El pasado 03 de diciembre de 2018, la alumna Diana Luz Montes Álvarez sustentó la tesis titulada: “Niños músicos empoderados: el caso del Proyecto Sinfonía por el Perú” obteniendo el grado de Magíster en Gerencia Social.
El presente trabajo de investigación busca analizar la incidencia del proyecto Sinfonía por el Perú en los niños y jóvenes que participan en él, buscando analizar cómo éstos han mejorado en su autonomía y cómo han desarrollado su creatividad y libertad mediante las clases. El presente trabajo de investigación tiene relevancia para la sociedad y su propósito se alinea con los Objetivos del Milenio, por lo que se busca identificar no solo el impacto de los participantes a nivel de autonomía, creatividad y libertad, sino también en la generación de oportunidades y capacidades que les permite acceder a una educación inclusiva y equitativa. Asimismo, la investigación cobra relevancia desde la gerencia social, ya que la disciplina busca la promoción del bienestar, la democracia y la generación de un impacto positivo y de valor en las personas, elementos identificados en el Proyecto.
En el Perú, si bien existen espacios que permiten fomentar el arte en los niños y jóvenes, éstos son reducidos y la mayoría privados, por lo que el acceso al campo de la educación artística se ve limitado solo a aquellas personas que tienen la disponibilidad económica para solventarlo. Así, el acceso a la educación artística no se da de manera igualitaria y equitativa entre la población, donde como señala Nussbaum, son sumamente importantes para el desarrollo de una ciudadanía crítica, libre y creativa. Para poder comprender el acceso al campo educativo del arte, es importante analizar cómo se distribuyen los bienes y servicios alrededor del mismo, un espacio que tradicionalmente ha sido considerado como un hobby, al que solo un grupo reducido y con capacidad económica favorable puede acceder. En ese sentido, si bien dentro de la formación regular los niños y jóvenes llevan cursos de arte y música, un verdadero aprendizaje del campo y la adquisición de los beneficios del mismo, se da fuera de las aulas. Así, es la formación adicional lo que diferencia a los niños y jóvenes en el campo del arte, donde aquellos que logran formarse en el campo no solo adquieren servicios o manipulan bienes, sino que, y como señala Sen (1983), pueden lograr algunas capacidades que los diferencia de otros niños y jóvenes del país.
En los últimos años hemos sido testigos del crecimiento del campo del arte (creación de nuevos teatros, cine nacional, consolidación de músicos), aún existen falencias en lo que corresponde a la educación artística, especialmente en la música. Pese a esto, existen importantes iniciativas dentro del campo, como el caso del proyecto impulsado por Juan Diego Florez, Sinfonía por el Perú, el cual busca brindar clases de música a aquellos niños que no tienen la disponibilidad económica para hacerlo de manera particular. El proyecto está orientado a niños y adolescentes entre los 5 y 15 años de edad de las zonas más vulnerables del país, donde además de brindar clases de música, se busca formar a los niños y jóvenes en valores como la disciplina, la excelencia y el trabajo en equipo. Sinfonía por el Perú se enmarca en el ¿Sistema de Orquestas Juveniles e Infantiles¿, el cual cuenta en la actualidad con 13 núcleos, que actúan como espacios donde se brindan las clases, y benefician a más de 3000 niños y adolescentes. En ese sentido, el proyecto actúa como un espacio democratizador de oportunidades para niños y adolescentes de todo el país, ya que permite a sus participantes adquirir capacidades necesarias para su desarrollo integral además de competencias dentro del campo musical.
El jurado estuvo conformado por la asesora Mg. Teresa Tovar Samanez y los docentes, Mg. Jorge Vargas Torres y Mg. Javier Pineda Medina.
