The Chronicle of Higher Education (02/06/2014): Norman M. Bradburn y Robert Townsend, dos académicos con experiencia, comprometidos con la construcción de indicadores universitarios (en el proyecto Humanities Indicators), ponen en evidencia la falta de interés en el seguimiento de la calidad del claustro de profesores. En la discusión sobre cómo mejorar el sistema se menciona a estudiantes, administradores e investigadores; los profesores merecen menciones raras y fugaces a pesar de la evidencia de su importancia -como profesores, asesores, o tutores- en el éxito de sus alumnos. Entre las preguntas que han quedado fuera de esas discusiones figuran: ¿Quién está enseñando en las aulas de la universidad? ¿Cuáles son sus calificaciones? ¿Cuál su nivel de satisfacción? ¿Cuánto tiempo dedican a interactuar con los estudiantes? ¿Qué tecnologías usan tanto en su pedagogía como en sus interacciones con los estudiantes?