde Luis Castañeda y de su equipo, en el afán de resolver el grave problema de la congestión vehicular que sufre Lima, han iniciado una campaña sostenida de construcción de más carriles en las avenidas y en la ampliación del asfaltado de calles y de veredas. Para ello, las zonas terrosas y polvorientas, en lugar de convertirlas en bosquecillos, jardines y huertos que todavía existían en algunas avenidas, como el caso de la Av. Venezuela, han sido niveladas, colocando una capa de concreto reforzado con acero y sobre ella una capa de asfalto negro. Otras avenidas como por ejemplo, la céntrica Av. Bolivia, los añejos árboles que acompañaban a los vecinos, han sido cortados y convertidos en leña, en su lugar se van colocando adoquines y adornos circulares con la idea de plantar “árboles de maceta”. A toda esta campaña municipal, se le ha denominado “recuperar la avenidas y las veredas”.
Los estudios teóricos del tráfico vehicular (Rodrigo Fernandez A. Elementos del Trafico Vehicular, 2008), vienen demostrando que las concepciones de ampliar carriles, reducir el ancho de las veredas, reducir espacios para bosquecillos, huertos y jardines, así como construir by pass de varios carriles, no son una solución para la congestión vehicular, sino por el contrario, estas construcciones incrementan aún más la congestión vehicular, sirven como “atractores” vehiculares y no están acorde con la visión de calidad de vida del hombre moderno.
En la fotografía, pueden constatar en la Av. Venezuela, hoy convertida en una “super avenida” con seis carriles, desaparecieron las zonas terrosas, las veredas hay partes han sido reducidas a 80 cm de ancho y en otras partes practicamente se tiene que hacer equilibrio para caminar. Orgullosas, las autoridades municipales, exhiben una foto antes y una foto ahora en las presentaciones de sus logros. Aquí he puesto la foto de antes (google earth). La foto de ahora, es fácil imaginarla, a los dos carriles que tenía la Av. Venezuela, agregarle cuatro carriles más, y adicionalmente separador de concreto y paraderos, todo el espacio de la Avenida convertido en una ancha zona negra. En el cruce de la Av. Venezuela y Universitaria, se ha construido el by pass de seis carriles, un puente peatonal para cruzar la Av. Universitaria a pie que demora 3.5 minutos (antes se hacía en 30 segundos) y, todavía falta la oreja y los otros tres carriles de la Av. Universitaria en el otro sentido que ingresarán al campus de la UNMSM. Es un gasto muy grande, pero que traerá más polución: ruido y gases tóxicos. El espacio de una avenida con amplios jardines, bosquecillos y huertos han muerto, ahora todo es negro, inerte; ha quedado prohibido caminar.
Si esos recursos, se hubieran utilizado para conformar un equipo de investigadores en tráfico vehicular (de las universidades peruanas), para buscar la alternativa de solución a la congestión vehicular, acorde con las tendencias mundiales de calidad de vida en una ciudad y a una investigación propia de nuestra realidad, no se hubiera llegado a este despilfarro y agresión. En el futuro tendrá que volver a ser la Av. Venezuela de antes, con la única diferencia que será verde.
La alternativa es una ciudad de calles y avenidas verdes: sin cruces, en analogía a los hormigueros o a la circulación sanguínea (luz verde), con amplias zonas de bosquesillos, huertos y jardines a lo largo de ellas, con veredas de 2.5 metros de ancho invitando a camiralas por estar rodeadas de vegetación, es decir, vivir en armonía con la naturaleza de forma saludable. Solo de esta forma valdrá la pena colocar un cartel ¡Estamos recuperando las Avenidas!
Hasta Abril del año 2012, algunos funcionarios municipales siguen actuando como si los dirigiera Castañeda Lossio y la alcaldesa Villarán no lo sabe.
Desde Emape han anunciado que tal sólo dejarán de hacer el anillo vial que invadía 11,000 mt2 del campus, es decir, con las otras obras del proyecto estarían mutilando tan sólo 18,000 mt2 de la Ciudad Universitaria, lo que también será rechazado por la comunidad Sanmarquina.
Vean el cuadro comparativo entre las propuestas de Emape y las de la UNMSM:
http://profemaravi.blogspot…
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