MALTRATO y GROSERÍA CONTRA EL PERÚ MILENARIO.
Como en tiempos que creíamos superados hace decenas de años, en estos días vemos el espectáculo inusitado y recurrente de ciudadanos peruanos que pretenden insultar y denigrar impunemente nuestra historia nacional y con ello a los demás peruanos.
Así, en un importante periódico de circulación nacional, un señor llamado Aldo Mariátegui, pregona abiertamente contra lo que denomina “FALSEDADES ANDINAS”, afirma que el “AMA SUA” nunca existió y que el Imperio Incaico “tan imperio era, que no llegó a los cien años”. Dentro de una serie de afirmaciones que pretenden negar la milenaria historia que se vivió en estas tierras, antes de la llegada del resto del mundo, en plan de invasión y conquista.
Pero el episodio del señor Mariátegui, en modo alguno resulta aislado, se da en un contexto en que una serie de voces a través de periódicos y redes sociales hablan y despotrican contra una mayoría de los hombres del Ande, befándolos por no pensar igual que ellos y por haber votado a favor de determinada candidatura, contraria a sus apetencias.
Ignoran o pretenden ignorar estos señores, que las personas son libres de votar y elegir a quién les plazca; que esa es la belleza, ese es el encanto y la razón de ser sustancial de la democracia. Y que el Perú es un país plural, en donde convivimos muchas razas, culturas y colectividades diversas. Una sociedad en la cual resulta imprescindible, razonable y hasta prudente: cumplir o acatar un pacto social implícito, para poder coexistir y sobrevivir. Y ese pacto es: respetar a los demás; respetar a todos los peruanos que son étnica o culturalmente diferentes a uno mismo.
Ese mandato fundamental y básico, de respeto y entendimiento mutuo cobra mayor vigencia, si nos percatamos que el PERÚ, le debe todo: territorio, civilización y grandeza a su historia milenaria y a sus pobladores milenarios. En efecto: cómo fue que se logró la unidad territorial en este país? Quién o quiénes fueron los que lograron asentar las bases de la convivencia plural en estas tierras, unificando a las distintas colectividades originarias, antes de la llegada de Occidente y su cultura? Quiénes fueron los que domaron valles, montañas, arenales y quebradas, irrigando, cultivando y domesticando plantas que hoy sirven de alimento al mundo entero?¡ Obviamente que fueron las culturas y los estados andinos precolombinos!! Sobre ello, hombres esclarecidos, no solo indigenistas, sino patricios criollos de profunda convicción peruanista, como José de la Riva Agüero y Víctor Andrés Belaúnde reconocieron que: el Virreinato hispano de Lima y la república criolla fueron herederas y se irguieron sobre las bases del legado histórico y territorial de los hombres andinos; más precisamente, sobre la tradición de dominio sobre estas tierras, que nos dejó el llamado Incario o Tahuantinsuyo.
Y a pesar de ello, la rotunda realidad del PERÚ no acaba de ser entendida ni asumida por personas que deberían hacerlo y practicarlo. Es por eso que Aldo Mariátegui confunde sus divagaciones, sus temores y fobias ideológicas, con disquisiciones históricas, atreviéndose sin mayor fundamento ni dotación académica, a despotricar contra lo que ni ARNOLD TOYNBEE, ni JHON MURRA, ni JHON ROWE, ni JOSÉ de la RIVA AGÜERO, ni VICTOR ANDRES BELAUNDE se atrevieron a despotricar.
En estos días, asistimos a una etapa compleja de pugnas y desencuentros, cuando no de escarnio y discriminación zafia y grosera, de unos pocos, en contra de la mayoría de peruanos. Es razonable esto?