En una reciente escapada a unan librería limeña encontré un pequeño libro de Claudio Magris («Literatura y derecho ante la ley», 2008), cuya lectura me hace apreciar, aún más, la fina pluma y la agudeza intelectual de este escritor y ensayista italiano. En esta ocasión, Magris mira al derecho y la ley desde la literatura y lo hace no sólo con la gracia del buen narrador, sino también con la sabiduría del jurista.
Magris sabe que el derecho no se reduce a las leyes promulgadas por los parlamentos. “Esas leyes no escritas de los dioses a las que apela Antígona, no son consuetudinarias, de larga duración –aunque sigan siendo históricas y, por lo tanto relativas-, sino imperativos categóricos absolutos. Antígona es el símbolo interminable de la resistencia a las leyes injustas, a la tiranía, al mal.