El niño con el pijama de rayas
Como verán, y haciendo un poco de memoria, ésta no es una historia original, pues ya la vimos antes con el genial Roberto Benigni en La vida es bella, pero igual es una película atractiva ya que cuenta con la participación actoral de dos niños que, realmente, nos arrancan el corazón, convirtiendo a esta cinta en un inevitable lacrimógeno.
Quizá ese sea el punto débil de la película, pues desde el principio ya se nos anuncia de qué tratará; sin embargo, no deja de ser atractiva, mucho más si sabemos que está basada en un fenómeno literario en el viejo continente; es decir, la novela de John Boyne El niño con el pijama de rayas. Sumado a la buena actuación de los niños, hay un excelente acompañamiento fotográfico y musical, que convierten a esta cinta en la mejor entrada a salas mistianas para reconciliarnos con el espíritu pascual que hubo la semana pasada.