Tía María, entre Weber y Maquiavelo
¿Cómo se sentirán nuestros congresistas luego de ser rechazados por los alcaldes y dirigentes de Islay que, al verlos, decidieron retirarse de una reunión clave para solucionar el lío de Tía María? De seguro con rabia, pues quedó demostrado, una vez más, que gozan de autoridad, pero sin liderazgo ni poder. ¿Qué sentirán los alcaldes y dirigentes de Islay que actuaron así, perdiendo una excelente oportunidad para empezar a encontrar soluciones al problema, ya que estaban todas las autoridades en pleno, desde el central hasta el local? Seguramente felices, pues creen tener el poder y liderazgo, más no autoridad.