Archivo de la etiqueta: cuaresma

Cuaresma: Día 03

CUARESMA: DÍA 03

El Padre Jorge Loring (+) nos ha dejado un valioso libro llamado PARA SALVARTE, donde nos explica, entre muchas otras cosas, los Mandamientos de Dios y los pecados con los cuales pecamos contra este mandamiento.

Hoy revisaremos el Primer Mandamiento de Dios: Amarás A Dios Sobre Todas Las Cosas.

Amar a Dios no es, precisamente, sentir cariño sensible hacia Él, como lo sentimos hacia nuestros padres; porque a Dios no se le ve, y a las personas a quienes no se ve es difícil tenerles cariño. Dios no obliga a eso, pues no está en nuestra mano. Aunque hay personas que llegan a sentirlo, con la gracia de Dios. Amar a Dios sobre todas las cosas es tenerle en aprecio supremo, es decir, estar convencido de que Dios vale más que nadie, y por eso preferirle a todas las cosas. Tú puedes tener mucho más cariño al cuadro que pintó tu hija, que a cualquiera de los cuadros que se exponen en el Museo del Prado de Madrid, aunque reconozcas que estos últimos tienen mucho más valor artístico. El amor a Dios es apreciativo.

Tenemos que amar a Dios porque «Él nos amó primero» y debemos corresponderle.

El amor se manifiesta en obras más que en palabras. Obras son amores y no buenas acciones .

Amar a Dios es obedecerle, cumplir su voluntad. No hacer mal a nadie .

Hacer bien a todo el mundo.

Una prueba de amor a Dios sobre todas las cosas es guardar sus mandamientos por encima de todo . Es decir, estar dispuesto a perderlo todo antes que ofenderle. Por lo tanto preferir a Dios siempre que haya que escoger entre obedecerle o cometer un pecado grave. Es el caso de San Pelagio de Córdoba y de Antonio Molle, de Santa María Goretti y Josefina Vilaseca, que se dejaron martirizar y apuñalar antes que cometer un pecado grave.

San Pelagio murió mártir el año 925 por rechazar las proposiciones deshonestas del Califa cordobés Abderramán III .

Antonio Molle, joven jerezano que a los veinte años fue mutilado y martirizado el 10-VIII-1936 durante la guerra civil española. Cayó prisionero de los milicianos en el frente de Peñaflor (Sevilla), y como llevaba un escapulario quisieron hacerle blasfemar. Él siempre contestaba gritando: Viva Cristo Rey! Le cortaron las orejas y le sacaron los ojos, y al final lo acribillaron a balazos. Así lo cuenta Rafael de las Heras, testigo presencial . Hoy su cuerpo mutilado está enterrado en la Basílica de Ntra. Sra. del Carmen Coronada de Jerez de la Frontera (Cádiz).

María Goretti , italiana, murió mártir de quince puñaladas por negarse a los deseos impuros de un amigo suyo, que después se convirtió y murió fraile franciscano.

Josefina Vilaseca también murió apuñalada en Diciembre de 1952 en Artés, diócesis de Vich, por negarse a perder su virginidad. Tenía doce años Dice Jesucristo: «el que guarda mis mandamientos, ése es el que me ama». Y San Juan : «En esto consiste el amor Dios, en guardar sus mandamientos».

Este mandamiento también nos obliga a creer en todas las verdades de fe; a esperar en Dios, confiando que nos dará las gracias necesarias para alcanzar la vida eterna ; a adorarle solamente a Él, darle el culto debido y reverenciarle con el cuerpo y con el alma.

Este mandamiento nos manda adorar a Dios .

Este mandamiento prohíbe especialmente la idolatría que consiste en adorar como a Dios a otra cosa o persona.

Peca contra este mandamiento quien maltrata personas, lugares o cosas consagradas a Dios: por ejemplo, una religiosa o un cáliz. Este pecado se llama sacrilegio . Comete también un sacrilegio quien administra o recibe en pecado grave algún sacramento que requiere estado de gracia, lo cual es gravísimo. Por ejemplo, quien se casa en pecado grave, o quien comulga en pecado grave.

Peca, además, contra este mandamiento quien desconfía de la misericordia de Dios , o confía temerariamente en su bondad, permaneciendo mucho tiempo en pecado mortal, o el que peca más y más, precisamente porque Dios es misericordioso y nos ha prometido el perdón; quien tiene fe en adivinos, echadores de cartas, horóscopos, espiritistas y curanderos ; quien cree en serio cosas supersticiosas (mala suerte del n 13, cadena de oraciones, etc.); quien niega o duda voluntariamente de alguna verdad de fe, o ignora por culpa suya lo necesario de la Religión.

El hombre o es religioso o es supersticioso. Muchos que no creen en las verdades de la Religión, luego creen en las mentiras y engaños de adivinos, brujos y espiritistas.

No es lo mismo parapsicología que superstición. La superstición es atribuir a cosas creadas poderes que son exclusivos de Dios . La parapsicología trata de hechos naturales aunque más allá de la psicología. Son fenómenos para-normales. En cambio la superstición es atribuir resultados desproporcionados a las causas empleadas. Todo resultado que supera a las causas naturales adecuadas es de origen sobrenatural. «Sólo Dios conoce el futuro libre, y sólo Él puede revelar el porvenir a sus profetas».

cuaresma guia para una buena confesion krouillong pecados capitales comunion en la mano

Para que la duda sobre una verdad de la Religión sea pecado, es necesario que sea voluntaria .

No es pecado darse cuenta de que el misterio es difícil de entender, que nuestro entendimiento no lo puede comprender, etc. Si a pesar de todo esto, se fía uno de Dios que lo ha revelado, y cree, no sólo no hay pecado, sino que hay mérito .

En la absoluta veracidad divina -motivo formal de la fe- no cabe error o el engaño Lo que no se puede hacer -a pesar de la oscuridad profunda del misterio- es dudar si será eso verdad o no. Esta duda positiva, tomando como cosa incierta lo que Dios ha revelado, es pecado. El pecado contra la fe está en la negación o en la duda voluntaria de aquello que se sabe que Dios ha revelado .

Esto no se opone a la falta de claridad que podamos tener sobre una verdad de fe, ni al deseo de esclarecerla, dentro de lo posible, sabiendo que hay misterios que superan la inteligencia humana.

El pecado será grave, si es una duda voluntaria, a sabiendas, de una verdad que la Iglesia dice que hay que creer. Si la duda no es voluntaria, sino una mera ocurrencia de las dificultades que a nuestro entendimiento se le presentan, no hay pecado; o a lo más pecado venial, si ha habido alguna negligencia en resistir a la tentación. Si la vacilación llega a tomar por incierto lo que es dogma de fe, el pecado sería grave contra la fe. La fe debe extenderse a todas las verdades reveladas por Dios y propuestas como tales por la Iglesia.

Nadie pierde la fe sin culpa propia . Dijo el Concilio de Trento: «Dios no abandona a nadie, si no es Él abandonado primero»

Ningún adulto puede salvarse si no hace actos de fe . «Dios no puede dar al hombre adulto responsable el don de su amistad sobrenatural, sino cuando el hombre la acepta previa y libremente».

Si sabes el Credo de memoria, es un magnífico acto de fe. El Credo lo tienes en los Apéndices. Si no lo sabes, aquí te pongo un acto de fe muy breve; pero debe decirse con toda convicción.

Creo que Dios existe.

Creo que Dios nos dará después de la muerte lo que merezcamos con nuestras obras en esta vida .

Creo que hay un solo Dios verdadero en tres Personas distintas.

Creo que estas tres Personas son: Padre, Hijo y Espíritu Santo.

Creo que Dios se hizo Hombre y murió en una cruz para salvarnos .

Y si lo quieres en dos líneas: Creo firmemente en todo lo que la Iglesia dice debemos creer, porque Dios lo ha revelado .

Para fortificar nuestra fe, deberíamos hacer actos de fe de cuando en cuando, sobre todo en la hora de la muerte.

La fe es como un sexto sentido que nos ayuda a un superior conocimiento de Dios. Quien no tiene fe, no se lo puede explicar. Como una planta no puede explicarse la música, porque no capta nada.

La fe no se puede demostrar con argumentos , pues es un don, no una ciencia. Pero pueden darse razones de su credibilidad. La fe supera la razón, pero no la destruye. El motivo de creer no son las razones filosófico-científicas de las verdades reveladas, sino la autoridad de Dios que las ha revelado. Esas razones ayudan a ver que la fe es razonable, pero no son el motivo principal de la fe. Podemos saber que Dios nos ha hablado, y por tanto tenemos obligación de creer lo que Él nos ha dicho .

Estimemos sobre todas las cosas el don divino de la fe; procuremos conservarla con la oración y el estudio, hacerla conocer y amar por los demás, defenderla si es atacada, y pedir a Dios que sea conocida y aceptada por los incrédulos y los infieles.

Al mismo tiempo debemos evitar todo aquello que pueda ponernos en peligro de perderla. Los que descuidan su instrucción religiosa, los que escuchan voluntariamente a los que la atacan, o leen libros o periódicos contra la fe, los soberbios y los impuros se ponen en peligro de llegar a perder este don divino.

Si alguna vez oyes una dificultad contra la Religión Católica y no sabes resolverla, no te alarmes por eso. Es imposible que tengas a mano los conocimientos necesarios para resolver todas las dificultades, y para demostrar que la tal dificultad es muchas veces un sofisma, un engaño, un falsear la verdadera realidad de las cosas.

Pero no por eso debes darte por vencido. Acude a una persona que entienda de Religión y pueda resolvértela. Ten la seguridad de que todas las «pegas» contra la Religión tienen su solución, aunque tú no la conozcas. Es más, han sido solucionadas ya muchas veces; pues los enemigos de la Iglesia siempre están repitiendo las mismas cosas, y no se dan por enterados de las soluciones que ya se han dado.

Acerca de los que tienen dificultades contra la Religión hay que tener en cuenta que algunos preguntan para aprender (desean encontrar soluciones a sus dificultades), pero otros preguntan para atacar, y desearían que sus preguntas no tuvieran respuesta, para así tener una excusa al sacudirse de encima el cristianismo porque les estorba .

Para instruirse en Religión es muy conveniente oír conferencias religiosas y leer libros de formación religiosa. Todos debemos preocuparnos de tener una formación religiosa proporcionada a nuestro estado y a nuestra cultura humana y profesional. Al final del libro tienes una lista de libros provechosos.

Cuando en un grupo se entabla una discusión de Religión, verás que, generalmente, los que llevan la voz cantante son los que menos saben de Religión, pero que su ignorancia los hace tremendamente audaces. A éstos es difícil convencerles, porque su amor propio rechazará los mejores argumentos. Pero si en el corro hay gente de buena voluntad, a quienes crees que tu solución puede ser provechosa y disipar errores, expón tu pensamiento con calma y con vista. Te será además útil pasar a la ofensiva, descubriendo la ignorancia religiosa del que disparata.

Con todo, has de procurar no ofender a nadie, si no es necesario. Pero sé fuerte si alguno tiene positivamente mala fe y quiere propagar el mal. Ataca su error aunque se ofenda.

Si alguien toma el arma del ridículo contra la Religión, tómala tú también para defenderla. Es muy importante que consigas que los que se están riendo en el grupo se pongan de tu parte.

Si no te sientes con fuerza para dominar el grupo, has de saber que, después, en particular, te será mucho más fácil hacerles bien, y encontrarás razonables a muchos que en el grupo parecían fanfarrones.

Es también pecado grave contra este mandamiento escribir, leer, tener, prestar o vender libros y escritos contra la Religión, pertenecer a sociedades irreligiosas: masonería, espiritismo , o partidos políticos de ideología marxista, pues el marxismo es esencialmente ateo (602). Y también el tentar a Dios, poniendo a prueba, con hechos o con palabras, alguno de sus atributos, dudando de su existencia o queriéndole obligar a que intervenga extraordinariamente en algún caso : por ejemplo, diciendo si mañana llueve, es señal de que puedo vengarme de fulano y matarlo .

También es tentar a Dios el exponerte sin necesidad a algún grave peligro de la vida, esperando que Dios te librará de él. Si este peligro fuera sólo leve, el pecado sería sólo venial.

Peca también contra este mandamiento el que se anima a pecar precisamente porque Dios es misericordioso. Esto es «un pecado gravísimo contra el Espíritu Santo, porque supone un grave desprecio de la gracia de Dios».

Además entra en este mandamiento el pecado de presunción que es la temeraria confianza de obtener la salvación del alma sin poner los medios . Pecan de presunción los que esperan la gloria sin hacer ellos mérito ninguno; el perdón sin preocuparse de arrepentirse; la salvación eterna, andando fuera del camino de Dios.

No debe pasarse el día en que no reces algo. Al menos las tres Avemarías al acostarte, que son prenda de salvación eterna.

También podrías hacer el siguiente examen:

Señor, creo que estás aquí presente. Te ruego me ayudes a examinar mi conciencia.

1.- Qué obras buenas he hecho (PENSAR UN MINUTO) Gracias Señor porque me has ayudado.

2.- Qué faltas he cometido (PENSAR UN MINUTO)

a. Contigo: respeto, rezos, olvidado de Ti.

b. Con los demás: egoísta, servicial, criticón.

c. Conmigo mismo:

  • deber: obediencia, trabajo. Todo bien hecho
  • pureza: miradas, deseos, palabras, obras.
  • genio: iracundo, chinche.

Perdóname, Señor. Me pesa haberte ofendido. Para repararte te prometo…

3.- Qué cosas buenas he dejado de hacer (PENSAR UN MINUTO) Te prometo, Señor, no perder otra vez la ocasión de hacer el bien.

Señor, a pesar de todo, te quiero y te prometo ser mejor. Madre mía, ayúdame.

(Tres Avemarías)

Padre Jorge Loring – Libro: Para Salvarte

PARA SALVARTE – PADRE JORGE LORING

Que Dios les conceda a todos la Gracia de una sincera confesión y una verdadera conversión.

Karla Rouillon Gallangos

Googlea “krouillong” y encuéntranos en nuestras redes sociales: Facebook, Twiter, Slideshare, Youtube, Gloria.tv, Ivoox, Soundcloud, Pinterest y May Feelings

Recuerda que los demonios son RESPONSABLES del pecado pero tú eres CULPABLE por no haber resistido la tentación y por ofender a Dios con el pecado. ¡Confiésate bien!

Descarga tu GUÍA PARA UNA BUENA CONFESIÓN

Facebook GUÍA PARA UNA BUENA CONFESIÓN

La comunión en la mano es SACRILEGIO y PECADO y nadie puede obligarte a recibir la comunión en la mano, pues es “sólo para el fiel que lo desea”.

Por favor, por amor a Jesús, no se queden callados y luchen contra la sacrílega comunión en la mano… es Jesús ahí presente y no, no está dichoso de ser flagelado otra vez por ti recibiéndolo en las manos… ¡NO RECIBAS A JESÚS EN LA MANO!

Sobre la COMUNIÓN EN LA MANO

 

Cuaresma: Día 02

CUARESMA: DÍA 02

El Padre Jorge Loring (+) nos ha dejado un valioso libro llamado PARA SALVARTE, donde nos explica, entre muchas otras cosas, los Mandamientos de Dios y los pecados con los cuales pecamos contra este mandamiento.

Hoy revisaremos el Primer Mandamiento de Dios: Amarás A Dios Sobre Todas Las Cosas.

Amar a Dios no es, precisamente, sentir cariño sensible hacia Él, como lo sentimos hacia nuestros padres; porque a Dios no se le ve, y a las personas a quienes no se ve es difícil tenerles cariño. Dios no obliga a eso, pues no está en nuestra mano. Aunque hay personas que llegan a sentirlo, con la gracia de Dios. Amar a Dios sobre todas las cosas es tenerle en aprecio supremo, es decir, estar convencido de que Dios vale más que nadie, y por eso preferirle a todas las cosas. Tú puedes tener mucho más cariño al cuadro que pintó tu hija, que a cualquiera de los cuadros que se exponen en el Museo del Prado de Madrid, aunque reconozcas que estos últimos tienen mucho más valor artístico. El amor a Dios es apreciativo.

Tenemos que amar a Dios porque «Él nos amó primero» y debemos corresponderle.

El amor se manifiesta en obras más que en palabras. Obras son amores y no buenas acciones .

Amar a Dios es obedecerle, cumplir su voluntad. No hacer mal a nadie .

Hacer bien a todo el mundo.

Una prueba de amor a Dios sobre todas las cosas es guardar sus mandamientos por encima de todo . Es decir, estar dispuesto a perderlo todo antes que ofenderle. Por lo tanto preferir a Dios siempre que haya que escoger entre obedecerle o cometer un pecado grave. Es el caso de San Pelagio de Córdoba y de Antonio Molle, de Santa María Goretti y Josefina Vilaseca, que se dejaron martirizar y apuñalar antes que cometer un pecado grave.

San Pelagio murió mártir el año 925 por rechazar las proposiciones deshonestas del Califa cordobés Abderramán III .

