“para ayudar, o por lo menos no hacer daño”
Hipócrates.
(Epidemias Libro I, Sección II, número 5)
La conquista científica sobre las fuerzas atómicas, y en particular su uso militar, generó el siglo pasado una nueva atención respecto de los compromisos a los que debía someterse libremente el científico, siendo que el juramento hipocrático, referente de los médicos de occidente -y sus naturalistas- comenzaba a resultar lejano e ingenuo aunque más urgente que nunca.
El libro adjunto ofrece pistas para la reflexión sobre la relación entre ciencia y ética, ciencia y paz, y los riesgos globales: guerra nuclear, calentamiento climático, bioterrorismo… En artículos diferentes se discuten, en perspectiva de la “Cultura de Paz” desarrollada por Felipe MacGregor y promovida por UNESCO, varias propuestas de juramentos de ética para científicos con especial mención de propuestas a partir de la física; sendos artículos finales precisan, sin embargo, los temas de armas bacteriológicas y toxínicas, y de bioética.
También ofrece el texto una sugerente colección de documentos; entre otros figuran los textos siguientes:
• El Manifiesto Russel – Einstein
• El juramento hipocrático (siglo IV AC)
• El juramento indio de iniciación a la medicina – Charaka Samhita (siglo III AC)
• La oración de Maimónides (siglo XIII)
• El juramento de Galeno para farmacéuticos (siglo XVII)
• El juramento de los ingenieros del Canadá (c.1900)
• El juramento hipocrático para la era nuclear (1945)
• Juramento para Estadísticos (1952)
• Juramento de los Psicólogos (1952)
• Juramento para científicos naturales (1970)
• El código de ética de Uppsala (1984)
• El Compromiso del Comité para la Genética Responsable (1987)
• El código de ética para evitar el bioterrorismo (2005)
• Los 10 mandamientos de la Educación Superior (2007)
• El juramento hipocrático para las ciencias de la tierra (2009)
La construcción de los criterios de regulación de la investigación científica debe ser parte principal de la reflexión sobre la deontología profesional en las tareas académicas y profesionales. Pero evidentemente, requiere también la participación ciudadana indispensable para la elaboración de regulaciones basadas en una ética, compartida, de la responsabilidad. La magnitud del reto puede verificarse contra la proporción de la asignación a Defensa respecto del financiamiento para la investigación y desarrollo en los Estados Unidos, referido en un post anterior.
“Ciencia para la paz y el desarrollo: el caso del Juramento Hipocrático para Científicos”:Guillermo A. Lemarchand (editor), es una publicación de la Oficina Regional de Ciencia de la UNESCO para América Latina y el Caribe, como parte de la colección “Estudios y documentos de política científica en ALC (Vol.2)”; junio de 2010 (190 páginas).
La pista sobre este material nos fue sugerida por un post de Buena Voz, servicio católico de noticias para la comunidad PUCP.