Soy leyenda

Los fanáticos de la ciencia ficción tienen a Richard Burton Matheson como uno de los iconos de ese género, pues no sólo ha escrito grandes relatos de fantasía y terror, sino que gran parte de su obra ha sido llevada a la pantalla grande y televisión. El cine ha sido el espacio que mayormente ha recogido su obra, pues una y otra vez, en distintos tiempos, sus novelas han sido recreadas para ser llevadas al ecran.Eso ha pasado precisamente con Soy leyenda, la actual cinta protagonizada Will Smith y que es todo un taquillazo (se dice que ha roto todos los records en su primera semana de exhibición). Smith encarna al Dr. Neville, prácticamente el único sobreviviente luego que la humanidad es arrasada por un virus manipulado genéticamente para curar el cáncer. La cinta en ese sentido, es brusca al presentar el drama: breves minutos iniciales para explicar la supuesta panacea milagrosa y luego el drama desolador: una Nueva York solitaria, envuelta en una selva habitada por animales salvajes que es recorrida diariamente por este hombre acompañado de su perro buscando comida para sobrevivir y también algún otro habitante. El elemento terrorífico lo proporcionan las criaturas mutantes que han sobrevivido y que salen en la noche a buscar, también, alimento.

En este nuevo remake, el director de la cinta plantea ese futuro no tan lejano: 2012, como para advertirnos de las probables consecuencias del nuevo juego humano de manipular genes. Pero más allá de ese mensaje moralista, incluso religioso que se asienta en la parte final, la cinta resulta totalmente entretenida, mezclando muy bien el drama, la aventura, el miedo y, propio de los tiempos actuales, la espectacularidad escénica (ojo con el juego de golf encima de un mirage).

Cuestión aparte es la caracterización de Will Smith quien demuestra la evolución que está teniendo como actor, pues de simple comediante televisivo, se está asentando con papeles muchos más elaborados. En Soy leyenda, simplemente se luce, pues no le quedaba otra.