Antonio Molle, joven jerezano que a los veinte años fue mutilado y martirizado el 10-VIII-1936 durante la guerra civil española. Cayó prisionero de los milicianos en el frente de Peñaflor (Sevilla), y como llevaba un escapulario quisieron hacerle blasfemar. Él siempre contestaba gritando: Viva Cristo Rey! Le cortaron las orejas y le sacaron los ojos, y al final lo acribillaron a balazos. Así lo cuenta Rafael de las Heras, testigo presencial . Hoy su cuerpo mutilado está enterrado en la Basílica de Ntra. Sra. del Carmen Coronada de Jerez de la Frontera (Cádiz).

María Goretti , italiana, murió mártir de quince puñaladas por negarse a los deseos impuros de un amigo suyo, que después se convirtió y murió fraile franciscano.

Josefina Vilaseca también murió apuñalada en Diciembre de 1952 en Artés, diócesis de Vich, por negarse a perder su virginidad. Tenía doce años Dice Jesucristo: «el que guarda mis mandamientos, ése es el que me ama». Y San Juan : «En esto consiste el amor Dios, en guardar sus mandamientos».

Este mandamiento también nos obliga a creer en todas las verdades de fe; a esperar en Dios, confiando que nos dará las gracias necesarias para alcanzar la vida eterna ; a adorarle solamente a Él, darle el culto debido y reverenciarle con el cuerpo y con el alma.

Este mandamiento nos manda adorar a Dios .

Este mandamiento prohíbe especialmente la idolatría que consiste en adorar como a Dios a otra cosa o persona.

Peca contra este mandamiento quien maltrata personas, lugares o cosas consagradas a Dios: por ejemplo, una religiosa o un cáliz. Este pecado se llama sacrilegio . Comete también un sacrilegio quien administra o recibe en pecado grave algún sacramento que requiere estado de gracia, lo cual es gravísimo. Por ejemplo, quien se casa en pecado grave, o quien comulga en pecado grave.

Peca, además, contra este mandamiento quien desconfía de la misericordia de Dios , o confía temerariamente en su bondad, permaneciendo mucho tiempo en pecado mortal, o el que peca más y más, precisamente porque Dios es misericordioso y nos ha prometido el perdón; quien tiene fe en adivinos, echadores de cartas, horóscopos, espiritistas y curanderos ; quien cree en serio cosas supersticiosas (mala suerte del n 13, cadena de oraciones, etc.); quien niega o duda voluntariamente de alguna verdad de fe, o ignora por culpa suya lo necesario de la Religión.

El hombre o es religioso o es supersticioso. Muchos que no creen en las verdades de la Religión, luego creen en las mentiras y engaños de adivinos, brujos y espiritistas.

No es lo mismo parapsicología que superstición. La superstición es atribuir a cosas creadas poderes que son exclusivos de Dios . La parapsicología trata de hechos naturales aunque más allá de la psicología. Son fenómenos para-normales. En cambio la superstición es atribuir resultados desproporcionados a las causas empleadas. Todo resultado que supera a las causas naturales adecuadas es de origen sobrenatural. «Sólo Dios conoce el futuro libre, y sólo Él puede revelar el porvenir a sus profetas».

Para que la duda sobre una verdad de la Religión sea pecado, es necesario que sea voluntaria .

No es pecado darse cuenta de que el misterio es difícil de entender, que nuestro entendimiento no lo puede comprender, etc. Si a pesar de todo esto, se fía uno de Dios que lo ha revelado, y cree, no sólo no hay pecado, sino que hay mérito .

En la absoluta veracidad divina -motivo formal de la fe- no cabe error o el engaño Lo que no se puede hacer -a pesar de la oscuridad profunda del misterio- es dudar si será eso verdad o no. Esta duda positiva, tomando como cosa incierta lo que Dios ha revelado, es pecado. El pecado contra la fe está en la negación o en la duda voluntaria de aquello que se sabe que Dios ha revelado .

Esto no se opone a la falta de claridad que podamos tener sobre una verdad de fe, ni al deseo de esclarecerla, dentro de lo posible, sabiendo que hay misterios que superan la inteligencia humana.

El pecado será grave, si es una duda voluntaria, a sabiendas, de una verdad que la Iglesia dice que hay que creer. Si la duda no es voluntaria, sino una mera ocurrencia de las dificultades que a nuestro entendimiento se le presentan, no hay pecado; o a lo más pecado venial, si ha habido alguna negligencia en resistir a la tentación. Si la vacilación llega a tomar por incierto lo que es dogma de fe, el pecado sería grave contra la fe. La fe debe extenderse a todas las verdades reveladas por Dios y propuestas como tales por la Iglesia.

Nadie pierde la fe sin culpa propia . Dijo el Concilio de Trento: «Dios no abandona a nadie, si no es Él abandonado primero»

cuaresma guia para una buena confesion krouillong pecados capitales comunion en la mano

Ningún adulto puede salvarse si no hace actos de fe . «Dios no puede dar al hombre adulto responsable el don de su amistad sobrenatural, sino cuando el hombre la acepta previa y libremente».

Si sabes el Credo de memoria, es un magnífico acto de fe. El Credo lo tienes en los Apéndices. Si no lo sabes, aquí te pongo un acto de fe muy breve; pero debe decirse con toda convicción.

Creo que Dios existe.

Creo que Dios nos dará después de la muerte lo que merezcamos con nuestras obras en esta vida .

Creo que hay un solo Dios verdadero en tres Personas distintas.

Creo que estas tres Personas son: Padre, Hijo y Espíritu Santo.

Creo que Dios se hizo Hombre y murió en una cruz para salvarnos .

Y si lo quieres en dos líneas: Creo firmemente en todo lo que la Iglesia dice debemos creer, porque Dios lo ha revelado .

Para fortificar nuestra fe, deberíamos hacer actos de fe de cuando en cuando, sobre todo en la hora de la muerte.

La fe es como un sexto sentido que nos ayuda a un superior conocimiento de Dios. Quien no tiene fe, no se lo puede explicar. Como una planta no puede explicarse la música, porque no capta nada.

La fe no se puede demostrar con argumentos , pues es un don, no una ciencia. Pero pueden darse razones de su credibilidad. La fe supera la razón, pero no la destruye. El motivo de creer no son las razones filosófico-científicas de las verdades reveladas, sino la autoridad de Dios que las ha revelado. Esas razones ayudan a ver que la fe es razonable, pero no son el motivo principal de la fe. Podemos saber que Dios nos ha hablado, y por tanto tenemos obligación de creer lo que Él nos ha dicho .

Estimemos sobre todas las cosas el don divino de la fe; procuremos conservarla con la oración y el estudio, hacerla conocer y amar por los demás, defenderla si es atacada, y pedir a Dios que sea conocida y aceptada por los incrédulos y los infieles.

Al mismo tiempo debemos evitar todo aquello que pueda ponernos en peligro de perderla. Los que descuidan su instrucción religiosa, los que escuchan voluntariamente a los que la atacan, o leen libros o periódicos contra la fe, los soberbios y los impuros se ponen en peligro de llegar a perder este don divino.

Si alguna vez oyes una dificultad contra la Religión Católica y no sabes resolverla, no te alarmes por eso. Es imposible que tengas a mano los conocimientos necesarios para resolver todas las dificultades, y para demostrar que la tal dificultad es muchas veces un sofisma, un engaño, un falsear la verdadera realidad de las cosas.

Pero no por eso debes darte por vencido. Acude a una persona que entienda de Religión y pueda resolvértela. Ten la seguridad de que todas las «pegas» contra la Religión tienen su solución, aunque tú no la conozcas. Es más, han sido solucionadas ya muchas veces; pues los enemigos de la Iglesia siempre están repitiendo las mismas cosas, y no se dan por enterados de las soluciones que ya se han dado.

Acerca de los que tienen dificultades contra la Religión hay que tener en cuenta que algunos preguntan para aprender (desean encontrar soluciones a sus dificultades), pero otros preguntan para atacar, y desearían que sus preguntas no tuvieran respuesta, para así tener una excusa al sacudirse de encima el cristianismo porque les estorba .

Para instruirse en Religión es muy conveniente oír conferencias religiosas y leer libros de formación religiosa. Todos debemos preocuparnos de tener una formación religiosa proporcionada a nuestro estado y a nuestra cultura humana y profesional. Al final del libro tienes una lista de libros provechosos.

Cuando en un grupo se entabla una discusión de Religión, verás que, generalmente, los que llevan la voz cantante son los que menos saben de Religión, pero que su ignorancia los hace tremendamente audaces. A éstos es difícil convencerles, porque su amor propio rechazará los mejores argumentos. Pero si en el corro hay gente de buena voluntad, a quienes crees que tu solución puede ser provechosa y disipar errores, expón tu pensamiento con calma y con vista. Te será además útil pasar a la ofensiva, descubriendo la ignorancia religiosa del que disparata.

Con todo, has de procurar no ofender a nadie, si no es necesario. Pero sé fuerte si alguno tiene positivamente mala fe y quiere propagar el mal. Ataca su error aunque se ofenda.

Si alguien toma el arma del ridículo contra la Religión, tómala tú también para defenderla. Es muy importante que consigas que los que se están riendo en el grupo se pongan de tu parte.

Si no te sientes con fuerza para dominar el grupo, has de saber que, después, en particular, te será mucho más fácil hacerles bien, y encontrarás razonables a muchos que en el grupo parecían fanfarrones.

Es también pecado grave contra este mandamiento escribir, leer, tener, prestar o vender libros y escritos contra la Religión, pertenecer a sociedades irreligiosas: masonería, espiritismo , o partidos políticos de ideología marxista, pues el marxismo es esencialmente ateo (602). Y también el tentar a Dios, poniendo a prueba, con hechos o con palabras, alguno de sus atributos, dudando de su existencia o queriéndole obligar a que intervenga extraordinariamente en algún caso : por ejemplo, diciendo si mañana llueve, es señal de que puedo vengarme de fulano y matarlo .

También es tentar a Dios el exponerte sin necesidad a algún grave peligro de la vida, esperando que Dios te librará de él. Si este peligro fuera sólo leve, el pecado sería sólo venial.

Peca también contra este mandamiento el que se anima a pecar precisamente porque Dios es misericordioso. Esto es «un pecado gravísimo contra el Espíritu Santo, porque supone un grave desprecio de la gracia de Dios».

Además entra en este mandamiento el pecado de presunción que es la temeraria confianza de obtener la salvación del alma sin poner los medios . Pecan de presunción los que esperan la gloria sin hacer ellos mérito ninguno; el perdón sin preocuparse de arrepentirse; la salvación eterna, andando fuera del camino de Dios.

No debe pasarse el día en que no reces algo. Al menos las tres Avemarías al acostarte, que son prenda de salvación eterna.

También podrías hacer el siguiente examen:

Señor, creo que estás aquí presente. Te ruego me ayudes a examinar mi conciencia.

1.- Qué obras buenas he hecho (PENSAR UN MINUTO) Gracias Señor porque me has ayudado.

2.- Qué faltas he cometido (PENSAR UN MINUTO)

a. Contigo: respeto, rezos, olvidado de Ti.

b. Con los demás: egoísta, servicial, criticón.

c. Conmigo mismo:

  • deber: obediencia, trabajo. Todo bien hecho
  • pureza: miradas, deseos, palabras, obras.
  • genio: iracundo, chinche.

Perdóname, Señor. Me pesa haberte ofendido. Para repararte te prometo (decir el ofrecimiento)…

3.- Qué cosas buenas he dejado de hacer (PENSAR UN MINUTO) Te prometo, Señor, no perder otra vez la ocasión de hacer el bien.

Señor, a pesar de todo, te quiero y te prometo ser mejor. Madre mía, ayúdame.

(Tres Avemarías)

Padre Jorge Loring – Libro: Para Salvarte

PARA SALVARTE – PADRE JORGE LORING

Que Dios les conceda a todos la Gracia de una sincera confesión y una verdadera conversión.

Karla Rouillon Gallangos

Googlea “krouillong” y encuéntranos en nuestras redes sociales: Facebook, Twiter, Slideshare, Youtube, Gloria.tv, Ivoox, Soundcloud, Pinterest y May Feelings

Recuerda que los demonios son RESPONSABLES del pecado pero tú eres CULPABLE por no haber resistido la tentación y por ofender a Dios con el pecado. ¡Confiésate bien!

Descarga tu GUÍA PARA UNA BUENA CONFESIÓN

Facebook GUÍA PARA UNA BUENA CONFESIÓN

La comunión en la mano es SACRILEGIO y PECADO y nadie puede obligarte a recibir la comunión en la mano, pues es “sólo para el fiel que lo desea”.

Por favor, por amor a Jesús, no se queden callados y luchen contra la sacrílega comunión en la mano… es Jesús ahí presente y no, no está dichoso de ser flagelado otra vez por ti recibiéndolo en las manos… ¡NO RECIBAS A JESÚS EN LA MANO!

Sobre la COMUNIÓN EN LA MANO

 

Cuaresma: Día 01

CUARESMA: DÍA 01

Consejos del Padre Carlos Cancelado para hacer una buena Confesión

El Padre Carlos Cancelado recomienda REZAR para pedir a tu Santo Ángel de la Guarda que te ayude a recordar todos tus pecados, luego debes hacer tu EXAMEN DE CONCIENCIA revisando los MANDAMIENTOS DE DIOS, uno por uno, y escribirlos para no olvidarlos.

Debes tener verdadero DOLOR DE TUS PECADOS y firme PROPÓSITO DE ENMIENDA, es decir, que luego de conocer y recordar tus pecados debes no querer volverlos a cometer jamás, porque has comprendido que con ellos has ofendido a Dios.

Antes de ir a confesarte debes orar a Dios y pedirle un BUEN SACERDOTE QUE TE COMPRENDA Y TE ACONSEJE BIEN, pedirle a tu Santo Ángel de la Guarda y a San Miguel Arcángel que te guíen en tu camino para encontrar el Confesor que Dios quiere para ti, que te protejan en el camino y que no permitan que los demonios se interpongan e impidan tu confesión.

Debes ir primero al SAGRARIO y leerle todos tus pecados a JESÚS, tal y como se los vas a decir al Sacerdote; luego debes ir al Confesionario y debes CONFESAR TODOS TUS PECADOS QUE HAS RECORDADO sin ocultar ninguno ni justificarte, solo lee la lista que has hecho y los que hayas olvidado los recordarás ahí mismo.

Por último, deberás cumplir la PENITENCIA que te dé el Sacerdote Confesor y LISTO.

Espera la Santa Misa y comulga con tu alma limpia, sé constante y fuerte para no volver a pecar.

Descarga aquí tu GUÍA PARA UNA BUENA CONFESIÓN

cuaresma guia para una buena confesion krouillong pecados capitales comunion en la mano

Por odio a Dios y al hombre, al que Dios ama, Satanás intentó desfigurar la belleza del plan de la creación, y se empeñó en engañar a los hombres para que no sean ensalzados al lugar de donde cayó él.

Hoy en día se ha perdido el sentido del pecado, las personas ya no saben lo que está bien y lo que está mal debido a la pérdida de valores que predomina en el mundo. Por ello, es importante para que puedas recordar todos tus pecados (y enterarte que eso que haces es pecado) que leas estas preguntas a los Diez Mandamientos de Dios y los Cinco Mandamientos de la Iglesia, que te servirán de Guía para una Buena Confesión.

Es una forma simple y efectiva de prepararte para el perdón que el mismo Jesús nos prodiga en el momento en que asistimos al Sacramento de la Reconciliación o la Confesión.

Limpiemos nuestra alma de toda impureza haciendo una completa y sincera confesión.

Debes saber de antemano, que todo lo que atenta contra los Mandamientos de Dios es pecado mortal, sin embargo, debes decirlo todo, también los pecados veniales y cualquier falta que puedas haber cometido. Ése es el lugar y el momento para dejar todo lo mal ahí y que puedas continuar con tu vida sin ataduras. ¡No lo desaproveches!

Que Dios les conceda a todos la Gracia de una sincera confesión y una verdadera conversión.

Karla Rouillon Gallangos

Googlea “krouillong” y encuéntranos en nuestras redes sociales: Facebook, Twiter, Slideshare, Youtube, Gloria.tv, Ivoox, Soundcloud, Pinterest y May Feelings

Recuerda que los demonios son RESPONSABLES del pecado pero tú eres CULPABLE por no haber resistido la tentación y por ofender a Dios con el pecado. ¡Confiésate bien!

Descarga tu GUÍA PARA UNA BUENA CONFESIÓN

Facebook GUÍA PARA UNA BUENA CONFESIÓN

La comunión en la mano es SACRILEGIO y PECADO y nadie puede obligarte a recibir la comunión en la mano, pues es “sólo para el fiel que lo desea”.

Por favor, por amor a Jesús, no se queden callados y luchen contra la sacrílega comunión en la mano… es Jesús ahí presente y no, no está dichoso de ser flagelado otra vez por ti recibiéndolo en las manos… ¡NO RECIBAS A JESÚS EN LA MANO!

Sobre la COMUNIÓN EN LA MANO

 

 

Miércoles de Ceniza

MIÉRCOLES DE CENIZA

Hoy en día los católicos -de los que asisten a misa- desconocen el verdadero sentido del Miércoles de Ceniza y de la Cuaresma, y por este desconocimiento no lo viven y por ello no reciben la Gracia de una sincera conversión, que es precisamente la idea de esta época.

El miércoles de ceniza es el inicio de la solemne apertura del ayuno cuaresmal, ayuno que es un tiempo de expiación de los pecados previo a la celebración de la Semana Santa y los misterios de la Redención del Hombre.

El ayuno cuaresmal al que da inicio el miércoles de ceniza es lo que los católicos conocemos como Cuaresma, la cual ha sido instituida por la Iglesia para recordarnos la necesidad de la penitencia en nuestra vida, imitando el ayuno de cuarenta de días de Jesús en el desierto y poder así obtener de Dios la Gracia de una verdadera conversión antes de comenzar a celebrar la Pascua, cuya celebración también nos tiene aseguradas una incontable cantidad de Gracias para nuestro crecimiento espiritual y santidad.

miercoles de ceniza cuaresma krouillong guia para una buena confesion

¿De dónde se obtienen las cenizas?

Si tú conservas tus Palmas de Semana Santa del año pasado, no las deseches, debes averiguar en tu Parroquia cuando será la quema de palmas -generalmente es dos semanas antes del miércoles de ceniza- e ir y donar al párroco tus palmas para la quema de cenizas. Si puedes hacer la labor de recolectar en tu vecindario o escuelas las palmas de sus hogares mejor, ya que cada año se realiza la quema de cenizas para este fin.

krouillong alma en gracia en pecado mortal en pecado venial

Stipendia peccati mors

El miércoles de ceniza es fiesta de precepto y hay que asistir a la Santa Misa obligatoriamente, pero más que asistir por cumplir hay que asistir sabiendo que ese día es el comienzo de cuarenta días en los cuales harás un examen de conciencia riguroso para, ayudado por el ayuno y la penitencia, lograr hacer una sincera confesión de vida para obtener la Gracia de una verdadera conversión.

En este día escucharás al sacerdote decir las palabras: “Acuérdate que polvo eres y al polvo volverás”  (Génesis 3. 19), frase que nos recuerda la sentencia pronunciada por Dios a Adán en el Paraíso. Y es que la muerte que nosotros conocemos hoy en día es fruto del pecado (Romanos 6. 23), así como nos explica San Pablo  “Así, pues, como por un hombre entró el pecado en el mundo, y por el pecado la muerte, y así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos habían pecado”  (Romanos 5.12).

Pero las Sagradas Escrituras no sólo no explican la razón de nuestro pesar, también nos anuncian la posibilidad de encontrar el remedio, pues en Su Hijo encarnado, muerto y resucitado, Dios vuelve a abrir el Cielo a los hombres.

peregrinacion de rodillas guadalupe krouillong comunion en la mano

La Cuaresma es Tradición

Todo el simbolismo que vemos en la celebración de la Santa Misa tiene sus raíces en la tradición de la Iglesia primitiva quienes practicaban la penitencia y el ayuno en esta época del año, para luego ir a confesar sus pecados, y preparase de manera digna y llegar en estado de Gracia a la celebración de la Pascua. Por ello San Agustín nos enseña: “¿Quieres que tu oración vuele hasta Dios? Pues ponle las dos alas del ayuno y la limosna”.

Y es que la manera de vivir la Cuaresma para el cristiano incluye necesariamente el sacrificio: sacrificio que te permitirá dominar el cuerpo y fortalecer el espíritu, sacrificio que te ayudará a dejar los vicios y los malos hábitos que entorpecen tu camino de santidad, sacrificio que te encaminará a una vida de mayor oración y menos cosas mundanas, sacrificio que pocos católicos están dispuestos a hacer hoy en día pues no quieren abandonar aquello que les ata al mundo y que tanto disfrutan, sacrificio que -bien hecho- se resume en Ayuno y Penitencia.

¿Por qué la Santísima Virgen nos repite en todas sus apariciones marianas que debemos hacer: Oración, Reparación y Penitencia? Porque el mundo está sumido en el pecado, porque con la oración equilibraremos en la balanza de la Justicia Divina el peso del bien contra el peso del mal, porque con la reparación nosotros mismos estamos reparando el daño causado con nuestros pecados y con ello acortamos nuestra estancia en el Purgatorio, porque con la penitencia es que ponemos en práctica la reparación las consecuencias de nuestros propios pecados y también los del mundo entero.

El Ayuno

Como nos dice el Sacerdote Exorcista José Antonio Fortea en su Blog: “El ayuno tiene indudables efectos espirituales. Uno de ellos es que llena al alma de gusto por las cosas del Reino de los Cielos. Con una medida tan simple, es siempre sorprendente como el espíritu se fortalece.”

Y a su vez -con tres sencillas ideas- el Padre Fortea nos recomienda tres clases de ayuno.

  1. El ayuno eclesiástico: Es el de el Miércoles de Ceniza o el Viernes Santo. Consiste en hacer una sola comida normal en el día, y una frugal colación a la hora del desayuno y de la cena. Por ejemplo, una fruta, o un poco de pan, o un yogur.
  2. El ayuno a pan: Consiste en hacer tres comidas al día, pero sólo a pan y agua.
  3. El ayuno de la cena: Consiste en irse a la cama sin cenar. Este ayuno se puede hacer dos o tres veces a la semana. Pudiéndose tomar una fruta a la hora de la cena si se desea. Otras personas pueden preferir el ir al trabajo sin desayunar. Muchos os dirán que ir sin desayunar es una locura: que no se rinde, que después comes más, etc. pero en las iglesias orientales ésta es una práctica común.

Verán que hacer ayuno en los cuarenta días de Cuaresma no es cosa para morirse, todo está en saber escoger el más adecuado para cada uno.

Yo también tengo un ayuno para recomendarles, y es que pueden escoger una hora en la que ustedes hagan una oración diaria (las 12 pm, la 1 pm, las 2 pm, las 3 pm) y desde que se levantan no comer nada hasta esa hora, solo mucha agua, y almorzar inmediatamente después de terminar su oración diaria.

Personalmente escogí las 3 pm, hora en que rezo la Divina Misericordia, y en los días en que ayuno, desde que me levanto hasta las 3 pm solo bebo mucha agua, y solo luego de terminar la oración debida, recién ahí almuerzo.

La Reparación

La reparación es tan impopular en nuestros días, que como no se habla de ella tampoco se practica. Si conocieran la importancia que tiene el hacer reparación para sus almas sería cosa de todos los días el hacerla.

Reparación es el acto o hecho de hacer enmienda, implica la intención de restaurar las cosas a su condición de normalidad y pureza, a cómo estaban antes de que algo malo fuese hecho; es decir, que toda acción tiene consecuencias, y ante la comisión de un pecado existen consecuencias también como la ofensa hecha a Dios, la mancha o muerte para tu alma y el daño causado al prójimo o a la Iglesia.

Con respecto a Dios, reparación significa recompensar con mayor amor por el fracaso en el amor a causa del pecado; significa restaurar lo que fue injustamente tomado y compensar con generosidad por el egoísmo que causó la injuria.

Como verás, la confesión de tus pecados no basta, debes reparar el daño causado.

Si las almas pecadoras que obtuvieron de Dios la Gracia de la salvación y por ella fueron a parar al Purgatorio hubieran hecho reparación de sus pecados, el tiempo de su Purgatorio se habría acortado, pues habrían tenido menos deudas ante Dios, por esto decimos en el Padrenuestro “y perdónanos nuestras deudas” para recordarnos las deudas que tenemos ante Dios.

A las cinco últimas generaciones se les ha enseñado a rezar diciendo “y perdónanos nuestras ofensas”, sin embargo, esta idea es incompleta y saca de la mente la idea de reparación para quien no la conoce, pues la ofensa hecha a Dios, Dios te la perdona si le pides perdón en la Confesión, pero la deuda contraída porque tú pecaste no se te perdona con la Confesión, sino con la reparación del pecado cometido.

Para quien no lo entienda es así: si robaste, entonces devuelves lo robado; si difamaste, entonces limpias la honra mancillada; si mentiste, entonces aclaras la verdad; y esto debe hacerse en la misma medida en que se hizo el daño, por ejemplo: si difamaste a alguien por internet, lo correcto es que uses el mismo medio para aclarar la verdad, pues debes pensar en la cantidad de personas a las que llegó el daño y que probablemente hiciste pecar.

Si por alguna razón justificada no está en tus posibilidades el poder hacer reparación, puedes ofrecer tus oraciones, la Santa Misa y horas de adoración eucarística por esa persona a la que hiciste el daño. Si está dentro de tus posibilidades el ofrecer disculpas a esa persona que ofendiste o dañaste estás obligado a hacerlo y además a repararle el daño causado. Esto es reparación y para lograrla hay que poner en práctica la penitencia.

La Penitencia

Para darnos una idea de las consecuencias del pecado, San Felipe Neri nos deja el ejemplo de una penitencia un poco rara.

San Felipe Neri era un santo con gran sentido común. Trataba a sus penitentes de una manera muy práctica, para que se les grabe en sus conciencias el daño que causaba el pecado y así dejaran de pecar.

Una señora tenía la costumbre de irse a confesar donde él y casi siempre tenía el mismo cuento que decir: el de calumniar a sus vecinos.

Por ello, san Felipe, le dijo: “De penitencia vas a ir al mercado, compras un pollo y me lo traes a mí. Pero de regreso lo vas desplumando, arrojando las plumas en las calles conforme caminas”. 

La señora pensó que ésta era una penitencia rara, pero deseando recibir la absolución, hizo conforme se le había indicado y por fin regresó donde San Felipe Neri. “Bueno, Padre, he completado mi penitencia” le dijo y le mostró el pollo desplumado.

“Oh, de ningún modo la has completado”le dijo el santo. “Ahora regresarás al mercado y en el camino recoges todas las plumas y las pones en una bolsa. Entonces regresas donde mí con la bolsa”.

¡Pero eso es imposible!lloró la señora–, ¡esas plumas deben de estar ahora por toda la ciudad!. 

“Es ciertoreplicó el santo–, pero tienes aún menor oportunidad de recoger todas las calumnias que has dicho sobre tus vecinos”.

Como verán, a los sacerdotes santos les importa tu santidad, no les basta que reces un Padrenuestro, tres Avemaría y un Yo Pecador, quieren que se te grabe en la mente que pecar es malo para tu alma y que tiene consecuencias en el mundo natural y también en el mundo sobrenatural. 

Repito que la sola confesión de los pecados no basta, hay que hacer reparación y para lograrlo hay que poner en práctica la penitencia, la que tú creas que puedes hacer bien, pero hacerla al final de cuentas y ofrecerla como reparación de tus pecados a Dios.

Una de las razones por las que los católicos hoy en día no hacen penitencia es porque afirman que los métodos de penitencia que conocemos de los santos o de los religiosos de siglos pasados son extremos, como el uso del cilicio (usado por muchos entre ellos Santa Catalina de Siena), cadenas en la cintura sujetas muy apretadas con un candado (cuya llave Santa Rosa de Lima tiró al pozo de su casa para que sus padres no le quiten la cadena), una corona de clavos que presionaba constantemente la cien, latigazos en la espalda (puestos en práctica por muchos entre ellos Santa Teresa de Jesús y San Juan María Vianney), poner chapitas o piedritas dentro de los zapatos (sin dejar que otros vean el dolor que les causaban), dormir en el suelo (puesto en práctica por muchos incluyendo a San Francisco de Asís, que no lo hacía por pobre) y también están las llamadas Disciplinas Externas de San Francisco de Sales y las Penitencias Externas de San Ignacio de Loyola.

Ten presente que estas prácticas eran severas maneras de causar dolor al cuerpo porque el espíritu estaba siendo tentando; pero claro, a ti no te hace falta imitarlas porque a ti no se te aparece ni te tienta salvajemente Satanás, como sí les sucedía a ellos, y claro que siendo ellos santos tenían mucho que perder, por ello, no es necesario que imites estas prácticas si no lo deseas, ya que puedes hacer Penitencia de muchas formas comenzando por cosas muy sencillas que aquí te recomendamos:

  • Escoge la actividad en tu hogar que no te gusta hacer, a mi por ejemplo no me gusta planchar, pero quizás a ti no te guste hacer la cama, lavar los platos, aspirar la casa, limpiar los baños, etc.; pues bien, la próxima vez que tu mamá o tu abuela necesiten ayuda en la casa ofrécete a hacer eso que no te gusta, pero debes hacerlo bien y con amor, y debes ofrecer eso que vas a hacer a Dios como penitencia. Si la actividad te lo permite y estas a solas, puedes rezar mentalmente una oración mientras la haces o cantar canciones de alabanzas a Dios. La idea es mantener la mente con pensamientos santos para que puedas superar esa tarea que te disgusta y puedas hacerla con amor para que tu ofrecimiento tenga valor ante Dios.
  • Si un día estás muy cansado y solo quieres echarte en tu cama suavecita a dormir, puedes poner la frazada o sleeping en el suelo y acostarte ahí, sin almohadas, de espaldas al suelo, hasta que te duermas, pero debes hacerlo bien y con amor, y debes ofrecerlo a Dios como penitencia. Ten presente que sólo sentirás un poco de incomodidad, pero considerando que cambias tu cama por el suelo estando tan cansado, ese ofrecimiento tendrá mucho valor para Dios.
  • Si observas bien, cada día hay una comida o postre que te encanta y que comes casi a diario, puede ser el café de las mañanas (sin el cual sientes que te mueres), puede ser que te encanta el arroz, las carnes o los chocolates, todos tenemos un gustito que no podemos resistir. Pues bien, dado que te gusta tanto, la idea es que no lo comas en un tiempo determinado, pero debes hacerlo bien y con amor, y debes ofrecerlo a Dios como penitencia. Puedes escoger una semana, un mes, o los cuarenta días de Cuaresma y le ofreces a Dios que durante este tiempo no lo vas a comer, pero ten en cuenta que es ¡lo que más te gusta en el mundo! y debes cumplirlo, verás que al terminar habrás dominado mucho tus impulsos y ese ofrecimiento tendrá mucho valor para Dios.
  • También existen los defectos, los vicios y los malos hábitos adquiridos, muchos saltan a la vista pero otros sólo tú te los conoces, pues escoge el peor que te encuentres y cógelo del pescuezo listo para deshacerte de él. Cuando lo tengas bien identificado, ponte un tiempo de prueba en el cual vas a dejar de hacerlo (una semana, quince días, un mes) y ofrécele a Dios el no hacerlo durante este tiempo, pero debes hacerlo bien y con amor, y debes ofrecerlo a Dios como penitencia. Deberás estar muy vigilante para no volverlo a cometer durante el tiempo que hayas escogido, pero al terminar ese tiempo, que puede ser corto o largo, verás que lo habrás dominado -y no él a ti- y ese ofrecimiento tendrá mucho valor ante los ojos de Dios.
  • Otra forma de hacer penitencia es para muchos hacer el Camino de Santiago Apóstol, un trayecto de 760 kms a pie, en el que los penitentes van en oración por terrenos y climas nada fáciles de sobrellevar, cargando sus mochilas, hospedándose en diferentes ciudades durante el trayecto hasta llegar a Santiago de Compostela, pero debes hacerlo bien y con amor, y debes ofrecerlo a Dios como penitencia, y al terminarlo tendrás la gran recompensa al ingresar a la Catedral de Santiago de Compostela de recibir ahí la confesión y participar de la Santa Misa, celebrada de manera muy tradicional con el enorme incensario ya mundialmente conocido. Este camino atrae hoy en día a muchos turistas que incluso lo hacen en bicicleta, pero es y siempre ha sido una manera de hacer penitencia para los que han sabido aprovecharlo.
  • Si vas a visitar un Santuario por una promesa que hiciste a Dios, a la Virgen o a algún Santo, puedes ingresar de rodillas al Santuario, pero recuerda que la idea es hacerlo de manera seria y rezando durante todo el trayecto, y debes hacerlo bien y con amor, y ofrecerlo a Dios como penitencia. Te aseguro que hacerlo no es fácil, pues deberás superar muchos miedos y vergüenzas, además de los comentarios maliciosos de quienes no comprenden lo que haces, pero por tener este grado de dificultad es que ese ofrecimiento tendrá mucho valor ante los ojos de Dios. Para aquellos que vean a alguien haciendo un ofrecimiento de este tipo les sugiero cerrar la boca y no servir de boca a los demonios, pues pueden truncar una reparación que esa persona estaba haciendo a Dios y asumir ustedes las consecuencias de ello, la cual verán el día de su Juicio personal ante Dios.
  • En la Procesión del Señor de los Milagros que se realiza todos los meses de Octubre en la ciudad de Lima, Perú, yo he visto a muchos fieles acompañar al Cristo de Pachacamilla sin zapatos, totalmente descalzos. Esta es una manera muy común y nada fácil de hacer penitencia, pues el trayecto de la procesión es bastante largo y dura horas, bajo el sol que calienta la pista, que a su vez no es del todo lisa, y los penitentes le acompañan orando y cantando descalzos desde su salida del Templo de Las Nazarenas hasta la Iglesia donde pernoctará hasta la procesión del día siguiente. Si te animas recuerda que debes hacerlo bien y con amor, y ofrecerlo a Dios como penitencia.

¿Sabías que la Reina Isabel la Católica pidió a Dios que si su esposo el Rey Fernando el Católico regresaba vivo de la batalla dada en Toro ella caminaría descalza desde el puente medieval de la ciudad hasta llegar al Convento de los Dominicos? Pues es un hecho histórico y tras la victoria de Toro, la Reina Isabel, descalza y vestida con una sencilla túnica, acompañada de su esposo el Rey Fernando y séquito, salió en procesión cruzando el puente medieval que aún se conserva en Toro, hasta llegar al Convento de los Dominicos. ¡Y lo hizo en época de nieve y frío! pero así son las penitencias, son un asunto entre la criatura y Dios, y nada ni nadie se interponen.

Lo bueno es que estas pequeñas formas que hemos compartido de practicar la penitencia las puedes hacer en cualquier época del año, no solamente durante la Cuaresma, y puedes volverlas a comenzar cuando te sientas preparado para ello.

Como te decía líneas arriba, la Santísima Virgen nos pide Oración, Reparación y Penitencia, las cuales puedes ofrecer en reparación por tus pecados y también por los del mundo entero. Los Santos que hoy están en los altares sabían que era muy necesario interceder y reparar las ofensas y sacrilegios que tanto ofenden al Señor.

La práctica hace al Santo

La penitencia o mortificación es una práctica olvidada también por muchos sacerdotes, que si las practicaran, aunque sea las sencillas, serian sacerdotes santos.

El Santo Cura de Ars, al escuchar a un sacerdote quejarse de la poca afluencia de feligreses a su Iglesia le dijo: “¿Ha predicado usted? ¿Ha orado? ¿Ha ayunado? ¿Ha tomado disciplinas? ¿Ha dormido sobre duro? Mientras usted no se decida a esto, no tiene derecho a quejarse”.

Y es que el ayuno, la reparación, la penitencia y también la oración tienen sus frutos, si los quieres ver ponlos en práctica, y recuerda que es “creer para ver” y no al revés.

Que Dios les conceda a todo en esta Cuaresma la Gracia de una sincera confesión y una verdadera conversión.

Karla Rouillon Gallangos.

Googlea “krouillong” y encuéntranos en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter, Google Plus, Sideshare, Youtube, Gloria.tv, Ivoox, Soundcloud, Pinterest y May Feelings.

 

Y recuerda que los demonios son RESPONSABLES del pecado en el mundo, pero tú eres CULPABLE por no haber resistido la tentación y por ofender a Dios con el pecado. ¡Confiésate bien!

Para hacer una buena confesión ayúdate con tu GUÍA PARA UNA BUENA CONFESIÓN, con la cual revisarás los Mandamientos de Dios y de la Iglesia y verás en cuáles has ofendido tú a Dios con el pecado.

Descárgala aquí en PDF: GUÍA PARA UNA BUENA CONFESIÓN

Ingresa al Facebook: GUÍA PARA UNA BUENA CONFESIÓN

Oracion para entronizar las Palmas Benditas en el Hogar

krouillong karla rouillon gallangos no recibas la euaristia en la mano oracion palmas benditas domingo de ramos en el hogar yo no recibo la eucaristia en la mano no recibas la eucaristia en la mnao comunion en la mano no recibas a jesus en la mano palmas de olivo domingo de ramos miercoles de ceniza

ORACIÓN PARA ENTRONIZAR LAS PALMAS BENDITAS EN EL HOGAR

Bendice Señor nuestro hogar.

Que tu Hijo Jesús y la Virgen María reinen en él.

Por tu intercesión danos paz, amor y respeto,

para que respetándonos y amándonos

los sepamos honrar en nuestra vida familiar,

sé tú, el Rey en nuestro hogar.

Amén.

Fuente: Facebook Caballeros de la Virgen (Oficial) – Heraldos del Evangelio

¿Sabías que las Cenizas del Miércoles de Cenizas resultan de la quema de las Palmas Benditas del año pasado?

Conserva la tuya durante un año y una semana antes del próximo Miércoles de Ceniza, consulta en tu Parroquia cuándo será la quema de palmas benditas y obsequia la tuya. Si puedes ayudar a recolectar las Palmas Benditas de tu vecindario o en tu colegio mejor, así cooperarás con tu Iglesia para este fin y no faltarán cenizas para el inicio de la próxima Cuaresma.

 

miercoles de cenizas quema de cenizas krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano comunion en la mano no recibas a jesus en la mano

 

Más información sobre el MIÉRCOLES DE CENIZA

Más sobre la QUEMA DE CENIZAS PARA EL MIÉRCOLES DE CENIZA

El Santo Vía Crucis con las meditaciones de San Alfonso María de Ligorio

via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio

 

EL SANTO VÍA CRUCIS CON LAS MEDITACIONES DE SAN ALFONSO MARÍA DE LIGORIO

Por: San Alfonso María de Ligorio

EL CAMINO DE LA CRUZ

Arrodíllate ante el altar, haz un Acto de Contrición, y forma la intención de ganar las indulgencias bien para ti, o para las almas en el Purgatorio.

Acto de Contricción

Señor mío, Jesucristo, Dios y hombre verdadero,
Creador, Padre, Redentor mío,
por ser vos quien sois, bondad infinita
y por que os amo sobre todas las cosas,
me pesa de todo corazón haberos ofendido,
también me pesa porque podéis castigarme con
las penas del infierno.
Animado con tu divina gracia,
propongo firmemente nunca mas pecar, confesarme bien
y cumplir la penitencia que me fuera impuesta,
para el perdón de mis pecados. Amen.

Acepta con beneplácito el rezo de este santo via crucis y concede a las Benditas Almas del Purgatorio la indulgencia que la Santa Madre Iglesia ofrece.

Después di:

Señor mío Jesucristo, Vos anduvisteis con tan grande amor este camino para morir por mí, y yo os he ofendido tantas veces apartándome de Vos por el pecado; mas ahora os amo con todo mi corazón, y porque os amo, me arrepiento sinceramente de todas las ofensas que os he hecho. Perdóname, Señor, y permíteme que os acompañe en este viaje. Vais a morir por mi amor, pues yo también quiero vivir y morir por el vuestro, amado Redentor mío. Si, Jesús mío, quiero vivir siempre y morir unido a Vos.

primera estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio

PRIMERA ESTACIÓN
Jesús sentenciado a muerte

V. Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera cómo Jesús, después de haber sido azotado y coronado de espinos, fue injustamente sentenciado por Pilato a morir crucificado.

(Aquí se hace una pequeña pausa para considerar brevemente el misterio, y lo mismo en las demás estaciones.)

Adorado Jesús mío: mis pecados fueron más bien que Pilato, los que os sentenciaron a muerte. Por los méritos de este doloroso paso, os suplico me asistáis en el camino que va recorriendo mi alma para la eternidad. Os amo, ¡ oh Jesús mío más que a mí mismo, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mi como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

 

segunda estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio

 SEGUNDA ESTACIÓN
Jesús es cargado con la cruz

V. Te adoramos, Cristo. y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera cómo Jesús, andando este camino con la cruz a cuestas, iba pensando en ti y ofreciendo a su Padre por tu salvación la muerte que iba a padecer.

Amabilísimo Jesús mío: abrazo todas las tribulaciones que me tenéis destinadas hasta la muerte, y os ruego, por los méritos de la pena que sufristeis llevando vuestra Cruz, me deis fuerza para llevar la mía con perfecta paciencia y resignación. Os amo, ¡oh Jesús, amor mío!, más que a mi mismo, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

 

tercera estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio

 

TERCERA ESTACIÓN
Jesús cae la primera vez debajo de la cruz

V. Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera esta primera caída de Jesús debajo de la Cruz. Sus carnes estaban despedazadas por los azotes; su cabeza coronada de espinas, y había ya derramado mucha sangre, por lo cual estaba tan débil, que apenas podía caminar; llevaba al mismo tiempo aquel enorme peso sobre sus hombros y los soldados le empujaban; de modo que muchas veces desfalleció y cayó en este camino.

Amado Jesús mío: más que el peso de la Cruz, son mis pecados los que os hacen sufrir tantas penas. Por los méritos de esta primera caída, libradme de incurrir en pecado mortal. Os amo, ¡ oh Jesús, amor mio !, más que a mi mismo, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

cuarta estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio

CUARTA ESTACIÓN

Jesús encuentra a su afligida madre

V. Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera el encuentro del Hijo con su Madre en este camino. Se miraron mutuamente Jesús y Maria, y sus miradas fueran otras tantas flechas que traspasaron sus amantes corazones.

Amantísimo Jesús mío: por la pena que experimentasteis en este encuentro, concededme la gracia de ser verdadero devoto de vuestra Santísima Madre. Y Vos, mi afligida Reina, que fuisteis abrumada de dolor, alcanzadme con vuestra intercesión una continua y amorosa memoria de la Pasión de vuestro Hijo. Os amo, ¡Oh Jesús, amor mío!, más que a mí mismo, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

quinta estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio
QUINTA ESTACIÓN
Simón ayuda a Jesús a llevar la cruz

V. Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera cómo los judíos, al ver que Jesús iba desfalleciendo cada vez más, temieron que se les muriese en el camino y, como deseaban verle morir de la muerte infame de Cruz, obligaron a Simón el Cirineo a que le ayudase a llevar aquel pesado madero.

