Sintetizando el mensaje
Como sabemos, los mensajes presidenciales no sólo sirven para hacer el arqueo de cómo vamos, en especial del año precedente, sino también es una buena ocasión usada por los presidentes para anunciar lo que se viene, principalmente del venidero. En ese sentido, hay que reconocer que Ollanta cumplió en hacer ese balance con un tono optimista, como corresponde en su condición de mandatario, pero mareando al país con tanta lluvia de cifras. En cuanto a los anuncios, creo que éstos podrían resumirse en animados, contradictorios provocadores, soñadores y finalmente ausentes.