DESBORDE DE PARTICIPACIÓN

[Visto: 1495 veces]

Pedro Alva Mariñas.
(Artículo publicado en el semanario Expresión de Chiclayo)

Quien visita o sigue con algún detenimiento el actual proceso social en Lambayeque podrá comprobar un interesante dinamismo de los sectores organizados de la sociedad y en especial de aquellos más atentos a problemáticas más generales. Notaremos ese dinamismo en las mesas de concertación establecidas para tratar diversos temas, asociaciones sin fines de lucros, en los concejos de coordinación regional y en los consejos de coordinación locales, en dirigentes de organizaciones sociales diversos y más recientemente formando verdaderas redes de apoyo a diversas candidaturas al Congreso y a la Presidencia de la República. Estas iniciativas, al involucrar a muchos actores nos, está llevando a pensar en la existencia de un verdadero “desborde de participación” que resulta difícil de entender en un contexto de tantas dificultades y de graves problemas de liderazgo. Un hecho adicional es que este dinamismo está presente no sólo en Chiclayo, sino también en las provincias de Ferreñafe y Lambayeque.

Esta tesis sobre la gran capacidad de la sociedad regional organizada se confirma con su entusiasta participación en el proceso electoral reciente, al formar parte de los comités de campaña de cerca de un centenar de candidatos al Congreso de la República. Tratando de cuantificar esta participación pensamos que no es exagerado pensar que en esta fase de la campaña electoral se formaron un promedio de 20 comités de apoyo por candidato, que multiplicados por los 100 postulantes nos arrojan un total de 2000 comités de base. Si multiplicamos cada comité por un promedio de 8 integrantes tenemos la cantidad de 16,000 personas sumidos en intensa actividad durante un promedio de tres meses. Nos encontramos entonces con cantidades mayores, es decir de un esfuerzo social muy grande que se constituye en la “maquinaria” electoral que pocos ven y de la cual casi nadie habla.

Sabemos que el actual dinamismo de la sociedad regional no es de ahora sino que se viene expresando desde tiempo atrás, desde el periodo de transición democrática y aún antes y se expresó en el surgimiento de movimientos cívicos como, marchas y paralizaciones por los grandes proyectos de desarrollo , movimientos por la paz, acción ciudadana, movilizaciones de pueblos jóvenes, movilizaciones y luchas de las comunidades campesinas, trabajadores azucareros, los colectivos de organizaciones sin fines de lucro, las entidades gremiales profesionales y productivas que hicieron lo suyo y también se expresó en la creación de espacios de concertación en los cuales la sociedad organizada de Chiclayo, Ferreñafe, Lambayeque y varios distritos han jugado un rol protagónico.

Obviamente la presencia de un gobierno autoritario como el de Fujimori – Montesinos no daba espacio para expresiones de la sociedad regional independiente que si encontraron espacio para desarrollarse en los gobiernos de Paniaguañ, de Toledo y de García.

Es usual en ambientes de la capital escuchar la tesis que este dinamismo de la sociedad regional lambayecana tiene su fuente en la particular actuación de la administración del gobierno regional. Nosotros tenemos suficientes indicios para que, sin negar aquello, afirmar que el dinamismo de la sociedad regional organizada es muy anterior al proceso de descentralización y todo parece indicar que tiene energías y reservas para enfrentar los nuevos desafíos que enfrenta esta tierra y su gente.

Puntuación: 5.00 / Votos: 2

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *