LA VIGILANCIA DE LA SALUD DE LOS TRABAJADORES

[Visto: 2344 veces]

Dr. Carlos Aníbal Rodríguez (1)

La vigilancia de la salud de los trabajadores debe contribuir a la prevención primaria: la erradicación o puesta bajo control de los factores de riesgo. Debe darse garantía sobre sus objetivos, calidad, y protección de los intereses de los trabajadores. Resulta indispensable garantizar la independencia e imparcialidad de los profesionales de la salud competentes y la confidencialidad de los datos individuales de salud.

Para que un programa de exámenes médicos ocupacionales sea efectivo debe reunir, ineludiblemente las siguientes características:

  • Debe ser selectivo, aplicándose los estudios apropiados para detectar precozmente la acción de los factores de riesgo (específicos para cada trabajador) sobre la salud
  • Debe permitir identificar las exposiciones inadecuadas
  • Debe permitir identificar la enfermedad en estadío de latencia o permitir disminuir la morbilidad
  • Debe permitir, por lo tanto, el seguimiento adecuado y debe haber un manejo de la enfermedad que sea accesible y aceptable.

Teniendo en cuenta esto resulta indispensable, en los operadores sanitarios, el conocimiento clínico, el toxicológico, los de higiene industrial, el análisis epidemiológico y el clínico, el conocimiento de las normas, los principios éticos, entre otros.

En el proceso de diseño y puesta en marcha de un programa de vigilancia de la salud de los trabajadores resulta indispensable conocer:

  • Identificación y evaluación de los riesgos de la empresa, el sector y el puesto de trabajo
  • Valoración de la existencia y modalidad de la exposición
  • Identificación de los posibles efectos sobre la salud y de los “órganos blanco”
  • Caracterización de la población
  • Análisis de los instrumentos a ser utilizados
  • Diseño de la Historia Clínica/encuesta/ o formulario.
  • Desarrollo de los Criterios de Acción
  • Selección de los proveedores
  • Estandarización del proceso
  • Definición de las comunicaciones, los registros, el soft.
  • Realización de los exámenes
  • Interpretación de los resultados
  • Confirmación de los resultados
  • Determinación de la aptitud para el trabajo
  • Notificación
  • Evaluación del diagnóstico
  • RE- Evaluación de las condiciones de trabajo y Control de la Exposición

Naturalmente cada uno de estos puntos son solo títulos y cada uno necesitaría una descripción para lo cual se requeriría una extensión inadecuada para este blog.

A guisa de ejemplo veamos algunas de las cuestiones que debemos considerar en cuanto a los instrumentos a ser utilizados. Así cuando consideramos uno de ellos resulta esencial determinar su Validez, recordando que ella es la consecuencia de la suma entre la sensibilidad y la especificidad. Recordemos que supone cada uno de estos sumandos: La sensibilidad de un test de screening está medida por la habilidad para clasificar correctamente a la población que verdaderamente tiene la condición buscada (proporción de población con la condición que tiene el test positivo) y la Especificidad es el término análogo para aquellos que tienen el test negativo y no tiene la condición. Pero además: los test debe tener confiabilidad (reproductibilidad) validez (sensibilidad y especificidad) y predictibilidad; los procedimientos deben ser incruentos y aceptables para los trabajadores (niveles de participación); debe garantizarse el mantenimiento de conductas éticas; debe garantizarse la confidencialidad de los resultados.

A la hora de interpretar los resultados lo debemos hacer al menos teniendo en cuenta la exposición, el contenido informativo de los test utilizados, los factores de confusión y los de modificación; considerando las características individuales y de factores externos; confrontando resultados individuales y grupales.

Hay algunos aspectos técnicos básicos a tenerse en cuenta en la planificación:

  • Los acuerdos básicos del equipo de salud con los trabajadores y la empresa.
  • El diseño de la historia clínica (puesto de trabajo) y del soft.
  • La selección de exámenes.
  • La calidad y los proveedores.
  • La interpretación de los resultados.
  • Las intervenciones (que es el corazón de los exámenes): ¿cuándo, cómo y dónde?

Por último creo oportuno resumir el Decálogo sobre la Vigilancia de la Salud del Istas (en el cual tuve el honor de participar):

  • La vigilancia de la salud es un componente esencial de la prevención de los riesgos laborales.
  • La vigilancia de la salud supone una nueva orientación de las actividades en el campo de la Medicina del Trabajo.
  • La vigilancia de la salud no es una actividad exclusivamente asistencial.
  • La vigilancia de la salud debe abarcar lo individual y lo colectivo.
  • La vigilancia de la salud es un elemento para la promoción de la salud de los trabajadores.
  • La vigilancia de la salud requiere protocolos de actuación específicos según los riesgos.
  • La vigilancia de la salud debe respetar la intimidad de los trabajadores y la confidencialidad de la información.
  • La vigilancia de la salud no debe generar discriminación laboral.
  • La vigilancia de la salud no debe confundirse con el control del ausentismo.
  • La vigilancia de la salud requiere independencia profesional.

(1) Experto en Vigilancia de la Salud de los Trabajadores y Médico del Trabajo. Ex Ministro de Trabajo de Santa Fé Argentina. Experto de la OIT. Integrante de la Comisión elaboradora del Convenio OIT 161. Autor de numerosas publicaciones.

Puntuación: 5 / Votos: 2

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *