Por otra parte, según nos refiere @giner en Twitter, de modo claro y rotundo, durante los primeros tres trimestres del 2012, se han vendido muchos más smarphones que PCs y tablets juntos. Hablamos de casi 500 millones de smartphones, frente a poco más de 85 millones de tablets y 260 millones de PCs. Visto de otro modo, los dispositivos móviles se están vendiendo a un nivel de más del doble que los PCs.
En este panorama hay dos sectores que se vienen transformando sustantivamente en su dinámica de acceso a la información, comunicación e interacción: las empresas (en especial las pequeñas y medianas) y las instituciones educativas (en especial las de nivel superior o post secundaria). Aunque muchas de ellas se resisten al cambio (y continuarán su ruta sin retorno a la obsolescencia), muchas otras aceptarán el desafío y harán un uso diverso y creativo de estás oportunidades.
Mucho trabajadores “de oficina” no tendrán que acumular una determinada cantidad de horas “presenciales” como medida burocrática de su cumplimiento y desempeño. Al contrario, podrán demostrar su contribución aportando y produciendo en entornos distintos al ambiente rutinario, en cualquier momento y desde cualquier lugar, inclusive en la comodidad de su hogar, y ganar en autonomía y oportunidades para su desarrollo, desempeño y satisfacción laboral.
Por su parte, los estudiantes no sólo dispondrán de mayores recursos para el aprendizaje formal y no formal sino, también, mejores oportunidades en su formación y especialización, desde la educación básica, pero en mayor medida a nivel pregrado y postgrado universitario. Es más, podrán organizar mejor su tiempo y actividades para combinar e integrar mejor su desempeño laboral y su desarrollo profesional, aprovechando estas nuevas opciones educativas cuando lo considere más adecuado.
El 2013 será un año en que veremos con mayor claridad la diferencia entre las empresas e instituciones que incorporen las ventajas de los dispositivos móviles (tablets y smartphones) en su infraestructura tecnológica, cada vez más ubícua, y aquellas que se van rezagando cada vez más.