Magaly y el cojudeo nacional
El éxito de los programas faranduleros fue similar al de los talk shows; es decir, exponencial y ello motivó que aparecieran varios de ese género, pero el hecho que sólo haya sobrevivido el de Magaly demuestra que esta huachana le ha sabido imponer un estilo único e insuperable, pero de mucha simpleza en el fondo; es decir, su receta es: meterse dentro de las sábanas de los personajes públicos, primero de la farándula y luego del deporte, específicamente del decaído fútbol nacional.
Esa fórmula le ha funcionado muy bien haciéndola popular y millonaria. Pero a la vez, ha ganado enemigos y muchos juicios por difamación. De todos ha salido librada, pues usaba el poder mediático que tenía para que no la condenaran. Pero todo cambió la semana pasada en que fue sancionada. Como lo han confesado varios periodistas capitalinos, era tan increíble que muchos automáticamente, ella misma, lanzó la idea de la cortina de humo, que en el argot periodístico se llama cojudeo nacional.
¿Es o no una cortina de humo? Tal vez. La política, principalmente la nuestra tan escasa en argumentos, ha hecho de esta estrategia un deporte usual. Si lo de Magaly no lo construyó, en todo caso le ha caído a pelo. En todo caso, lo que más me interesa reflexionar es acerca de lo público y privado que está implícito en este hecho; es decir, cómo lo han planteado los periodistas, cuál es el límite de la prensa; o como lo plantean los científicos sociales: dónde termina es espacio privado para dar paso al público?
Pocos periodistas se hacen ese planteamiento que los invita a reconciliarse con la ética, pues la gran mayoría de medios están contaminados con la simple filosofía crematística de ¿esa noticia vende o no?. Desde las ciencias sociales, la interrogante la resuelvo recordando a Savater quien plantea que la importancia y el poder de los medios de comunicación radican en su capacidad de poner en vitrina lo socialmente útil. En sociedades infocomunicacionales como las que vivimos, creo que hay que rescatar eso; es decir, del infinito e incalculable reino de la información, lo que conviene que los medios privilegien es aquello que sirva real y efectivamente a la sociedad.
Reconozco que vivimos en la sociedad de la vanalización que, unido al morbo natural de los seres humanos, viene construyendo un apetitoso imperio ideológico, político y económico (ya se habla mucho, por ejemplo, de la magalización, como una categoría social), pero que sepamos con quién sale o se acuesta tal o cual personajillo, es útil socialmente hablando? Definitivamente, no. Pero lo burdo o morboso se ha convertido en lo que hoy vemos, en una necesidad casi nacional que capta la atención de la gente, lo cual confirmaría la tesis que la bellaquería se ha instalado en las sociedades haciéndola más cínica y mórbida. En otras palabras, la sociedad está cada vez más idiota o cojuda. Ese es el triunfo de Magaly y me imagino que eso es lo que la debe estar refocilando en la cárcel, pues sabe que no es una rea, sino la nueva heroína del país y del periodismo nacional. Así estamos.
bueno si bien es cierto magaly le da ala gente lo que quieren ver, escuchar, por que lamentablemente estamos viviendo en un mundo morboso,sucio y descarado,entonces ella ha hecho dinero con la desgracia agena.preguntese por que tiene tanto tienpo en la tv. por esa causa. particularmente no soy seguidora de pero si la veia de vez en cuando. que ha hecho daño si ha hecho mucho daño. pero lo que si yo le aplaudo a ella es que es la unica que los ha hecho mier…da alos futbolistas disques profesionales, loque pasa que son una tira de borrachos sinverguensas y chemito es un alcaguete ,gracias.