Se entiende por desarrollo sustentable o sostenible aquel que equilibra el crecimiento económico con adecuado patrón de explotación de los recursos naturales y con la protección del medio ambiente.
El desarrollo de los países hoy denominados capitalistas han sido dispendiosamente usuarios de recursos. Sin considerar su posible agotamiento, han sido consumidores de energía sin preocupación por el agotamiento de las fuentes ni por las consecuencias sobre el medio ambiente y sobre las con decisiones de supervivencia de diferentes especies vegetales, animales y de la propia humanidad. La posibilidad de agotamiento de los recursos y el deterioro del medio ambiente ya no son amenazas lejanas y tal vez solo teóricas, sino realidades inmediatas. En todo caso, los países que se encentran en las etapas iniciales del desarrollo y que tiene la necesidad de acelerarlo, tiene que asumir estas condiciones y conformar sus procesos de transformación en forma consecuente.
Además de una exigencia y una expectativa renovada en lo que toca al desarrollo de cada país, esta dimensión plantea la urgencia de algún tipo de acuerdo mundial para armonizar las necesidades de la humanidad y de la naturaleza. Se trata también de buscar la satisfacción de las necesidades del presente, sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones de satisfacer sus propias necesidades.
Una publicación de las Naciones Unidas recuerda que el desarrollo se centra en los seres humanos y no en los induces económicos, por tanto los logros se deben evaluar en términos mas amplios.
Por otra parte debemos recordar que en realidad estamos tomando en usufructo la tierra de nuestros descendientes, de la humanidad del futuro y que debemos entregársela en condiciones razonablemente utilizables. Existen pues problemas de redefinición de los proyectos de desarrollo de cada país y hay necesidad de complementariedad o reciprocidad a nivel mundial.
El ritmo de patrón desarrollado de unos ha determinado concentración de población y actividad; así como la falta de capacidad y de medios , frente a urgencias graves , ha determinado depredación, aun dentro de un primitivismo tecnológico. Consecuencia de lo primero es la sobre explotación de recursos y el uso incontrolado de energías contaminantes ; consecuencia de lo segundo es el empobrecimiento de la tierra y la enajenación de las materias primas, al margen de cualquier consideración de largo plazo. Si se aspira a un desarrollo duradero , es decir, si se toma en cuenta que el proceso a que nos referimos es un proceso abierto, porque siempre será posible y deseable mejorar las condiciones de la vida humana, es fundamental colocarse en una perspectiva de las futuras generaciones y superar el inmediatismo. La dimensión contiene elementos importantes, rescata la interdependencia de los diferentes elementos en el ecosistema y plantea un desafío enorme a la creatividad, a la tecnología con que se debe afrontar el futuro una producción suficiente y que minimice los subproductos de destrucción, la depredación y los residuos nocivos.