¿Talento?
Fue el apóstol Mateo quien introdujo el concepto talento en la Biblia para referirse a ciertos dones o cualidades que Dios nos brindaría para saber multiplicarlos. Así, el que sabe reproducirlos, a través del trabajo, tendrá más y al que no, se le quitará y echará a las tinieblas. Antes, en la antigua Grecia, llamaban talento a una unidad de medida monetaria o de peso. Entrada la modernidad, el talento está ligado a la inteligencia o cualidades innatas que convierte a una persona apta para resolver problemas o enfrentarse a complicaciones específicas.
Desde hace una treintena de años, sabemos por las investigaciones del psicólogo Howard Gardner, que el hombre está dotado de una multiplicidad de talentos o inteligencias, cada una diferente y semi independientemente de otra. Son 8 esas inteligencias que van desde lo comunicativo, musical y hasta medioambiental.
Descubrir o resaltar esos talentos se ha puesto de moda. Una franquicia mediática inventada por Simon Cowell ha llegado a nuestro país con el nombre de Perú tiene talento. Fiel al formato, el programa premia a talentos en canto, baile o cualquier habilidad inédita o extraña. Allá en Inglaterra, donde nació el programa, el ganador obtiene una millonada y el privilegio de actuar ante los miembros de la familia real. Aquí, el ganador se lleva 70,000 soles, y se las tiene que buscar aprovechando de su efímera fama, hasta que salga el siguiente ganador.
El domingo pasado fue la final de la segunda temporada de Perú tiene talento y todos estuvimos de acuerdo con el ganador: Rod Martin, un joven que deslumbró al país con la técnica de la pintura rápida, haciéndonos pensar que, efectivamente, en nuestro país sobra el talento y que sólo es cuestión de descubrirlo y darle todas las oportunidades.
Sin embargo, minutos después no faltó el aguafiestas para ponernos nuevamente en el piso, (o mejor dicho, la aguafiestas, pues hablo de Vero García) pues el talento del ganador es una fiel copia del trabajo de David Garibaldi. Ahora, para ser honestos, ni siquiera Garibaldi es el creador de esa técnica, pues de lo que conozco, a quien se le atribuye la soberanía de ese estilo es Denny Dent, quien ya se inmortalizó dibujando, a su manera, a los grandes del rock. Aquí una muestra de ese verdadero talento.
Respecto al nuestro; es decir, a ese programa que dice descubrirlo o resaltarlo, parece que, muy a tono con el carácter chicha de nuestra sociedad, se ha dedicado a resaltar el talento plagiador que parece caracterizarnos.