La propuesta
La cinta no pasa de ser una secuencia de situaciones repleta de equívocos, algunos gags donde la Bullock se luce (ojo a la de la ducha) y nada más, pero de allí a pretender que salgamos envueltos de sentimentalismo o desternillados de risa, nada que ver.
En todo caso, lo que nos ha parecido más atractivo es la fotografía de unos estupendos escenarios ubicados en Alaska donde se desenvuelve la mayoría de la historia y las actuaciones secundarias donde destaca la veterana Betty White. Ella prácticamente termina arrebatándole la cinta a la dupla Bullock Reynolds, pues cada aparición que hace sazona con creces las muchas veces desabrida actuaciones de la pareja.
Como verán, la bendita gripe marrana también nos quitó la oportunidad de espectar en estas fiestas mejores cosas, así que si ya vió a Scrat y Potter y no quiere saber nada con la Bullock, entonces mejor a quedarse en casa y cantar el himno nacional, porque ni siquiera desfile tendremos para ver.