Dulcísimo Jesús mío: no quiero rehusar la Cruz, como lo hizo el Cirineo, antes bien la acepto y la abrazo; acepto en particular la muerte que tengáis destinada para mí, con todas las penas que la han de acompañar, la uno a la vuestra, y os la ofrezco. Vos habéis querido morir por. mi amor, yo quiero morir por el vuestro y por daros gusto; ayudadme con vuestra gracia. Os amo, ¡oh Jesús, amor mío! más que a mí mismo, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

sexta estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio
SEXTA ESTACIÓN
La Verónica limpia el rostro de Jesús

V. Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera cómo la devoto mujer Verónica, al ver a Jesús tan fatigado y con el rostro bañado en sudar y sangre, le ofreció un lienzo. y limpiándose con él nuestra Señor, quedó impreso en éste su santa imagen.

Amado Jesús mío: en otro tiempo vuestro rostro era hermosisímo; mas en este doloroso viaje, las heridas y la sangre han cambiado en fealdad su hermosura. ¡ Ah Señor mío, también mi alma quedó hermosa a vuestros ojos cuando recibí la gracia del bautismo, mas yo la he desfigurado después con mis pecados. Vos sólo, ¡ oh Redentor mío!, podéis restituirle su belleza pasada: hacedlo por los méritos de vuestra Pasión. Os amo, ¡oh Jesús, amor mío!, más que a mi mismo, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

 

septima estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio

 SÉPTIMA ESTACIÓN

Jesús cae la segunda vez con la cruz

V. Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera la segunda caída de Jesús debajo de la Cruz, en la cual se le renueva el dolor de las heridas de su cabeza y de todo su cuerpo al afligido Señor.

Oh pacientísimo. Jesús mio. Vos tantas veces me habéis perdonado, y yo he vuelto a caer y a ofenderos. Ayudadme, por los méritos de esta nueva caída, a perseverar en vuestra gracia hasta la muerte. Haced que en todas las tentaciones que me asalten, siempre y prontamente me encomiende a Vos. Os amo, ¡ oh Jesús, amor mío! más que a mí mismo, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

octava estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio
OCTAVA ESTACIÓN
Las mujeres de Jerusalén lloran por Jesús

V. Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera cómo algunas piadosas mujeres, viendo a Jesús en tan lastimosa estado, que iba derramando sangre por el camino, lloraban de compasión; mas Jesús les dijo: no lloréis por mí, sino por vosotras mismas y por vuestras hijos.

Afligido Jesús mío: lloro las ofensas que os he hecho, por los castigos que me han merecido, pero mucho más por el disgusto que os he dado a Vos, que tan ardientemente me habéis amado. No es tanto el Infierno, como vuestro amor, el que me hace llorar mis pecados. Os amo, ¡ oh Jesús, amor mío!, más que a mí mismo, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

novena estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio

 NOVENA ESTACIÓN

Jesús cae por tercera vez con la cruz

V. Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera la tercera caída de Jesucristo. Extremada era su debilidad y excesiva la crueldad de los verdugos, que querían hacerle apresurar el paso, cuando apenas le quedaba aliento para moverse.

Atormentado Jesús mío: por los méritos de la debilidad que quisisteis padecer en vuestro camino al Calvario, dadme la fortaleza necesaria para vencer los respetos humanos y todos mis desordenados y perversos apetitos, que me han hecho despreciar vuestra amistad. Os amo, ¡oh Jesús, amor mío!, más que a mí mismo, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

decima estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio

 DÉCIMA ESTACIÓN

Jesús es despojado de sus vestiduras

V. Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera cómo al ser despojado Jesús de sus vestiduras por los verdugos, estando la túnica interior pegada a las carnes desolladas por los azotes, le arrancaran también con ella la piel de su sagrado cuerpo. Compadece a tu Señor y dile:

Inocente Jesús mío: por los méritos del dolor que entonces sufristeis, ayudadme a desnudarme de todos los afectos a las cosas terrenas, para, que pueda yo poner todo mi amor en Vos, que tan digno sois de ser amado. Os amo, ¡oh Jesús, amor mío!, más que a mí mismo, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

undecima estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio

 UNDÉCIMA ESTACIÓN

Jesús es clavado en la cruz

V. Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera cómo Jesús, tendido sobre la Cruz, alarga sus pies y manos y ofrece al Eterno Padre el sacrificio de su vida por nuestra salvación; le enclavan aquellos bárbaros verdugos y después levantan la Cruz en alto, dejándole morir de dolor, sobre aquel patíbulo infame.

Oh despreciado Jesús mío. Clavad mi corazón a vuestros pies para que quede siempre ahí amándoos y no os deje más. Os amo, ¡oh Jesús, amor mío!, más que a mí mismo, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido: no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez: haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

duodecima estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio

 DUODÉCIMA ESTACIÓN

Jesús muere en la cruz

V. Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera cómo Jesús, después de tres horas de agonía, consumido de dolores y exhausto de fuerzas su cuerpo, inclina la cabeza y expía en la Cruz.

Oh difunto Jesús mío. Beso enternecido esa Cruz en que por mí habéis muerto. Yo, por mis pecados, tenía merecida una mala muerte, mas la vuestra es mi esperanza. Ea, pues. Señor, por los méritos de vuestra santísima muerte, concededme la gracia de morir abrazado a vuestros pies y consumido por vuestro amor. En vuestras manos encomiendo mi alma. Os amo, ¡oh Jesús, amor mío!, más que a mí mismo, y me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

decimo tercera via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio

 DECIMOTERCERA ESTACIÓN

Jesús es bajado de la cruz

V. Te adoramos. Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera cómo, habiendo expirado ya el Señor, le bajaron de la Cruz dos de sus discípulos. José y Nicodemo, y le depositaran en los brazos de su afligida Madre, María, que le recibió con ternura y le estrechó contra su pecho traspasado de dolor.

Oh Madre afligida. Por el amor de este Hijo, admitidme por vuestro siervo y rogadle por mí. Y Vos, Redentor mío, ya que habéis querido morir por mí, recibidme en el número de los que os aman más de veras, pues yo no quiero amar nada fuera de Vos. Os amo, ¡ oh Jesús, amor mío!, más que a mí mismo, me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

decimo cuarta estacion via crucis semana santa krouillong karla rouillon gallangos no recibas la eucaristia en la mano comunion en la mano yo no recibo la eucaristia en la mano san alfonso maria de ligorio

 DECIMOCUARTA ESTACIÓN

Jesús colocado en el sepulcro

V. Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

Considera cómo los discípulos llevaron a enterrar o Jesús, acompañándole también su Santísima Madre, que le depositó en el sepulcro con sus propias manos. Después cerraron la puerta del sepulcro y se retiraron.

Oh Jesús mío sepultado. Beso esa losa que os encierra. Vos resucitasteis después de tres días; por vuestra resurrección os pido y os suplico me hagáis resucitar glorioso en el día del juicio final para estar eterna-mente con Vos en la Gloria, amándoos y bendiciéndoos. Os amo, ¡ oh Jesús, amor mio!, más que a mí mismo, me arrepiento de todo corazón de haberos ofendido; no permitáis que vuelva a separarme de Vos otra vez; haced que os ame siempre y disponed de mí como os agrade. Amén.

Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria.

Amado Jesús mío,
Por mí vas a la muerte,
Quiero seguir tu suerte,
Muriendo por tu amor;
Perdón y gracia imploro,
Transido de dolor.

Después, volviendo al altar mayor, se rezan cinco Padrenuestros, cinco Avemarías y cinco Glorias por las cinco llagas de Jesucristo; además un  Padrenuestro, un Ave María  y un Gloria por las intenciones del Santo Padre, para poder ganar todas las otras indulgencias concedidas a esta devoción.

–/–

Ver también EL VIA MATRIS

Te invito a leer este artículo sobre la SEMANA SANTA: LA SEMANA QUE CAMBIÓ AL MUNDO y estas recomendaciones para  el MIÉRCOLES DE CENIZA y la CUARESMA

Si quieres hacer una obra de misericordia enseña a otros a orar.

Otras oraciones que puedes aprender:

LA CORONILLA DE LA DIVINA MISERICORDIA

ROSARIO DE SAN MIGUEL ARCÁNGEL

EL SANTO ROSARIO

CIEN RÉQUIEM

Que Dios les conceda a todos las Gracias que necesiten.

Karla Rouillon Gallangos

Googlea “krouillong” y encuéntranos en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter, Google Plus, Slideshare, Youtube, Gloria.tv, Ivoox, Soundcloud, Pinterest y May Feelings.