Conmoción en Iglesia de Inglaterra por rechazo a ordenación de mujeres obispo
La propuesta fue respaldada en la votación por obispos y clérigos, sin embargo le faltaron seis votos en el grupo de los laicos para obtener la mayoría requerida. Obispos anglicanos y algunos políticos británicos están buscando alguna alternativa para evitar tener que esperar por lo menos seis años para que la propuesta pueda ser llevada a votación nuevamente.
Este resultado supone un duro revés para el Arzobispo de Canterbury saliente, Rowan Williams, así como para el obispo de Durham, Justin Welby, quien lo reemplazará a partir de enero como primado de la Iglesia de Inglaterra y líder espiritual de la Comunión Anglicana. Además esta medida era considerada la más importante desde que las mujeres consiguieron entrar en el sacerdocio anglicano hace 20 años.
El documento interno de la iglesia -que ha sido redactado por el secretario general del Sínodo, William Fittall, y publicado a inicios de semana por el diario “The Times”- hace referencia a la difícil posición de la comunidad anglicana a raíz del rechazo a las mujeres obispo.
Tras la votación en contra, el proceso legislativo que permitiría un nuevo debate sobre las obispas deberá empezar otra vez, lo que en principio impide que el asunto se pueda votar antes de 2019.
La medida del Sínodo debe ser aprobada por el Parlamento británico y tiene que recibir consentimiento de la reina Isabel II. Sin embargo, Fittal cree que la jerarquía de la iglesia debe tomar medidas y buscar la manera de aprobar la ordenación de obispas en el 2015, puesto que el rechazo es perjudicial para los anglicanos pues ha sido recibida con “conmoción” entre sus fieles.
Según “The Times”, Fittall es el “funcionario” más destacado de la Iglesia de Inglaterra, y elaboró el documento destinado al Consejo de Arzobispos, 72 horas después de la votación. En su misiva, Fittall les hace saber a los arzobispos que hay una necesidad urgente de revertir el resultado de la votación y propone que sea debatido cuanto antes en otra reunión del sínodo. En su opinión, una medida radical es la única manera de evitar una crisis constitucional. “A menos que la Iglesia de Inglaterra pueda mostrar muy rápido que es capaz de solucionar sus problemas, estaremos ante una gran crisis constitucional”, agregó.
Por su parte, Lord Carey, arzobispo de Canterbury de 1991 a 2002, cuando la Iglesia de Inglaterra aprobó la ordenación de mujeres sacerdote, pidió un cambio en las normas de votación y se mostró contrariado por el rechazo a la propuesta. En una entrevista publicada también en “The Times”, el religioso apostó también por acelerar el proceso que permitiría una nueva votación. “Hace 19 años que contamos con mujeres en el clero. Están haciendo un trabajo maravilloso y deberían tener su oportunidad ahora. Es el momento de avanzar y ordenar a mujeres para el episcopado. Donde hay voluntad, hay un camino”, explicó el clérigo anglicano.
Según “The Guardian”, Justin Welby, quien asumirá el cargo de arzobispo de Canterbury en enero, apoya la celebración de una reunión con la Cámara de los Lores y los Comunes para debatir la crisis de la Iglesia.
El actual proceso legislativo a favor de la ordenación de mujeres obispos comenzó en el año 2000, pero la fuerte oposición del sector más conservador ha impedido su aprobación hasta ahora. Las mujeres suponen un tercio de los 11.000 miembros del clero de la Iglesia de Inglaterra, una cifra que va en aumento, ya que suponen también el 50% de quienes se preparan para el sacerdocio. Entre la Iglesia anglicana alrededor del mundo existen ya 23 mujeres obispos en activo en Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Estados Unidos y Suiza.
Sobre la organización de la Iglesia de Inglaterra
La Iglesia de Inglaterra se divide en dos provincias, cada una encabezada por un arzobispo (Canterbury es la Provincia del Sur y York del Norte). Cada provincia está construida a partir de las diócesis.
La Iglesia de Inglaterra posee un cuerpo legislativo, el Sínodo General. Las resoluciones del Sínodo deben ser aprobadas (pero no enmendadas) por el Parlamento del Reino Unido antes de recibir el consentimiento real y convertirse en parte de la ley inglesa. El monarca británico (en esta caso la Reina Isabel II) es el Gobernador Supremo de la Iglesia de Inglaterra.
En la Iglesia de Inglaterra se nombran arzobispos, obispos y decanos de las catedrales con el asesoramiento del Primer Ministro (quien es elegido por el parlamento). Los dos arzobispos y 24 obispos principales participan en la Cámara de los Lores, haciendo una importante contribución a la labor del Parlamento y cerrando el círculo que enmarca el vínculo existente entre la Iglesia y la esfera política en Inglaterra.
Para no confundir la Iglesia de Inglaterra con la Anglicana
La Iglesia Anglicana se compone de un gran número de provincias, que son parte de la Comunión Anglicana en todo el mundo. Cada una de estas provincias tiene autonomía y es dirigida por un arzobispo. La Iglesia de Inglaterra contiene sólo dos de estas provincias, la provincia de Canterbury, y la provincia de de York. Otras provincias anglicanas en el mundo son la de Gales, la Iglesia Episcopal de Escocia, y muchos países de África, América, y las iglesias anglicanas del Lejano Oriente.
El Arzobispo de Canterbury, no tiene ninguna autoridad formal fuera de su jurisdicción, pero es reconocido como jefe simbólico de la Comunión Anglicana mundial. Entre los otros primados, él es un primus inter pares, o “primero entre iguales”.
Si una persona es miembro de la Iglesia de Inglaterra es de hecho un anglicano – en este caso, todos los miembros de la Iglesia de Inglaterra son anglicanos. Sin embargo, un miembro de una de las otras provincias (por ejemplo, la Iglesia de Gales) no es un miembro de la Iglesia de Inglaterra, pero es miembro de la Iglesia en Gales. Pero como la Iglesia de Gales es una iglesia anglicana también es un anglicano.
Fuentes:
– Blog Religión Digital
– BBC News
– Agencias
– La Iglesia de Inglaterra. Sitio Oficial.